Pasta pura
Con tanta corrupci¨®n como hay, tienes pasta en la mano y la miras con prevenci¨®n. Da como cosa. Que est¨¢s t¨² tan tranquilo poniendo un puchero a hervir y va de repente y te aparece por ah¨ª El Bigotes o uno de esos con nombre de raterillo de sal¨®n de billares de los setenta, te regalan un traje y te metes en un l¨ªo. As¨ª que andaba yo con mis raviolis rellenos de tomate y mozzarella un tanto indeciso, porque no quiero que se me descarr¨ªen. ?C¨®mo los preparo? Les pones carne y se te malean, los sirves con gambas y se te crecen con el marisco y acaban pidiendo unas chavalas por tel¨¦fono para celebrarlo en plan orgi¨¢stico y sical¨ªptico. Y no quer¨ªa yo eso. Pero de repente, entre los vapores del agua hervida, tan purificantes ellos (aunque puede que influya tambi¨¦n que creo que tengo un peque?o escape de gas y coloca un poco), lo he visto claro. Estos raviolis, para andar derechos, lo que necesitan es un poco de austeridad. Los hago con tomate natural y acompa?ados de ajos para que luego huelan y no me liguen con se?oras descarriadas y se acab¨®. Pasta pura, pasta santa, pasta inmaculada. Ser¨¢ lo mejor. Por si acaso, adem¨¢s, los he hervido con agua bendita. Una vez en el plato los raviolis estaban tan agradecidos que han intentado regalarme un bolso, pero les he mirado con mala cara.
Ingredientes
- 1 paquete de pasta Gran Ripieno Rana de tomate y mozzarella
- 1 bote de Tumaca Cidacos
- 8 dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Sal
- Or¨¦gano
Instrucciones
La verdad es que cuando tienes una buena pasta fresca (sección refrigerados del súper) no merece la pena complicarse la vida. Ponemos abundante agua a hervir con un puñado de sal gruesa.
Cuando lo haga añadimos la pasta y la hacemos según las instrucciones del envase (o un poquito más). En cualquier caso, sin pasarnos, que se nos puede salir el relleno. Mientras hierve, ponemos aceite en una sartén con el fuego suave y echamos unos dientes de ajo, con piel y todo, para que se nos confiten.
Por otro lado, en un vaso mismo ponemos abundante orégano molido y un poco de nuestro mejor aceite de oliva.
Escurrimos bien los raviolis, emplatamos,los cubrimos con un par de cucharadas del tumaca (que es tomate natural preparado para las tostadas del desayuno), un poco de sal gruesa, los ajos confitados bien escurridos de aceite y regamos con nuestro aceite con orégano.
http://cocinaparaimpostores.blogspot.com
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