Un empresario de Valencia abandona a un 'sin papeles' que perdi¨® un brazo
En la panader¨ªa donde trabajaba tiraron a la basura el miembro amputado
-Si te preguntan, comenta que tuviste un accidente, pero no digas nada de la empresa.
La advertencia proced¨ªa del hijo del jefe de una panificadora en Real de Gandia (Valencia) a uno de sus empleados, el inmigrante boliviano Franns Rilles Melgar Vargas, de 33 a?os, al que la m¨¢quina de amasar acababa de seccionar el brazo izquierdo cuando intentaba recoger un papel que se hab¨ªa ca¨ªdo dentro de la masa. Franns Rilles no ten¨ªa papeles ni contrato.
R¨¢pidamente, el hijo del due?o de la empresa le subi¨® a su veh¨ªculo para trasladarle al hospital Francesc de Borja de Gandia. Pero no lleg¨® a la puerta. Cuando estaban a unos 200 metros, le oblig¨® a bajarse y fue entonces cuando le advirti¨® de que no diera detalles de lo sucedido, especialmente de d¨®nde hab¨ªa ocurrido, seg¨²n denuncian Franns y su familia.
El due?o del negocio admite que no ten¨ªa contrato, pero no que le dejaran tirado
"El empresario no ten¨ªa permisos, ni licencias, ni hac¨ªa contratos", relataba ayer Silvia, la hermana de Franns. Los empleados trabajaban en condiciones de "explotaci¨®n pura y dura", seg¨²n el responsable de Comisiones Obreras de la comarca, Josep Antoni Carrascosa. Franns Riles estaba empleado de forma irregular, sin cobertura de ning¨²n tipo y trabajaba 12 horas al d¨ªa por un sueldo que no llegaba a 700 euros al mes, seg¨²n han denunciado.
Si vinculaban el accidente con su negocio, el empresario tendr¨ªa problemas. Por eso, adem¨¢s de advertirle a Franns que guardara silencio, los responsables de la empresa tomaron otras medidas. "Limpiaron todo para no dejar restos", afirma Silvia. Y tiraron el brazo a la basura.
Juan Rovira, responsable de la panificadora familiar, reconoci¨® ayer a EL PA?S que se deshicieron de la extremidad amputada: "Mi hijo me dijo que estaba en tan mal estado que lo metieron en bolsas y lo tiraron a la basura", confirm¨®.
Los hechos sucedieron el 28 de mayo, pero no se conocieron hasta ayer, cuando el diario Levante-EMV public¨® la denuncia que CC OO hab¨ªa presentado por el suceso. El sindicato ha llevado el caso a la fiscal¨ªa de salud laboral y a la Inspecci¨®n de Trabajo. Mientras, Franns Rilles se recupera en una habitaci¨®n del hospital Virgen del Consuelo de Valencia.
En plena calle, y con el hombro ensangrentado, una persona lo acompa?¨® hasta la sala de urgencias del centro sanitario de Gandia, donde, siguiendo las instrucciones de su jefe, al principio, Franns no aclar¨® la causa del accidente. Pero no pudo ocultarlo mucho tiempo. Debido a la inconsistencia de su relato, los m¨¦dicos llamaron a la polic¨ªa y fue entonces cuando explic¨® c¨®mo hab¨ªa perdido el brazo y, sobre todo, d¨®nde estaba.
Esta informaci¨®n era vital para intentar volver a implant¨¢rselo, la primera opci¨®n que baraj¨® el equipo sanitario. La Guardia Civil se desplaz¨® hasta el lugar del accidente para recuperarlo. Mientras, se localiz¨® a un cirujano especializado en este tipo de injertos y se condujo al paciente al hospital privado Virgen del Consuelo de Valencia, pero se desech¨® la idea de reimplantarle el brazo porque cuando encontraron el miembro amputado, vieron que estaba en muy mal estado.
Tanto la hermana de Franns, como CC OO, est¨¢n pensando en presentar otra denuncia por denegaci¨®n de auxilio. La Guardia Civil tom¨® declaraci¨®n a los dos empresarios en mayo, y los dej¨® en libertad. Tambi¨¦n dio parte al juzgado, aunque ayer a¨²n no hab¨ªa ninguna causa abierta al respecto, seg¨²n indicaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Valencia a Europa Press.
Juan Rovira, responsable de la empresa, asegura que el trabajador "miente", que su hijo le traslad¨® al hospital de Gandia y "le dej¨® en manos", asegura, "del personal de urgencias". Afirma que su hijo sufri¨® "un ataque de nervios" y tuvo que ser atendido en el mismo centro.
El empresario s¨ª admite que Franns "se encontraba en situaci¨®n ilegal" y sin contrato. Pero niega que percibiera 23 euros al d¨ªa por jornadas de 12 horas, como denuncia el trabajador. "Cobran entre 900 y 1.000 euros al mes, y las jornadas son de seis a diez horas", asegur¨®. Rovira mantiene que Franns "se encontraba ebrio" cuando ocurri¨® el accidente. Los responsables de la panificadora dicen estar "tranquilos".
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