Un restaurante fantasma, premio a la excelencia

La prestigiosa -hasta ahora- revista americana de enolog¨ªa Wine Spectator ha concedido uno de sus premios de este a?o a la carta de vinos de L'Osteria L'Intrepido de Mil¨¢n. En circunstancias normales, este galard¨®n significar¨ªa un considerable aumento de prestigio y clientela. Pero resulta que la carta de vinos no es m¨¢s que eso, parte de un men¨² colgado en la web. No hay ninguna bodega en el restaurante porque no existe ning¨²n restaurante.

"Trato de ayudar a desmitificar a los expertos, las marcas y los precios"

"Quer¨ªa saber si se puede ganar con una 'lista reservada' desastrosa"

El 'efecto placebo del vino' es evaluar mejor al pensar que es m¨¢s caro

En su libro 'The wine trials', recomienda 100 vinos excelentes por menos de 10 euros

L'Osteria L'Intrepido es un experimento del cr¨ªtico gastron¨®mico y catador de vino estadounidense Robin Goldstein. "Trataba de explorar los est¨¢ndares de los concursos gastron¨®micos", explica Golstein en conversaci¨®n telef¨®nica desde Tejas (Estados Unidos) en un espa?ol fluido -estuvo haciendo gu¨ªas de viaje en Barcelona hace ocho a?os-.

Recibe la enhorabuena por el premio con una sonora carcajada. Su objetivo con este experimento: "Abrir el debate sobre los m¨¦ritos que se tienen en cuenta para recibir uno de estos premios", explica. Entre otras cosas, habla de los concursos que exigen una tarifa de participaci¨®n. Goldstein lleg¨® a pagar 250 d¨®lares (173 euros) para inscribir a la osteria fantasma y reconoce que no esperaba que su experimento tuviera un resultado tan explosivo. Su blog est¨¢ inundado de felicitaciones.

Decir que ha conseguido sacarle los colores a la revista es quedarse corto. Y es que no s¨®lo ha premiado a un restaurante inexistente, sino una "lista reservada" de vinos que inclu¨ªa los peor valorados por ellos mismos en los ¨²ltimos 20 a?os. Aunque la carta general estaba compuesta por caldos considerados excelentes por Wine Spectator, los de la supuesta selecci¨®n de lujo hab¨ªan recibido cr¨ªticas como "tiene car¨¢cter de esmalte de u?as", "huele a insecticida" o el simple y contundente: "Est¨¢ aguado". Tambi¨¦n de esta manera exploraba los criterios de la revista. "Quer¨ªa saber si se puede llegar a ganar con una lista reservada desastrosa".

Wine Spectator es una de las publicaciones m¨¢s le¨ªdas en su sector. El pasado 20 de agosto, poco despu¨¦s de descubrir el enga?o, apareci¨® un comunicado en su p¨¢gina web. El resumen es que la revista se siente v¨ªctima de una "patra?a muy elaborada". "Nosotros no visitamos cada uno de los restaurantes que se presentan a nuestros premios. Prometemos evaluar justamente su carta de vinos y cuando recibimos la solicitud, asumimos que la bodega existe", dice el comunicado.

El buscador Google y varias llamadas de tel¨¦fono a un contestador autom¨¢tico (formaba parte del montaje de Goldstein) le bast¨® a la revista para comprobar que L'Intrepido era un restaurante real en Mil¨¢n. A?aden que el premio ganado por Goldstein se encuentra en el nivel m¨¢s b¨¢sico de los tres tipos de galardones existentes, puede que con esta puntualizaci¨®n quieran decir que en los superiores la existencia del establecimiento es condici¨®n indispensable.

Lo cierto es que Goldstein se comporta como un justiciero que pretende quitar el criterio autorizado a los gur¨²s del vino para d¨¢rselo a los consumidores. "Quiero ayudarles a desmitificar a los expertos, las marcas, los precios", cuenta.

Recientemente, cient¨ªficos del Instituto Tecnol¨®gico de California y la Universidad de Stanford demostraron que, independientemente de su calidad real, el consumidor eval¨²a mejor un vino que piensa que es m¨¢s caro. Esto es lo que Goldstein llama "efecto placebo del vino". El catador lamenta que los consumidores se f¨ªen m¨¢s del precio y de la etiqueta que de su propio paladar.

As¨ª que el pasado mayo decidi¨® sacarles del error organizando una "cata ciega". Un total de 500 expertos probaron 540 vinos diferentes y las cr¨ªticas resultaron inversamente proporcionales a los precios. El fruto de este estudio es el ¨²ltimo libro de Goldstein, The wine trials (Los juicios del vino), en el que recomienda 100 vinos excelentes por menos de 10 euros. "Al apreciar un producto estamos sugestionados, no sabemos lo que pasa en nuestra propia cabeza", admite. La falta de criterio personal es lo que Goldstein pretende evitar y con su habilidad para desmentir ideas preconcebidas con experimentos pr¨¢cticos, de momento, est¨¢ teniendo ¨¦xito.

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