La extinci¨®n del andalucismo
Polit¨®logos, soci¨®logos e historiadores subrayan el escaso hueco para un partido de corte nacionalista
Despu¨¦s del dram¨¢tico naufragio del pasado domingo del Partido Andalucista (PA), que se ha quedado por primera vez sin ninguna representaci¨®n en el Parlamento desde que se instaur¨® la autonom¨ªa, surgen varias preguntas inmediatas: ?Hay espacio para un partido nacionalista en Andaluc¨ªa? ?Hace falta? ?Han cubierto este espectro los partidos de ¨¢mbito estatal? ?Es posible la reconstrucci¨®n?
"El nacionalismo como concepto no se puede utilizar en Andaluc¨ªa"
Los estudiosos del tema coinciden respecto a las enormes dificultades a las que se enfrenta esta opci¨®n pol¨ªtica para recuperar la posici¨®n perdida de forma tan lacerante: de cinco esca?os a cero, de estar en el Gobierno de la Junta hace s¨®lo seis a?os a la invisibilidad. El director del Instituto de Estudios Sociales Avanzados de Andaluc¨ªa (IESA), Manuel P¨¦rez Yruela, opina que el andalucismo pol¨ªtico tuvo un sitio claro en la transici¨®n y que ha ido apag¨¢ndose por los vaivenes que ha dado el partido que lo representa. "Para un nacionalismo tradicional no hay base social, el PSOE andaluz es quien ha ido ocupando el hueco, recogiendo con sensatez y sin grandes alharacas la idea del andalucismo en el sentido m¨¢s amplio de reivindicaci¨®n para salir del subdesarrollo".
Susana Corzo, profesora de Ciencias Pol¨ªticas y de la Administraci¨®n de la Universidad de Granada, secunda esta tesis, y es m¨¢s tajante en cuanto a los plazos. Seg¨²n ella, el PSOE absorbi¨® ya este espacio en el mismo proceso constituyente de la autonom¨ªa, el refer¨¦ndum del 28 de Febrero de 1980, con la figura de Rafael Escuredo, el primer presidente electo de la Junta. "Lo que ocurre es que mientras permanecieron en pol¨ªtica l¨ªderes tan fuertes como Alejandro Rojas-Marcos y Pedro Pacheco
qued¨® un grupo con ese sentimiento. En el momento que ha entrado otra generaci¨®n, se ha ido conformando un desencanto que ha acabado con la fuerza pol¨ªtica".
La polit¨®loga apunta, adem¨¢s, que Coalici¨®n Andalucista (CA) -la oferta unitaria de ¨²ltima hora que englobaba a PA, PSA y otros siete partidos- es fruto de la reuni¨®n de unos cuantos dirigentes que tienen predicamento en sus municipios, pero s¨®lo ah¨ª. De hecho, a excepci¨®n del PA, el resto de las formaciones eran ya extra parlamentarias antes de las elecciones del 9 de marzo.
Tanto P¨¦rez Yruela como Corzo distinguen constantemente entre nacionalismo y andalucismo. La cuesti¨®n de si existe o no el nacionalismo andaluz carece de respuesta categ¨®rica. Est¨¢ llena de matices y, sobre todo, de acotaciones y a?adidos (mestizaje, actitud abierta, solidaridad) que, a la postre, terminan por despojar a este concepto de su significado pol¨ªtico, como se entiende, por ejemplo, a la manera vasca o catalana.
"El nacionalismo como concepto no se puede utilizar en Andaluc¨ªa, aqu¨ª lo que existe es la identidad de pueblo, pero no la lucha pol¨ªtica por crear una naci¨®n", subraya Susana Corzo.
Las encuestas demuestran esta afirmaci¨®n, que no discute casi nadie. El ¨²ltimo estudio de opini¨®n del Centro de An¨¢lisis y Documentaci¨®n Pol¨ªtica y Electoral de Andaluc¨ªa (Capdea), del oto?o pasado, se?ala el predominio de la identificaci¨®n dual de los andaluces con Andaluc¨ªa y Espa?a, con un 61,6%, mientras que un 17,1% se siente m¨¢s andaluz que espa?ol, y un irrelevante 1,4% ¨²nicamente andaluz. Seg¨²n el director del centro, Juan Montabes, catedr¨¢tico de Ciencias Pol¨ªticas de la Universidad de Granada, este porcentaje es muy similar al de Galicia, comunidad con lengua propia, por lo que hay que pensar m¨¢s en un sentimiento de identidad que en el nacionalismo tradicional, lo que no impide a su juicio, que haya sitio para un partido con esta connotaciones, como ha sido siempre el PA.
Montabes opina que la desaparici¨®n de los andalucistas responde m¨¢s a sus errores y barquinazos estrat¨¦gicos. "Hay espacio para un partido nacionalista, PSOE y PP han fagocitado al PA por la falta de continuidad de liderazgo y los vaivenes, que producen desorientaci¨®n en el electorado y falta de anclaje. A ello ha contribuido el puzzle de siglas. No es porque no haga falta. UCD, por ejemplo, fue un partido que naci¨® para la transici¨®n y muri¨® con ella, pero el andalucismo no surgi¨® para la construcci¨®n de la autonom¨ªa, ha estado siempre como tercer o cuatro partido, incluso ha servido para la gobernabilidad". Sin embargo, ve muy dif¨ªcil que vuelva a haber en el Parlamento un partido de obediencia andaluza.
En este punto, Susana Corzo cree que la necesidad de que haya o no un partido andalucista no es la cuesti¨®n. "Que est¨¦ el PA en el Parlamento por su condici¨®n andalucista no tiene importancia, la tiene por la falta de pluralidad. Cuanto m¨¢s grupos mejor, las minor¨ªas deben tener voz".
Jos¨¦ Rodr¨ªguez de la Borbolla, que ha vivido de cerca la construcci¨®n de la autonom¨ªa como presidente de la Junta (1984-1990), considera que el espacio del andalucismo nunca ha sido estable y se ha beneficiado de los bajones del resto de los grupos. "Ha dependido de la capacidad de respuesta de otros partidos, es decir, el hueco de otros partidos lo han ido ocupando ellos". Seg¨²n su criterio, la presencia del PA estaba ligada a determinadas figuras: Alejandro Rojas-Marcos, Luis Uru?uela, Miguel ?ngel Arredonda, Diego de los Santos. "Va a ser dif¨ªcil recuperar el sitio porque la reivindicaci¨®n andaluza est¨¢ en el Estatuto. El grupo dirigente original no ha hallado relevo equiparable".
El historiador Manuel Ruiz Romero, especialista en nacionalismo andaluz, coincide con Montabes en que el hundimiento andalucista responde fundamentalmente a la falta de cr¨¦dito entre los electores y no a que sea innecesario. Y apunta una nueva ¨®ptica: la mutaci¨®n del tipo de votantes del PA: "En las elecciones municipales de Sevilla fue el PP quien se llev¨® sus votos, y ahora parece que ha sido otra vez el PP". Adem¨¢s, hay que tener en cuenta tambi¨¦n los aciertos de PSOE y PP, que han sabido atraerse el electorado desconcertado por el andalucismo.
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