Blair garantiz¨® por escrito a Bush en 2002 que apoyar¨ªa la guerra de Irak
El ex brazo derecho del pol¨ªtico brit¨¢nico declara ante la comisi¨®n de investigaci¨®n
Alastair Campbell, el poderoso director de Comunicaci¨®n de Tony Blair, convirti¨® ayer su esperada comparecencia en la investigaci¨®n sobre la participaci¨®n de Reino Unido en la guerra de Irak en un apasionado alegato en defensa de la "convicci¨®n y la integridad" con la que el ex primer ministro brit¨¢nico abord¨® el dilema de la invasi¨®n. Pero revel¨® que Blair dio garant¨ªas por escrito al entonces presidente George W. Bush, en una serie de notas personales escritas en 2002, de que Reino Unido apoyar¨ªa la invasi¨®n de Irak si Estados Unidos decid¨ªa llevarla a cabo.
Campbell insisti¨® repetidamente en que la opci¨®n militar era el ¨²ltimo recurso y que Blair siempre defendi¨® la necesidad de buscar una soluci¨®n diplom¨¢tica al problema del desarme del r¨¦gimen de Sadam Husein. Pero el hecho de que Blair se comprometiera a apoyar la invasi¨®n ya en 2002 si la diplomacia fracasaba, meses antes de que empezara la guerra en marzo de 2003, enfatiza hasta qu¨¦ punto la b¨²squeda de una soluci¨®n diplom¨¢tica o la insistencia del primer ministro brit¨¢nico en que la invasi¨®n tuviera el apoyo del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas era algo secundario.
Campbell mantiene que Blair siempre defendi¨® la prioridad de la v¨ªa diplom¨¢tica
El portavoz niega que el Gobierno presionase a los servicios secretos
Sir Menzies Campbell, portavoz de Exteriores del Partido de los Liberales-Dem¨®cratas durante la guerra de Irak y especialmente activo en la posici¨®n de su partido en contra de la invasi¨®n, exigi¨® ayer que se publiquen esas cartas privadas de Blair a Bush.
El que fuera primero portavoz y luego director de Comunicaci¨®n de Blair, que estuvo declarando durante casi tres horas por la ma?ana y otras dos por la tarde, revel¨® que el ex primer ministro escribi¨® numerosas cartas personales a Bush que defini¨® como de "asesoramiento en t¨¦rminos estrat¨¦gicos", que s¨®lo fueron vistas por algunos de sus asesores m¨¢s pr¨®ximos y que no cre¨ªa que muchos miembros del Gabinete hubieran tenido acceso a ellas.
"El primer ministro escribi¨® muchas notas al presidente", explic¨®. "Yo dir¨ªa que el tenor de esas notas era que compartimos el an¨¢lisis, que compartimos la preocupaci¨®n, que vamos a estar con vosotros para asegurarnos que Sadam Husein afronta sus obligaciones y que Irak es desarmado. Si no se puede hacer por la v¨ªa diplom¨¢tica y tiene que ser por la v¨ªa militar, Reino Unido estar¨¢ all¨ª. ?se deb¨ªa ser el tenor de las comunicaciones con el presidente", a?adi¨®.
Campbell neg¨®, en cambio, que en la famosa cumbre celebrada en el rancho de Crawford (Tejas) en abril de 2002, casi un a?o antes de la guerra, la decisi¨®n de invadir Irak quedara sellada. Insisti¨® en que en aquella pol¨¦mica cumbre no se habl¨® de la opci¨®n militar aunque los estadounidenses desvelaron que hab¨ªa "un peque?o equipo" estudiando las opciones militares.
Y discrep¨® de la interpretaci¨®n dada en este mismo foro semanas atr¨¢s por el embajador brit¨¢nico en Washington en aquella ¨¦poca, sir Christopher Meyer, que asegur¨® que, en Crawford, Tony Blair cambi¨® de posici¨®n y pas¨® a apoyar la posici¨®n estadounidense de que la prioridad no era tanto la cuesti¨®n de las armas de destrucci¨®n masiva como el cambio de r¨¦gimen en Irak. Para Campbell, si Sadam hubiera acatado las exigencias de la ONU, eso hubiera constituido de hecho un cambio de r¨¦gimen.
