"Nunca olvid¨¦is qui¨¦n os elige y qui¨¦n os podr¨ªa cesar: la Iglesia"
"Es cierto que sois un colectivo de trabajadores, pero un colectivo bastante singular. Nunca olvid¨¦is qui¨¦n os elige, qui¨¦n os llama, qui¨¦n os manda y qui¨¦n, si se diera el caso, os podr¨ªa cesar: la Iglesia". Esto es lo que dice por carta el delegado episcopal de Ense?anza Religiosa del Obispado de Cartagena, Francisco Rubio Miralles, a los profesores de Religi¨®n y Moral Cat¨®lica en esa di¨®cesis. Fue la pasada Navidad, como misiva de salutaci¨®n "en estos d¨ªas entra?ables" y "para reflexionar en voz alta sobre las preocupaciones y proyectos que preocupan a quienes trabajamos en esta Delegaci¨®n".
Los profesores de religi¨®n cat¨®lica en las escuelas p¨²blicas, m¨¢s de 15.000, son contratados y pagados por el Estado, pero seleccionados por los obispos para cada curso escolar. Pese a estar amparados, desde la entrada en vigor de la LOE, por el Estatuto de Trabajadores, los prelados sostienen que pueden enviarlos al paro por causas como casarse por lo civil, vivir "con un hombre que no es su marido" o militar en sindicatos y partidos de izquierda. Centenares de sentencias han reprochado a los obispos esas actuaciones.
Pese a la inestabilidad laboral con que se amenaza a los docentes religiosos en las escuelas del Estado, el dirigente episcopal cartagenero a?ade en su carta que ello "deber¨ªa ser para todos motivo de tranquilidad y alegr¨ªa". A?ade: "Para ella [la Iglesia], no sois un n¨²mero al azar, sino personas concretas, con vuestras circunstancias concretas. Tambi¨¦n es cierto que recib¨ªs la retribuci¨®n econ¨®mica de otra Instituci¨®n, que es la que os contrata. Sin embargo, sab¨¦is muy bien que no existir¨ªa ese contrato si previamente la Iglesia no os presentara".
"Voces de sirena"
El delegado diocesano advierte a los docentes, adem¨¢s, de "las voces de sirena que quieren atraeros con la dulzura de sus cantos", en aparente alusi¨®n a las promesas de la LOE de amparar sus contratos con el Estatuto de Trabajadores. Seg¨²n la misiva, se tratar¨ªa de "promesas que, m¨¢s pronto o m¨¢s tarde, se convierten en amargas realidades". A?ade: "A cada uno de vosotros se os plantea, sin tener por qu¨¦, un dilema ante el que ten¨¦is que decidir. Comprendo que la situaci¨®n es inc¨®moda. Pero tambi¨¦n podemos verla como una ocasi¨®n estupenda para manifestar con fuerza vuestra adhesi¨®n a la Iglesia y, en concreto, a vuestro obispo".
El delegado diocesano tambi¨¦n les dice a sus docentes que la "manifestaci¨®n expresa" de su pertenencia eclesial "se hace, en estos momentos, m¨¢s necesaria que nunca".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.