Bruselas flexibiliza su idea de dividir los gigantes energ¨¦ticos
Una nueva propuesta protege la integridad de E.ON y EDF
Los grandes grupos energ¨¦ticos alemanes (E.ON y RWE) y franceses (EDF y GdF) se est¨¢n saliendo con la suya. La propuesta de Bruselas de separar la producci¨®n del transporte de energ¨ªa, con la segregaci¨®n total de la propiedad de las redes para facilitar la entrada de nuevos proveedores y mejorar as¨ª la competencia habr¨¢ que guardarla para mejores tiempos. Un grupo de ocho pa¨ªses, liderados por Francia y Alemania, ha logrado que la Comisi¨®n Europea vea como "una contribuci¨®n positiva" su propuesta, que evita la efectiva ruptura patrimonial de los gigantes energ¨¦ticos europeos.
La Comisi¨®n considera que esta propuesta es "una ¨²til contribuci¨®n a tener en cuenta en las pr¨®ximas discusiones". "Sin embargo", a?ade, "en la forma en que se ha propuesto no crear¨ªa los incentivos para que los operadores del sistema de transmisi¨®n invirtieran de manera no discriminatoria y en general promovieran el mercado, un justo y eficiente funcionamiento de la red y la transparencia", seg¨²n un documento interno de la Comisi¨®n al que ha tenido acceso este diario.
El documento reconoce que la propuesta liderada por Francia y Alemania mejora la situaci¨®n actual "al reforzar la regulaci¨®n en el nombramiento de los gestores de las redes de transmisi¨®n y aumentar la independencia sobre las decisiones de inversi¨®n". Pero apunta que debe incluir otros requisitos: la separaci¨®n deber¨ªa afectar tanto al gas como a la electricidad, los operadores de la red deber¨ªan ser completamente independientes de los productores en gesti¨®n e inversi¨®n, y la cooperaci¨®n regional deber¨ªa ser efectiva.
El dilema de Barroso
La segregaci¨®n de la propiedad de las redes de las grandes empresas energ¨¦ticas ha sido una de las prioridades del presidente de la Comisi¨®n, Jos¨¦ Manuel Barroso, tanto para mejorar la competencia como para avanzar en la lucha contra el cambio clim¨¢tico. Barroso, que ya engrasa sus contactos para asegurarse un segundo mandato al frente del Ejecutivo comunitario, sabe que sus anhelos se desvanecen sin el apoyo de Nicolas Sarkozy y Angela Merkel. Esta propuesta le permitir¨ªa una salida airosa, a¨²n a costa de posponer los intereses de los consumidores.
Durante los dos ¨²ltimos a?os, la ruptura de los grandes conglomerados energ¨¦ticos ha tomado tintes de aut¨¦ntica cruzada en los discursos de Neelie Kroes, comisaria de Competencia. Kroes enfatiza que "existen conflictos de inter¨¦s cuando una compa?¨ªa vende gas o electricidad y al mismo tiempo controla los gaseoductos y cables que otros suministradores necesitan para proveer a sus clientes".
El comisario de Energ¨ªa, Andris Piebalgs, ha advertido de los riesgos para la pol¨ªtica medioambiental de abandonar la separaci¨®n de redes. Bruselas quiere que buena parte de electricidad sea generada en el futuro por "peque?os productores de energ¨ªa solar, e¨®lica o mediante olas". Y, como comentaba Piebalgs en una reciente carta a Angelika Niebler, presidenta del Comit¨¦ de Energ¨ªa del Parlamento Europeo, "es obvio que las compa?¨ªas integradas verticalmente no tienen inter¨¦s" en el desarrollo de "redes inteligentes" que faciliten a esos peque?os productores la venta de energ¨ªa.
Seg¨²n la Comisi¨®n, en los pa¨ªses en los que no hubo segregaci¨®n de redes el precio de la electricidad para las familias de bajo consumo aument¨® en la ¨²ltima d¨¦cada un 30% m¨¢s que en los que s¨ª las separaron. 13 pa¨ªses, entre ellos Reino Unido y Espa?a, han efectuado ya la segregaci¨®n en electricidad, y siete lo han hecho en el gas.
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