"Nos sentimos en la obligaci¨®n de dar cabida a todos los p¨²blicos"

Miguel Mart¨ªn (San Sebasti¨¢n, 1952) lleva al frente del Jazzaldia de San Sebasti¨¢n desde 1978, salvo un peque?o par¨¦ntesis entre 1988 y 1991. Una dilatada experiencia como director del acontecimiento musical en su g¨¦nero m¨¢s antiguo de Espa?a, que se renueva cada a?o, con una programaci¨®n m¨¢s abierta, pero que mantiene firme su vinculaci¨®n con el jazz.

Pregunta. El Jazzaldia abandona, por primera vez en sus 43 a?os de historia la plaza de la Trinidad ?C¨®mo han afrontado este cambio?

Respuesta. Tratamos de ofrecer una programaci¨®n de suficiente impacto, con novedades positivas que nos permitan olvidar la sensaci¨®n negativa que supone abandonar ese emplazamiento emblem¨¢tico. Nos ha supuesto muchos quebraderos de cabeza, la b¨²squeda de nuevos escenarios y la apuesta por una programaci¨®n completa. Eso s¨ª, no hemos dejado desprotegido el flanco jazz¨ªstico.

"Hemos apostado por un programa completo sin dejar de lado el jazz"

"Liza Minnelli est¨¢ fant¨¢stica. Ofrecer¨¢ temas suyos y de su madre"

"Los j¨®venes consumen mucha m¨²sica y no se les puede obviar"

P. Pero entre los ingredientes del programa no sobresale el jazz y eso se le critica.

R. No s¨¦ cu¨¢ntos festivales ofrecen la actuaci¨®n en cinco d¨ªas de Keith Jarret, Kenny Barron, Diana Krall, Ahmad Jamal o el grupo formado por Chick Corea, Stanley Clarke, Al Di Meola y Jenny White.

P. Por cierto, Keith Jarrett repite actuaci¨®n, la cuarta desde 2000. Parece vivir un romance con San Sebasti¨¢n.

R. No llegar¨ªa a tanto, pero s¨ª es cierto que le encanta la sala, el piano y el sonido que se consigue. As¨ª que nos visita siempre que puede, porque es m¨²sico de ciudades predilectas, como le ocurre con Copenhague.

P. Chick Corea tambi¨¦n es otro de los habituales, sobre todo despu¨¦s de que en 1981 alcanzara el r¨¦cord de asistentes a un concierto, congregando a 14.000 personas en el Vel¨®dromo de Anoeta.

R. Pero no es s¨®lo Chick Corea, porque a San Sebasti¨¢n llega una formaci¨®n de gala de un reencuentro hist¨®rico, con Stanley Clarke, Al Di Meola y Lenny White, que no extra?a que se presente como Return to Forever. Pero es que, adem¨¢s, el Auditorio del Kursaal resulta muy atractivo para nuestros invitados. S¨®lo quiero recordar que Paolo Conte y Liza Minnelli acuden porque van a ofrecer su concierto en este recinto.

P. Por cierto, dos veteranos de lujo. ?Qu¨¦ tal est¨¢n?

R. Paolo Conte muy bien, en plena forma. Est¨¢ impecable, adem¨¢s de que su voz tampoco requiere de sobreagudos. Nuestra ¨²nica posible duda pudo ser en su momento Liza Minnelli. Me fui a verla y la encontr¨¦ fant¨¢stica. Acaba de adelgazar. Se cuida y est¨¢ muy bien.

P. ?Con qu¨¦ espect¨¢culo viene a San Sebasti¨¢n?

R. No es un espect¨¢culo de music-hall. Es el de una cantante, con una orquesta peque?a, sin secci¨®n de viento, como una docena en escena. Es una mujer muy extrovertida, que comunica muy f¨¢cil, y que ofrecer¨¢ las canciones m¨¢s conocidas de su repertorio y, tambi¨¦n, las de su madre, Judy Garland, que durante a?os se hab¨ªa negado a interpretar.

P. Parece que ha superado la mala fama que le acompa?a.

R. Bueno, es cierto que Liza Minnelli ha vivido ciertos excesos, pero nunca los ha negado. Es m¨¢s, en el escenario hace bromas con el asunto, comenta que se va a tomar una copa, asume que es algo conocido, pero tambi¨¦n advierte de que no es su principal problema. "A la gente le deber¨ªa preocupar m¨¢s que estoy operada dos veces de la cadera y tres de la rodilla", ha comentado en alguna que otra ocasi¨®n.

P. Y Lou Reed ha dado plant¨®n al festival.

R. ?l se lo pierde. Estamos muy enfadados, porque su comportamiento excede todos los convenios de esta profesi¨®n. No viene porque no le da la gana, porque ha decidido cambiar de planes. No le podemos acusar de ladr¨®n porque ha devuelto el dinero adelantado, pero s¨ª de falta de profesionalidad.

P. En su lugar, viene Bobby McFerrin con el Orfe¨®n Donostiarra.

R. Pero no le sustituye, porque nunca buscamos eso. Por eso pasamos de un mito rock, Lou Reed, a un mito jazz-pop, con p¨²blicos diferentes.

P. La programaci¨®n de este a?o supera con creces el ¨¢mbito del jazz.

R. Somos rigurosos en la definici¨®n de algunos escenarios como la sala de c¨¢mara del Kursaal para liberar otros, como el Escenario Verde, en la playa de la Zurriola. En este emplazamiento nos dirigimos a un p¨²blico que est¨¢ escuchando m¨²sica indie, que no espera un concierto de rythm'n'blues tremendo, sino como conciertos m¨¢s reposados, como el de Kings of Convenience, un grupo de culto en Europa, que vienen por vez primera a Espa?a.

P. Es decir, un festival para todos los p¨²blicos.

R. Nos sentimos en esa obligaci¨®n, porque la gente joven mantiene un alto consumo de m¨²sica y no se le puede dejar de lado. Y la verdad es que a este p¨²blico la palabra jazz no le resulta muy atractiva.