Detenido en Marbella El Espa?ol, sanguinario jefe de la Camorra

La Camorra, palabra espa?ola que designa a la mafia napolitana, sigue considerando a Espa?a -como ha contado tantas veces el escritor Roberto Saviano- la Costa Nostra. Seg¨²n Gaetano Maruccia, general de los Carabineros de N¨¢poles, Espa?a es un para¨ªso para los fugitivos m¨¢s peligrosos de su ciudad, el lugar donde se organiza el tr¨¢fico de drogas y se lava el dinero sucio. Solo este a?o han ca¨ªdo seis camorristas en territorio espa?ol. El ¨²ltimo es Raffaele Amato, alias O Lello y O Spagnolo, que fue detenido en Marbella el s¨¢bado por la noche en una operaci¨®n conjunta de las polic¨ªas de N¨¢poles y M¨¢laga.

Seg¨²n explica Roberto Saviano, "la historia de Lello Amato demuestra que en el extranjero la Camorra cuenta m¨¢s que las industrias legales". "Durante a?os, uno de los verdaderos capos de la mafia napolitana, responsable de una de las guerras m¨¢s sanguinarias y feroces de la historia, viv¨ªa en Espa?a libre y como un empresario. ?Quedan todav¨ªa dudas de que Espa?a es el pa¨ªs donde viven e invierten los camorristas, donde tienen m¨¢s poder que las empresas limpias?", inquiere.

Hasta 2002 dirigi¨® el tr¨¢fico de drogas desde Galicia hasta N¨¢poles

Gordo y con cara de malo, Amato, de 44 a?os, era el jefe del clan de los Espa?oles, un grupo secesionista del potent¨ªsimo clan Di Lauro, que control¨® sin oposici¨®n hasta hace un lustro los barrios de Scampia y Secondigliano, considerados los mayores supermercados al aire libre de droga de Europa. Conocido tambi¨¦n como Lelle O Chiatt (El gordo) o La Vecchiarella (La Viejecita), la historia de Amato remite al sangriento episodio de Camorra conocido como la faida (guerra) de Scampia.

El Espa?ol trabajaba en origen como hombre franquicia de los Di Lauro en Espa?a. A cambio de un sueldo, dirig¨ªa el tr¨¢fico de estupefacientes desde Galicia hasta N¨¢poles. Pero en 2002, tras la fuga del capo Paolo di Lauro, su suerte cambi¨®. Cosimo di Lauro, primo de Paolo, se hizo con el control de un imperio que mov¨ªa hero¨ªna, coca¨ªna, marihuana, hach¨ªs y drogas sint¨¦ticas. Poco despu¨¦s, los hijos de Di Lauro acusaron a Amato de quedarse con dinero que pertenec¨ªa al clan. Y el capo intent¨® decapitarle.

Lejos de esconderse, Amato regres¨® a Italia, se ali¨® con otros miembros descontentos de los Di Lauro y declar¨® la guerra a los grandes capos. Las batallas duraron desde octubre de 2004 hasta mediados de 2005, y dejaron m¨¢s de 60 muertos (al menos tres de ellos fueron confundidos con otras personas) y decenas de arrestados. Los ajustes de cuentas persisten hasta hoy.

La pugna por el control del territorio se desarroll¨® sobre todo en Secondigliano y en Scampia, un barrio nacido tras el terremoto que asol¨® la regi¨®n en 1980. All¨ª se encuentra Le Vele (Las Velas), el gigantesco edificio de viviendas con forma de barco que se ve en la pel¨ªcula Gomorra, tambi¨¦n conocido como Los Siete Palacios.

Los tiroteos pusieron contra las cuerdas al Estado, superado por la sangr¨ªa. Salieron vencedores los Espa?oles. "Por diez a uno", dice Roberto Saviano. Poco despu¨¦s de la gran redada de Navidad de 2004, en la que hubo 67 detenciones, Amato regres¨® a su segunda patria. En mayo de 2005, fue detenido en Barcelona junto a otros cinco camorristas cuando sal¨ªa del casino.

Acusado de tr¨¢fico de drogas, homicidio y asociaci¨®n mafiosa, Amato fue extraditado a Italia e ingres¨® en prisi¨®n. Solo un a?o m¨¢s tarde, la lentitud de la justicia le devolvi¨® la libertad. Hab¨ªa excedido el tiempo m¨¢ximo de prisi¨®n preventiva.

Entre finales de 1991 y mayo de 1993, Amato fue protagonista de otra faida que estall¨® en el seno del clan Di Lauro para decidir el liderazgo del su clan de Mugnano, otra localidad de la periferia de N¨¢poles. Seg¨²n el fiscal antimafia Giovandomenico Lepore, que ha reconstruido ahora los hechos con declaraciones de varios arrepentidos, all¨ª se jug¨® "un trozo de historia" de la Camorra. Paolo di Lauro apoyaba como mando del clan local a Gennaro di Girolamo en contra de Antonio Ruocco, que volv¨ªa de una larga estancia en la c¨¢rcel. Ruocco fue puesto bajo el punto de mira de Amato. En ocho emboscadas distintas, murieron la madre, el t¨ªo, la cu?ada y los colaboradores de Ruocco.

Tras ser puesto en libertad en 2006, Amato regres¨® a la Costa del Sol, la Costa Nostra. En un hotel de Marbella, ciudad s¨ªmbolo de la corrupci¨®n nacional y las mafias internacionales, fue arrestado el s¨¢bado tras un seguimiento de 50 kil¨®metros, iniciado en M¨¢laga, informa Fernando J. P¨¦rez. Amato no opuso resistencia al grupo de polic¨ªas napolitanos y de Estupefacientes de la Comisar¨ªa de M¨¢laga, que cumpl¨ªan un mandato de la Audiencia Nacional. Con ¨¦l fue arrestado tambi¨¦n un secuaz llamado Carmine Minucci. Los dos hablaban un espa?ol perfecto.