Las f¨¢bricas de ladrillos acusan el par¨®n en la construcci¨®n de pisos
La baja demanda en zonas costeras paraliza algunas factor¨ªas en Bail¨¦n
La crisis del ladrillo deja de ser una met¨¢fora. El par¨®n en la construcci¨®n de vivienda, sobre todo en la costa andaluza y levantina, tiene en jaque a las ladrilleras de Bail¨¦n (Ja¨¦n), donde se concentra casi el 30% de la producci¨®n de Espa?a. Son los m¨¢s perjudicados pero no los ¨²nicos. La patronal del sector, Hispalyt, asegura que la producci¨®n est¨¢ estancada desde julio. "Sufrimos las consecuencias [del par¨®n] un a?o despu¨¦s porque nuestros productos son los ¨²ltimos que se ponen; para los pr¨®ximos dos a?os vemos una tendencia a la baja que esperamos que no sea muy acusada", explica la secretaria general de Hispalyt, Elena Santiago.
El crecimiento de producci¨®n ha sido nulo desde julio, seg¨²n la patronal
En Bail¨¦n ya han iniciado paros t¨¦cnicos para dar salida a la producci¨®n. "La demanda ha ca¨ªdo en torno a un 30% y a muchas f¨¢bricas no nos quedar¨¢ m¨¢s remedio que parar durante un tiempo", asegura Jos¨¦ Alcal¨¢, presidente de la Asociaci¨®n Provincial de Ceramistas de Ja¨¦n. De momento, s¨®lo unas cuantas de las 40 ladrilleras del pueblo han parado su actividad, pero muchas otras aprovechar¨¢n la Navidad para seguir sus pasos.
La medida trata de impedir una ca¨ªda de precios ante un exceso de oferta. De hecho, Alcal¨¢ confirma que algunas empresas han empezado a bajar sus tarifas. En 2006 hab¨ªan subido (por primera vez en 10 a?os) un 7% en el conjunto del sector por el encarecimiento de la factura energ¨¦tica en un 30%, seg¨²n explica Santiago. Este a?o aumentaron un 2,43% en el primer semestre, seg¨²n Hispalyt.
El sector consta de 430 empresas, emplea a unas 14.000 personas y produjo el pasado a?o casi 30.000 toneladas. En el primer semestre de este a?o redujo su crecimiento a la mitad (el 3,43% frente al 7,5% del mismo periodo de 2006). Y en los ¨²ltimos cinco meses, el crecimiento ha sido nulo.
Sufren m¨¢s los de Bail¨¦n, explica Santiago, porque su producto (ladrillo de arcilla para tabiques y muros) tiene bajo valor a?adido y el coste del transporte no soporta la venta m¨¢s all¨¢ de los 300 kil¨®metros. El 60% de la riqueza del municipio jiennense de 19.000 habitantes depende del sector cer¨¢mico, con 2.000 empleos directos y otros tantos indirectos.
En los ¨²ltimos a?os los productores han hecho un "gran esfuerzo" en modernizar las instalaciones, como explica Manuel N¨²?ez, propietario de Cer¨¢micas N¨²?ez. Las exigencias del Protocolo de Kioto llevaron a las f¨¢bricas a tener que cambiar sus fuentes de energ¨ªa para reducir sus emisiones de CO2 y poder continuar con la actividad.
Adem¨¢s de la ca¨ªda de la vivienda, Santiago apunta a que una nueva f¨¢brica de yeso laminado (pladur, de igual precio pero m¨¢s r¨¢pida instalaci¨®n) en Granada est¨¢ compitiendo con el ladrillo de Bail¨¦n.
La otra gran zona productora, la comarca toledana de La Sagra, que copa cerca del 35% del ladrillo, lleva mejor el par¨®n. Seg¨²n explica Francisco Rodr¨ªguez , director general del grupo La Paloma, acusan menos ese efecto por la situaci¨®n geogr¨¢fica y porque fabrican m¨¢s productos y de m¨¢s valor a?adido como tejas y ladrillo visto.
Tanto Rodr¨ªguez como Santiago conf¨ªan en que la ca¨ªda de la vivienda tenga como consecuencia que los promotores apuesten por mayor calidad y que usen m¨¢s ladrillo y menos pladur. "Soy optimista, creo que podemos mejorar la cuota de mercado", dice Santiago. Adem¨¢s el C¨®digo T¨¦cnico de la Edificaci¨®n establece m¨¢s exigencias de calidad en aislamiento t¨¦rmico y ac¨²stico, recuerda Rodr¨ªguez, de modo que el sector espera que el volumen de negocio (1.475 millones de euros en 2006) pueda aumentar aunque no crezca la producci¨®n.
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