"Nada de nervios, esto no cuenta en la nota final"

"Ha sido un petardo, facil¨ªsimo". A sus 14 a?os, Arnaldo Rodr¨ªguez sale sobrado del primer examen. Dictado sobre anorexia y bulimia -"lo han le¨ªdo un poco r¨¢pido, la verdad"- y comentario de texto de un extracto del Nuevo retablo de don Cristobita, de Camilo Jos¨¦ Cela, que ¨¦l resume como "la historia de un ni?o que no para de medirse las orejas". Con el cuello de la camisa levantado y apoyado en el filo del pupitre, el chaval confiesa que ni pizca de nervios. "Es que el examen no cuenta para la nota final".

La Comunidad de Madrid convoc¨® ayer por primera vez a casi 60.000 alumnos de 3? de educaci¨®n secundaria obligatoria (ESO) de la regi¨®n a un examen de lengua y matem¨¢ticas. El ejercicio, similar al que realizan los alumnos de 6? de Primaria desde 2005, no punt¨²a en el expediente. "S¨®lo sirve para que conozcamos el nivel de nuestros alumnos antes de dejar la ESO", explic¨® ayer la consejera de Educaci¨®n, Luc¨ªa Figar. Tanto la Federaci¨®n de Asociaciones de Padres (FAPA) Giner de los R¨ªos como CC OO rechazan el sistema por preguntar "s¨®lo sobre conocimientos aislados", seg¨²n la FAPA, mayoritaria en Madrid. Para Comisiones, el examen es "un ejercicio de oposici¨®n a Zapatero por parte de Aguirre".

En el instituto de ense?anza secundaria (IES) p¨²blico La Estrella, donde participaron 115 estudiantes, la trampa de la prueba de lengua fue la misma para casi todos. "No ten¨ªa muy claro qu¨¦ significa conmiseraci¨®n", resume Irene Arroyo, alumna aplicada. Pero la peor parte lleg¨® con la prueba de matem¨¢ticas. "Era bastante dif¨ªcil", asegura Arnaldo Rodr¨ªguez. Ecuaciones, ra¨ªces cuadradas y hasta c¨¢lculos con un precio impensable estos d¨ªas: 80 c¨¦ntimos por litro de gas¨®leo. Y adem¨¢s, sin calculadora. "Normalmente, s¨ª la usamos". Aun as¨ª, cree que est¨¢ aprobado. Su amigo Adri¨¢n Mart¨ªn, que admite que siempre arrastra alguna para septiembre, no las tiene todas consigo. "Creo que he suspendido". Los polinomios, seg¨²n dice, no son lo suyo.