Apu?alado un hombre tras ganar en una tragaperras

A Enrique Francisco S. le sonri¨® ayer la suerte, pero poco rato. El hombre, de 33 a?os, se estaba jugando unos euros en un bar de su barrio, en el casco hist¨®rico de Vic¨¢lvaro, cuando sali¨® el premio. La m¨¢quina tragaperras empez¨® a soltar monedas. Tantas, que llamaron la atenci¨®n de una o varias personas de las que estaban en el mismo establecimiento, en una esquina de la calle del Jard¨ªn de la Duquesa, seg¨²n le cont¨® despu¨¦s la camarera del local a la polic¨ªa.

Lo que ella no vio fue que, al salir, a Enrique Francisco le siguieron. Y le asestaron tres pu?aladas con un arma blanca para quitarle el bot¨ªn. Una en el brazo izquierdo, otra en el hemit¨®rax del mismo lado y la tercera en la cabeza, que le provoc¨® un traumatismo craneoencef¨¢lico. Se llevaron su dinero.

Cuando los sanitarios llegaron a su casa, le encontraron solo

Pero el hombre, con gran entereza, se acerc¨® hasta su coche, aparcado en la calle de San Cipriano. Arranc¨® mientras sangraba por las heridas abiertas en brazo, pecho y cabeza. Condujo por las callejuelas poco m¨¢s de kil¨®metro y medio. Segu¨ªa sangrando cuando lo aparc¨® frente a su portal, en la acera delantera de un mes¨®n.

Subi¨® al primer piso del edificio de dos plantas en el que vive, en la calle del Socorro. Por el camino, dej¨® un rastro de sangre en el suelo, en las paredes, en los timbres. Su vecino del segundo, con pocas ganas de ch¨¢chara, sorteaba ayer a mediod¨ªa las manchas con cara de asco. "Vive con su novia, pero ella no est¨¢. Creo que se ha ido de viaje", contaba a rega?adientes este residente.

Horas antes, Enrique Francisco S. hab¨ªa entrado en su casa y telefoneado ¨¦l mismo a los servicios de emergencia. Eran las 8.25. Marc¨® el tel¨¦fono de emergencias 112 y pidi¨® atenci¨®n m¨¦dica para sus heridas, seg¨²n explic¨® luego un portavoz del Summa. Cuando los sanitarios llegaron a atenderle, lo encontraron solo. Estaba consciente pero hab¨ªa perdido mucha sangre. Los m¨¦dicos lo estabilizaron antes de trasladarlo al servicio de urgencias del hospital Gregorio Mara?¨®n, donde ingres¨® en estado grave.

Tambi¨¦n fue ¨¦l mismo quien explic¨® a la polic¨ªa lo que le hab¨ªa ocurrido, seg¨²n inform¨® una portavoz de la Jefatura Superior de Polic¨ªa. Primero, la suerte del premio. Luego, la desgracia del atraco en el exterior del bar donde le robaron uno o varios individuos, seg¨²n relat¨® la portavoz policial.

Los agentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa de la comisar¨ªa de San Blas-Vic¨¢lvaro se acercaron a hablar con la camarera y confirmaron lo del premio. Los especialistas de la Polic¨ªa Judicial de San Blas investigan las causas de la presunta agresi¨®n. El hombre segu¨ªa anoche en el hospital, a la espera de ver c¨®mo evoluciona en los pr¨®ximos d¨ªas. En principio, y salvo complicaciones posteriores, no se teme por su vida, seg¨²n explicaron anoche fuentes policiales.

El silencio era la nota dominante entre los bares de la zona de Vic¨¢lvaro. Nadie se hab¨ªa enterado del suceso o, de saberlo, prefer¨ªan guardar silencio.

Vic¨¢lvaro es uno de los distritos m¨¢s tranquilos de la capital. Registra menor ¨ªndice de delincuencia que otras ¨¢reas m¨¢s conflictivas de la capital. Situado al otro lado de la M-40, comparte comisar¨ªa con San Blas.

En lo que va de a?o, s¨®lo ha registrado una muerte violenta. Ocurri¨® el 10 de agosto, cuando el ecuatoriano Pedro P. G., de 66 a?os, fue hallado muerto a unos centenares de metros del almac¨¦n de muebles en el que trabajaba. Estaba en la cuneta de una carretera mal asfaltada.