La nueva conciencia de la m¨²sica latina

Las canciones de Calle 13 no tienen frases gratuitas. El grupo puertorrique?o, compuesto por los hermanos Eduardo Jos¨¦ Cabra Mart¨ªnez, Visitante, y Ren¨¦ P¨¦rez Joglar, Residente, no gasta tiempo en repeticiones ni alusiones vac¨ªas. Sus canciones provocan, denuncian, incitan.? "Me cri¨¦ as¨ª / me voa morir as¨ª", dice Ven y crit¨ªcame, una de las canciones de su tercer disco, Los de atr¨¢s vienen conmigo, con el que consiguieron cinco de los principales premios en la ¨²ltima entrega de los Grammy Latino, en septiembre pasado. Los hermanos explican que ellos no entregan su m¨²sica, sino que forma parte de un intercambio. Tarea id¨®nea en los tiempos de Internet. Son frases que unas veces denuncian, otras veces informan y otras s¨®lo llaman a despertar. Se cantan, se cuelgan, se twitean. Frases rotundas, seguras, resueltas. Que desean subrayar con tanta seguridad que en Ven y crit¨ªcame Ren¨¦ afirma: "En una oraci¨®n repito mil veces la expresi¨®n a fuego". Algo que en Puerto Rico sirve, precisamente, para resaltar una idea.

"Si te callas lo que piensas para ser artista, ?qu¨¦ eres? Un artista no se calla, dice lo que piensa y defiende sus posturas"

Son un equipo. Tienen personalidades complementarias. Eduardo, introvertido y observador; Ren¨¦, abierto e inquieto. Los hermanos prefieren no separarse para las entrevistas. Ren¨¦ lleva la voz cantante y Eduardo se limita a hacer alguna acotaci¨®n. La discreci¨®n de uno complementa la expresividad del otro. A unas horas de llegar a Madrid,?Eduardo observa, posa, asiente y suelta frases entre bostezos, cortes¨ªa del jet-lag. Ren¨¦ revisa el sitio, brinca, saluda a todos, siempre asomado a su BlackBerry. "Dicen que [Eduardo] es el intelectual s¨®lo porque no dice nada, y a m¨ª me dicen que soy el gracioso, el extrovertido", explica Ren¨¦ entre risas.

La calle 13 est¨¢ en "un barrio normal, de clase media", del municipio puertorrique?o de Trujillo Alto (Puerto Rico), a 20 kil¨®metros al sureste de San Juan. "Rub¨¦n Blades tambi¨¦n viv¨ªa en una calle 13", subraya Ren¨¦ al referirse a uno de sus ¨ªdolos, al que describe como "el Bob Dylan latinoamericano". Ren¨¦ viv¨ªa con su madre, la actriz Flor Joglar de Gracia, que se hab¨ªa casado con el padre de Eduardo. Ah¨ª nacieron sus motes. El que viv¨ªa en la casa, Residente; y el que llegaba, Visitante. Comenzaron a tocar juntos a los 16. Todo empez¨® como una pasi¨®n compartida. No han perdido el entusiasmo inicial, asegura Eduardo. "La ¨²nica diferencia es que antes nosotros carg¨¢bamos los instrumentos y ahora nos ayudan", bromea.

Sus tatuajes llaman la atenci¨®n. Eduardo s¨®lo tiene uno, "uno muy simple". En el brazo derecho lleva dibujada una flor. Los de Ren¨¦ (siete en total) son toda una declaraci¨®n. Van desde Basquiat a Matisse y pasan por los nombres de sus siete hermanos. En el hombro izquierdo, el bello rostro de su madre, cuya melanc¨®lica voz se asoma en Tango del pecado, el primer sencillo del segundo de sus tres discos, Residente o visitante (2007). No es la ¨²nica colaboraci¨®n familiar en su m¨²sica. Bajo el mote PG-13, su hermana Ileana ha hecho tambi¨¦n su propia aportaci¨®n.

Sus canciones invitan a dejar de lado las poses. "Deja de taparte / Que nadie va a retratarte", cantaban en Atr¨¦vete-te-te, uno de sus grandes ¨¦xitos. Hay quien escucha en su m¨²sica un reggaeton dotado de conciencia, pero ellos se empe?an en subrayar que su estilo es urbano, que no es lo mismo al reggaeton. Sin un af¨¢n peyorativo, matiza Ren¨¦. "Cuando comenz¨¢bamos, nos dec¨ªan que lo que hac¨ªamos no era reggaeton. Eso no nos molestaba, porque nunca nos hemos sentido as¨ª. Ahora nos reclaman que por qu¨¦ no decimos que hacemos reggaeton", afirma.

Reggaeton o no, el mensaje pol¨ªtico y la denuncia s¨ª que son la constante. Ya aparec¨ªan en su primer disco, Calle 13, donde quiz¨¢ "los temas eran m¨¢s locales, m¨¢s boricuas", como describe Ren¨¦. Asuntos boricuas y de lo m¨¢s sensibles. La canci¨®n Querido FBI fue de las primeras que demostr¨® que el grupo no se corta. El sencillo fue lanzado unas horas despu¨¦s de la muerte en 2005 del l¨ªder del Ej¨¦rcito Popular Boricua Los Macheteros, Filiberto Ojeda R¨ªos, de 72 a?os, en un tiroteo con esa agencia. El grupo se gan¨® duras cr¨ªticas que les acusaban de promover la violencia, lectura que rechazan. Ren¨¦ opina que la pol¨¦mica naci¨® simplemente por hablar de un tema "del que no se habla" en Puerto Rico. "Causa molestia. No deber¨ªa causarla, pero esto es as¨ª", afirma.

