?Quietos en sus asientos!
Las nuevas normas para viajar a Estados Unidos son un presagio de lo que se avecina
El atentado fallido contra un avi¨®n con destino a Detroit (Michigan) el pasado d¨ªa de Navidad ha acabado generando retrasos en los vuelos y numerosas incomodidades para los pasajeros de todo el mundo. Aquellas personas que en los pasados d¨ªas llegaron a EE UU se tuvieron que someter a las medidas de seguridad ya habituales -escaneo de su equipaje, paso por un arco detector de metales y una breve entrevista por parte de un agente de seguridad de las aerol¨ªneas- y, como novedad, a un nuevo cacheo y a un segundo registro manual y exhaustivo de sus maletas antes de acceder al avi¨®n en su pa¨ªs de origen.
Estos nuevos registros generan largas colas en el embarque y retrasos de, como m¨ªnimo, una hora en la salida prevista de los vuelos. La UE, que justo hab¨ªa decidido ahora relajar los controles de introducci¨®n de l¨ªquidos en las aeronaves, estudiar¨¢ el incidente protagonizado por el nigeriano Umar Farouk Abdulmutallab para reformular las medidas de seguridad a aplicar.
La tecnolog¨ªa que hubiera permitido suavizar los controles actuales no estar¨¢ lista en la UE hasta 2013
Los principales cambios en la seguridad afectan, sin embargo, al viaje en s¨ª mismo. Durante la ¨²ltima hora de trayecto, los pasajeros deber¨¢n permanecer sentados, con los cinturones abrochados, los dispositivos electr¨®nicos -como reproductores MP3 u ordenadores- apagados y todas sus pertenencias guardadas en los cajones superiores del avi¨®n. Durante esos 60 minutos no se le permitir¨¢ a ning¨²n pasajero levantarse, ni siquiera para el uso de los lavabos. Tampoco se le permite tener ning¨²n objeto, como un libro o una revista, entre las manos o sobre el regazo, o usar mantas o almohadas de viaje. Adem¨¢s, las aerol¨ªneas ya no muestran mapas con el trayecto que va efectuando el avi¨®n, para evitar as¨ª que los pasajeros puedan identificar cu¨¢ndo se est¨¢ sobrevolando una ciudad o un punto en tierra que pueda ser objeto de un ataque.
Washington no ha aclarado si todas estas disposiciones, puestas en marcha el pasado 27 de diciembre, se mantendr¨¢n para siempre. Hasta el momento, la agencia norteamericana encargada de la seguridad en los aeropuertos se ha limitado a confirmar que habr¨¢ diferentes medidas en diferentes aeropuertos, elegidas de forma totalmente aleatoria. La ¨²nica recomendaci¨®n a los viajeros es que se presenten en el aeropuerto con suficiente antelaci¨®n a la hora prevista para su embarque.
Adem¨¢s, Washington anunci¨® el martes pasado que est¨¢ considerando la instalaci¨®n de esc¨¢neres de cuerpo completo para detectar la presencia de explosivos en cualquier parte de la anatom¨ªa de los pasajeros.
En la UE se recibi¨® con estupefacci¨®n la noticia del intento de atentado de Umar Farouk Abdulmutallab, como reconoci¨® en un comunicado el vicepresidente de la Comisi¨®n, Jacques Barrot. "Estoy horrorizado", confes¨® el hoy responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, y antes de Transportes. "Este incidente prueba una vez m¨¢s que hay que estar en constante alerta y vigilantes en la lucha contra el terror".
La intentona del estudiante Abdulmutallab se produce justo cuando la UE hab¨ªa decidido relajar las medidas de control en la introducci¨®n de l¨ªquidos en los aviones despu¨¦s de que la Comisi¨®n optara hace ya meses por dejar en el limbo su opini¨®n sobre la instalaci¨®n en los aeropuertos de los controvertidos esc¨¢neres que desnudan a los viajeros. El Comit¨¦ de Trabajo de Seguridad A¨¦rea, un grupo de especialistas de los diferentes Estados de la Uni¨®n Europea, tiene previsto reunirse en los pr¨®ximos d¨ªas en Bruselas para analizar el frustrado atentado protagonizado por el estudiante nigeriano e identificar las deficiencias de un sistema que hasta ahora se ten¨ªa por razonablemente fiable, si bien no impenetrable.
El ataque fallido del vuelo 253 de Northwest ha dado un vuelco a la situaci¨®n y ahora llegan las urgencias. Holanda ha sido el primer pa¨ªs en anunciar que recurrir¨¢ a los esc¨¢neres que utilizan rayos X. "Dentro de tres semanas estaremos usando estos aparatos, unos 15 en total, para los vuelos hacia Estados Unidos", anunci¨® la semana pasada Guusje ter Horst, ministra de Interior de Holanda, cuyo aeropuerto de Schiphol, donde embarc¨® Abdulmutallab rumbo a Detroit, los ten¨ªa infrautilizados porque son de uso voluntario y s¨®lo los viajeros m¨¢s aguerridos sacrifican en el altar de las nuevas tecnolog¨ªas lo que para la inmensa mayor¨ªa es el irrenunciable derecho a la privacidad y a no correr riesgos gratuitos para su salud.
Y Holanda marca la pauta. El ministro del Interior brit¨¢nico, Alan Johnson, la secunda: "Queremos estar en la vanguardia de estas nuevas tecnolog¨ªas y vamos a aplicarlas cuanto antes". En Berl¨ªn, Thomas de Maiziere se suma a sus colegas, siempre y cuando en los esc¨¢neres se difuminen los detalles ¨ªntimos de las personas y sean perfectamente reconocibles los potenciales objetos sospechosos ocultos. Holanda utilizar¨¢ estos aparatos de ¨²ltima generaci¨®n s¨®lo en los vuelos con destino a Estados Unidos, en espera de la decisi¨®n comunitaria. Un portavoz de la Comisi¨®n Europea mantiene que "aplicar los esc¨¢neres es una decisi¨®n de cada pa¨ªs; la Comisi¨®n no puede impedirlo".
Los controles vigentes hasta ahora se ten¨ªan por tan relativamente fiables que el comit¨¦ de seguridad a¨¦rea hab¨ªa propuesto flexibilizar las medidas de restricci¨®n de l¨ªquidos en abril de 2010, cuando, desde la perspectiva de 2006, se preve¨ªa que la tecnolog¨ªa ya permitir¨ªa detectar eficazmente los l¨ªquidos peligrosos.
La prevista tecnolog¨ªa ha avanzado menos de lo esperado -o eso alegan los expertos comunitarios, en contra de lo que mantienen otros especialistas- y por ello el vigente procedimiento de control (una bolsita transparente de un litro de capacidad en la que introducir recipientes con l¨ªquidos y semejantes en unidades no superiores a los 100 mililitros) seguir¨¢ vigente hasta 2013, seg¨²n decisi¨®n del comit¨¦. Pero acompa?ado de una relajaci¨®n aprobada por el propio comit¨¦, y pendiente de los parabienes de la Euroc¨¢mara, consistente en permitir que a partir de abril de 2011 se pudieran introducir como equipaje de mano en los aviones l¨ªquidos adquiridos por los viajeros en las tiendas libres de impuestos de los aeropuertos no comunitarios, algo hasta ahora no permitido.
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