Con su habitual fortaleza de car¨¢cter, Alastair Campbell neg¨® por en¨¦sima vez que ¨¦l o cualquier miembro del Gobierno presionara a los servicios de espionaje para que exageraran el peligro que supon¨ªa Sadam Husein en el famoso informe de los 45 minutos, en el que se dec¨ªa que Irak pod¨ªa lanzar un ataque qu¨ªmico en ese lapso de tiempo. Aquel informe provoc¨® una grave crisis entre el Gobierno y la cadena BBC y una investigaci¨®n que absolvi¨® a Tony Blair entre un clamor medi¨¢tico de que la decisi¨®n del juez que dirigi¨® la investigaci¨®n, lord Hutton, fue un enjuague a favor del primer ministro. Campbell acab¨® abandonando el Gobierno en agosto de aquel a?o, 2003, debilitado por el esc¨¢ndalo.
Ayer no se movi¨® un ¨¢pice de sus posiciones de siempre: la autor¨ªa del informe correspondi¨® enteramente a los servicios secretos y ¨¦l s¨®lo se ocup¨® de los aspectos relacionados con la presentaci¨®n del informe al p¨²blico. Admiti¨® que el prefacio firmado por Blair que precede al informe -y del que el entonces jefe del Comit¨¦ Conjunto de Espionaje, sir John Scarlett, se distanci¨® ante este comit¨¦ al enfatizar su car¨¢cter pol¨ªtico- lo escribi¨® ¨¦l despu¨¦s de que el primer ministro le explicara qu¨¦ quer¨ªa decir en ¨¦l.
Aunque estuvo convincente en el sentido de que parec¨ªa creer ¨¦l mismo lo que dec¨ªa, no lo estuvo tanto en un aspecto clave de la pol¨¦mica. Campbell quiso restar importancia al impacto de aquel informe en el conjunto del debate de aquel momento sobre la situaci¨®n en Irak, pero no aclar¨® por qu¨¦, si ¨¦se era el caso, Blair tom¨® la decisi¨®n excepcional de presentarlo ¨¦l personalmente en los Comunes, donde asegur¨® que el informe era "extenso, detallado y fidedigno".
"El informe concluye que Irak tiene armas qu¨ªmicas y biol¨®gicas, que Sadam las ha seguido produciendo, que tiene en la actualidad planes militares activos para utilizar armas qu¨ªmicas y biol¨®gicas, que pueden ser activadas en 45 minutos, incluso contra su propia poblaci¨®n chi¨ª y que est¨¢ activamente tratando de adquirir capacidades de armamento nuclear", dijo entonces Blair. Nada de eso result¨® cierto.
![El director de Comunicaci¨®n de Blair, Alastair Campbell, llega para declarar ante la comisi¨®n de investigaci¨®n sobre la guerra de Irak, en Londres.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/VD7X4M3ULMZCTMLPGUU7CEHO6E.jpg?auth=4b3d566b41e22ed7799f8e0a4a57eb8d949fb99395c8e3c86512f208320d63c0&width=414)
El principal aliado b¨¦lico de EE UU
- Reino Unido fue el principal aliado de Estados Unidos en la guerra de Irak, en la que tom¨® parte desde el inicio de las operaciones, en marzo de 2003. En total, 100.000 militares brit¨¢nicos han participado en la Operaci¨®n Telic, el nombre en c¨®digo que Reino Unido dio a la guerra. El momento de mayor despliegue fue en 2003, cuando los soldados brit¨¢nicos alcanzaron los 46.000. Su cuartel general se encontraba en la ciudad de Basora, al sureste de Irak, donde se libraron violentos combates, sobre todo en 2007.
- Los soldados brit¨¢nicos muertos en la misi¨®n fueron 179. El coste total de las operaciones fue de unos 7.000 millones de euros. Otros 826 millones han sido invertidos en la reconstrucci¨®n.
- Despu¨¦s de seis a?os, los ¨²ltimos soldados abandonaron el pa¨ªs el 30 de abril de 2009. Pocas semanas despu¨¦s, el primer ministro, Gordon Brown, anunci¨® la apertura de una comisi¨®n de investigaci¨®n sobre la participaci¨®n de Reino Unido en la guerra, cumpliendo una promesa que hab¨ªa hecho cuando sucedi¨® en junio de 2007 a Tony Blair.
- El mismo Blair comparecer¨¢ ante la comisi¨®n en las pr¨®ximas semanas. Junto a ¨¦l tambi¨¦n declarar¨¢ el ex ministro de Exteriores y actual ministro de Justicia, Jack Straw. Los trabajos se suspender¨¢n para las elecciones generales, previstas en primavera, y las sesiones se retomar¨¢n con la comparencia de Gordon Brown y del actual ministro de Exteriores, David Miliband.
La comisi¨®n tendr¨¢ que presentar sus conclusiones entre final de a?o y el inicio de 2011.
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