Mario Garc¨ªa-Oliva, un abogado antifranquista
Fue senador del PSOE y magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria
Ha muerto Mario Garc¨ªa-Oliva P¨¦rez, ex senador del PSOE y ex magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC). El pr¨®ximo 19 de junio habr¨ªa cumplido 80 a?os. Llevaba casi dos d¨¦cadas alejado de la pol¨ªtica activa, con el solo testimonio de sus inquietudes p¨²blicas en conversaciones privadas, vivo el recuerdo de su generosidad como uno de los abogados de causas perdidas en la arriesgada oposici¨®n a la dictadura franquista. Fue quien realiz¨® en Cantabria el mayor n¨²mero de defensas en el despreciable y extinguido Tribunal de Orden P¨²blico, ante los tribunales militares o en procesos laborales conflictivos.
Democristiano de confesi¨®n, Garc¨ªa-Oliva milit¨® en la oposici¨®n al franquismo desde la izquierda. Muerto Franco en 1975, se integr¨® en Izquierda Democr¨¢tica, el partido de Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez, formando parte de su ejecutiva nacional. Fue su candidato en las primeras elecciones democr¨¢ticas, en junio de 1977, sin ¨¦xito. Poco despu¨¦s, recal¨® en el PSOE, partido por el que fue concejal en el Ayuntamiento de Santander entre 1979 y 1983, y senador entre 1979 y 1986. En el Senado presidi¨® la Comisi¨®n de Justicia.
En 1989, el Consejo del Poder Judicial lo eligi¨®, a propuesta del Parlamento de Cantabria, para entrar en la carrera judicial por el turno de letrados de reconocido prestigio. Como tal fue nombrado magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria. All¨ª permaneci¨® hasta la jubilaci¨®n. Su indudable perfil pol¨ªtico, al que nunca renunci¨®, le iba a causar no pocos sinsabores, entre otros por su participaci¨®n en el proceso que acab¨® condenando por prevaricaci¨®n y malversaci¨®n al presidente de la comunidad en aquel momento, el conservador Juan Hormaechea. Garc¨ªa-Oliva hab¨ªa tenido con el encausado no pocos altercados dial¨¦cticos cuando ambos eran ediles del Ayuntamiento santanderino, Hormaechea como alcalde.
Los recursos de ¨¦ste ante el Tribunal Constitucional, por considerar que Garc¨ªa-Oliva y el presidente del TSJC, Claudio Movilla, hab¨ªan actuado con manifiesta enemistad, concluyeron con la anulaci¨®n del proceso y su posterior repetici¨®n. Los magistrados del Constitucional sentenciaron que la actuaci¨®n de Garc¨ªa-Oliva hab¨ªa sido impecable, pero no la del presidente del tribunal y ponente, Claudio Movilla, muy severamente censurado en el fallo del TC.
No guardaba buen recuerdo Garc¨ªa-Oliva de su paso por el TSJ porque, en realidad, su vocaci¨®n eran la Historia y el Derecho Privado, con may¨²sculas.
Se nota en los datos de su biograf¨ªa, recogida de Europa Press. Fue secretario del Colegio de Abogados de Santander entre 1970 y 1975, acad¨¦mico correspondiente de la Real de la Historia y consejero de Honor de la Instituci¨®n Cultural de Cantabria y del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas. Tambi¨¦n form¨® parte de la Junta de Trabajo de Estudios Monta?eses, de la Real Academia de Jurisprudencia y de otras corporaciones culturales. Es autor de diversos trabajos de investigaci¨®n hist¨®rica, entre los que destaca La abogac¨ªa en Cantabria, publicado en 1993, el primer estudio sobre la historia del Colegio de Abogados de la regi¨®n. Perteneci¨® a la Asociaci¨®n Internacional de J¨®venes Abogados, a la Asociaci¨®n Espa?ola de Cooperaci¨®n Europea y al Movimiento Europeo desde 1962.
Estaba casado y ten¨ªa nueve hijos, entre ellos el actual director general de Medio Ambiente y diputado regional en la anterior legislatura auton¨®mica, Javier Garc¨ªa-Oliva.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.