Puerto Rico es su pa¨ªs. As¨ª lo dicen, lo cantan y lo twitean. En el papel, la isla es Estado libre asociado de Estados Unidos desde 1952. Es decir, pertenece a Estados Unidos pero no forma parte de ellos. La defensa, la moneda y las relaciones exteriores son estadounidenses; el Gobierno de la isla tiene autonom¨ªa fiscal y cobra sus propios impuestos. Ren¨¦ afirma que la pol¨¦mica comienza en el momento en que, sobre un escenario, dice lo que casi nadie grita. "Me pongo de pie y digo ?Viva Puerto Rico libre!", comenta sin ocultar la impotencia por lo que ¨¦l describe como una falta de conciencia por los derechos puertorrique?os. "Es como si a tu madre la golpean y ella dice que est¨¢ bien. Llega un momento en que le explicas que no est¨¢ bien y que diga lo que diga tiene que dejar de aguantar".

La convicci¨®n pol¨ªtica, la de dar voz a los que no la tienen, fue el principal motor del documental Sin mapa, que relata el recorrido del grupo en varios pa¨ªses de Am¨¦rica Latina. "Ten¨ªa muchas ganas de viajar, de conocer Latinoam¨¦rica, era una necesidad", cuenta Ren¨¦. "El documental sirve para que otros la conozcan. Yo quer¨ªa aprender, pero tambi¨¦n quiero compartir". El periplo cruza desde las orillas del lago Titicaca en Bolivia hasta un viaje en bus con unos mineros en Per¨². El documental, disponible en iTunes y en DVD, no tiene m¨¢s producci¨®n que los m¨²sicos y su c¨¢mara. El producto de su b¨²squeda fue el convencimiento de que su m¨²sica sirve para dar voz a quienes no la tienen. Mensaje que evidencia el t¨ªtulo de su tercer disco, Los de atr¨¢s vienen conmigo.

Los de atr¨¢s les acompa?an. Cuando Ren¨¦ recibi¨® la invitaci¨®n este a?o de MTV Latinoam¨¦rica para presentar la gala de sus premios, entendi¨® que era una valiosa oportunidad para difundir su mensaje. "Era un escenario ¨²nico para hablar de Latinoam¨¦rica. Me sent¨ª contento y halagado. No s¨¦ c¨®mo MTV se atrevi¨® a invitarme [risas]". La ocasi¨®n no fue desaprovechada. Ren¨¦ apareci¨® con camisetas que luc¨ªan frases llenas de mensajes pol¨ªticos. Hubo para todos. "Ch¨¢vez, mejor artista pop". "Uribe, paramilitar". "Que Cristina Kirchner se deje de inyectar b¨®tox". "Micheletti rima con Pinochetti". "Que el presidente de M¨¦xico se ponga a trabajar". Las reacciones no tardaron. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia calific¨® al mensaje referente a ?lvaro Uribe como "ofensivo y calumnioso" solicit¨® al canal de m¨²sica "observar con mayor detenimiento las manifestaciones con alto contenido pol¨ªtico que se hacen dentro de un escenario que se destaca por promover el arte musical". Ren¨¦ respondi¨® que la camiseta hac¨ªa uso de un doble mensaje y que "Uribe paramilitar" quer¨ªa decir tambi¨¦n "Uribe para bases militares", refiri¨¦ndose al pol¨¦mico acuerdo que contempla la presencia estadounidense en siete bases colombianas. A¨²n as¨ª, afirma que, lejos de promover el odio con sus denuncias, lo que desea es incitar al di¨¢logo. "Ni con la izquierda ni con la derecha. Hay que ser ambidiestro", plasm¨® en uno de sus twitts.

Precisamente Twitter evidencia el inter¨¦s de los hermanos de escuchar a quienes los escuchan. Su perfil oficial en la red social suma m¨¢s de 100.000 seguidores. "Me gusta porque no es agresivo. Son frases de 140 caracteres y ya est¨¢. Si quieres fotos, hay fotos, pero nada m¨¢s", afirma Eduardo, que fue el primero que se hizo de un perfil y quien pas¨® la idea a Ren¨¦, que ahora es el m¨¢s entusiasta.

Internet ha cambiado hasta su proceso creativo. "Hay veces en que estoy escribiendo una canci¨®n y de lo que twiteo me va saliendo la letra. Mis canciones son respuestas. Soy yo el que est¨¢ contestando a la gente, a los que no entienden qu¨¦ es lo que hago".

En el Twitter queda su experimentaci¨®n. Ren¨¦ comparte con sus seguidores v¨ªdeos con mensajes pol¨ªticos, comentarios a las noticias de actualidad ("?Honduras de pie!") y an¨¦cdotas como la ma?ana en que un mono le despert¨® durante un viaje a Colombia. Mona, para m¨¢s se?as. Fotograf¨ªa adjunta en su perfil lo demuestra. Comunicaci¨®n, todo el tiempo. Es el mismo en el estudio o en el escenario, que frente al ordenador. ?La defensa de las posturas pol¨ªticas es intr¨ªnseca al arte? "No puedes cambiar lo que piensas", defiende Ren¨¦. "Si te callas las cosas para ?ser artista?, ?qu¨¦ clase de artista eres? Un artista no se calla, dice lo que piensa y defiende sus posturas". A fuego.