Rajoy protege a B¨¢rcenas hasta que el Supremo confirme su imputaci¨®n

De nuevo, para Mariano Rajoy, lo urgente es esperar. El PP era ayer una olla a presi¨®n. A la calle G¨¦nova llegaba por todas partes la ansiedad de los dirigentes provinciales y auton¨®micos, y especialmente los comentarios de pr¨¢cticamente toda la prensa: Luis B¨¢rcenas, ex tesorero del PP, debe caer y perder su militancia, como han hecho todos los dem¨¢s implicados en el caso G¨¹rtel. Ese era el clamor. Pero, mientras, en la calle G¨¦nova, se produc¨ªa una guerra sorda entre dos sectores: uno, comandado por Dolores de Cospedal, quiere fulminar a B¨¢rcenas. El otro, liderado por Javier Arenas, protegerlo a toda costa.

Rajoy, de momento, parece haber optado por una v¨ªa intermedia. Consiste en esperar, aguantar el chaparr¨®n medi¨¢tico, proteger a B¨¢rcenas y a la vez dar satisfacci¨®n relativa a los que presionan contra ¨¦l: se tomar¨¢ una decisi¨®n, posiblemente la suspensi¨®n de militancia, s¨®lo si el Tribunal Supremo confirma la imputaci¨®n del ex tesorero, algo que probablemente tardar¨¢.

El l¨ªder popular no tiene previsto hablar con la prensa en toda la semana

Lo que est¨¢ absolutamente descartado es que B¨¢rcenas deje de ser senador. ?l tiene decidido, seg¨²n ha comentado a algunos dirigentes, no ceder y no perder el aforamiento -si abandonara el esca?o su caso dejar¨ªa el Supremo y pasar¨ªa al juez Pedreira-.

De momento, Rajoy ni siquiera ha ordenado que le quiten el despacho ni le dejen de pagar el abogado, pese a las presiones reiteradas en este sentido de Cospedal y otros dirigentes obligados a responder a la prensa e inc¨®modos con esta contradicci¨®n.

El l¨ªder ha optado por el silencio total. Hoy estar¨¢ en Sevilla y se reunir¨¢ con el padre de Mari Luz Cort¨¦s y el de Marta del Castillo, dos menores asesinadas. Despu¨¦s participar¨¢ en la comida organizada por Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar para recordar los 20 a?os del congreso que le llev¨® a la presidencia del PP, un acto inc¨®modo para Rajoy porque recuerda el pasado glorioso y evidencia la dureza actual, tras seis a?os en la oposici¨®n.

En ninguno de los dos actos est¨¢ previsto que Rajoy hable con la prensa. Ma?ana, cuando tiene convocados un par de m¨ªtines en Andaluc¨ªa, tampoco responder¨¢ a preguntas sobre G¨¹rtel. Rajoy culminar¨¢ as¨ª la semana sin hablar con los medios. Un silencio p¨²blico que ya dura dos semanas. S¨®lo recibe informes jur¨ªdicos del sumario del equipo de Federico Trillo, en su despacho con Cospedal.

Entre los que quieren que B¨¢rcenas se vaya est¨¢ la mitad de la c¨²pula del PP. Adem¨¢s de Cospedal, Esteban Gonz¨¢lez Pons y P¨ªo Garc¨ªa Escudero. Cospedal dijo ayer: "Si hay cambios procesales actuaremos, pero, de momento, no los hay". Esto es, si se confirma la imputaci¨®n de B¨¢rcenas. A esta presi¨®n se suman dirigentes regionales. Ayer, Alberto N¨²?ez Feij¨®o insisti¨® en que el PP debe ser "contundente" y Esperanza Aguirre dijo que la "responsabilidad pol¨ªtica", al margen de la penal, exige "ante la aparici¨®n de alguna razonable duda el apartamiento de las funciones". El dirigente vasco Carlos Iturgaiz lleg¨® a sugerirle a B¨¢rcenas que haga lo que sabe que tiene que hacer y que "cuando hay termitas, hay que fumigar".

En la defensa numantina de B¨¢rcenas, por el contrario, est¨¢n los dirigentes m¨¢s vinculados a la etapa en la que Francisco Correa lo hac¨ªa casi todo en el PP. Adem¨¢s de Arenas, Ana Mato, ambos miembros de la c¨²pula actual, y sobre todo, Francisco ?lvarez Cascos, ex secretario general, probable candidato en Asturias y un aut¨¦ntico poder f¨¢ctico en el PP.