Vi?edos de Sefarad
Cuatro juder¨ªas y visitas a bodegas con excelentes vinos
En esta ¨¦poca del a?o los caminos de Sefarad est¨¢n plet¨®ricos de vi?edos. Muestran orgullosos su verde exuberancia, anuncio de una abundante cosecha. Es la mejor invitaci¨®n a un viaje que a¨²na vino y juder¨ªas (www.redjuderias.org), a recorrer barrios medievales habitados hasta su expulsi¨®n, en 1492, por sefard¨ªes, con visita a bodegas donde se elaboran algunos de los mejores vinos espa?oles. Un nexo de uni¨®n que hunde sus ra¨ªces en la historia, cuando viticultores jud¨ªos ense?aron el m¨¢s avanzado arte de la vi?a a campesinos cristianos.
01 Ribadavia
Y nada mejor que empezar por Ribadavia, donde comerciantes y elaboradores sefard¨ªes dedicados al negocio del vino exportaban a Inglaterra, Portugal, Francia y Holanda. No es de extra?ar que la m¨¢s importante juder¨ªa de Galicia se halle en esta localidad orensana. Su huella puede encontrarse en tabernas y tahonas, como la de Herminia, en la Puerta Nueva de Arriba, que elabora dulces sefard¨ªes. La juder¨ªa se sit¨²a entre la plaza Mayor y las murallas, alrededor de Porta Nova. En sus calles porticadas y estrechas callejuelas de casas sencillas y bien conservadas, con voladizos y bodegas interiores, el tiempo parece detenido.
Ribadavia es el coraz¨®n del Ribeiro. "Si me queres tratar ben, dame vi?o do Ribeiro", reza el dicho popular. Era tinto que manchaba la taza o blanco de un sabor agreste y perfumado. Hoy sus vinos de variedades aut¨®ctonas son de lo mejorcito. Un cambio gracias a bodegas como la cooperativa local, Vin¨ªcola del Ribeiro (988 47 72 10; www.vinoribeiro.com), una de las mayores y m¨¢s avanzada tecnol¨®gicamente. Visita obligada. Degustar los Colecci¨®n Costeira, arom¨¢ticos y frescos.
No menos importante es el trabajo de personajes tan singulares y l¨²cidos como Emilio Rojo (988 48 80 50), propietario de un peque?o vi?edo en Ponte Arnoia con el que elabora un blanco de ensue?o; o Javier Al¨¦n, pionero del enoturismo con Vi?a Me¨ªn (988 48 84 00; www.vinamein.com), bodega construida con sensibilidad y buen gusto aprovechando un edificio de los siglos XVII y XVIII. Situada en un paisaje buc¨®lico, rodeado de vi?as, incluye seis habitaciones dobles donde alojarse.
02 Toledo
Poetas, cient¨ªficos, traductores, fil¨®sofos, negociantes, financieros y maestros de Talmud sefard¨ªes hicieron de Toledo la gu¨ªa espiritual y foco cultural de todas las juder¨ªas de occidente. Aqu¨ª estuvo la Escuela de Traductores, paradigma de convivencia entre musulmanes, jud¨ªos y cristianos. Su amplia juder¨ªa ocupaba la parte suroccidental de la capital, hasta el r¨ªo Tajo, e inclu¨ªa la fortaleza conocida como Castro de los Jud¨ªos. Posee dos maravillosas sinagogas, cristianizadas como Santa Mar¨ªa la Blanca y del Tr¨¢nsito.
Para otear la ciudad, comer y degustar un estimable vino, nos acercamos al Cerro del Emperador, donde Carlos V contemplaba la capital de su imperio. Aqu¨ª se encuentra el complejo Vi?edos del Cigarral Santa Mar¨ªa (925 252 694; www.grupoadolfo.com), propiedad de Adolfo Mu?oz. Buena comida y mejores vinos. Que nos den a probar alguna vieja a?ada de su Pago del Ama, de Syrah a ser posible. Y tomarse algo en su terraza, contemplando los vi?edos.
03 Tarazona
En Tarazona, la mud¨¦jar, el ladrillo se ha hecho arte. Ce?ida por El Cinto, su amurallado n¨²cleo fundacional, posee una de las juder¨ªas m¨¢s antiguas y mejor conservadas de Espa?a. Conviene perderse por sus serpenteantes calles, como el Carrer de la Vilanova, pasear por la R¨²a Alta y Baja en la juder¨ªa vieja, extasiarse ante la Puerta de la Zuda, acercarse a la calle del Conde para ver las casas colgadas, descubrir alg¨²n edificio t¨ªpico en la plaza de los Arcedianos, y hacer un alto ante la sinagoga mayor, en parte conservada.
Estamos en la zona vitivin¨ªcola Campo de Borja, tierra de viejas y olvidadas garnachas de monte, en las faldas del Moncayo. Mandan las cooperativas, pero tambi¨¦n hay peque?os elaboradores, como Pedro Aibar. De sus siete hect¨¢reas de vi?edo, en modestas pero vanguardistas instalaciones, elabora Pagos del Moncayo (976 90 02 56; www.pagosdelmoncayo.com), un soberbio tinto de precio ajustado. Y si aspiramos a la excelencia, podemos visitar la bodega Alto Moncayo (636 96 99 02), creada por Jorge Ord¨®?ez y Borsao. Su vino Aquil¨®n es uno de los mejores del pa¨ªs. Eso s¨ª, es caro, muy caro.
04 Girona
Ciudad de r¨ªos, discutida y disputada, Girona sabe de cercos, asedios y sufrimiento. Como su comunidad sefard¨ª, la m¨¢s floreciente de Catalu?a. En 890 se instalaron aqu¨ª las primeras 25 familias procedentes de Empord¨¢, tierra de vino y comida. Buenos viticultores, sobresalientes comerciantes y habilidosos artesanos, contribuyeron a la prosperidad de la ciudad, que les pag¨® con trato igualitario y pac¨ªfica coexistencia. Hasta que en 1448 la intolerancia les arrincon¨®, recluidos en el Call, nombre que reciben en Catalu?a los barrios jud¨ªos. Hay que ralentizar el paso en alguna de sus callejuelas empedradas, como el Carrer Sant Lloren?, subir sus empinadas escaleras, atravesar patios y porches para llegar a la antigua sinagoga, hoy sede del Centro Bonastruc ?a Porta y Museo de Historia de los Jud¨ªos de Catalunya, que alberga una magn¨ªfica colecci¨®n de l¨¢pidas y estelas funerarias del cementerio jud¨ªo de Montju?c. Y desde el Carrer de la For?a, la V¨ªa Augusta romana, pasear por Llu¨ªs Batlle, antigua calle de la Sinagoga, o Major del Call Judaic, al final de la cual se encontraba el mercado jud¨ªo medieval.
Para el trago, uno de los nuevos vinos de Empord¨¢, de uvas maduradas bajo la influencia de la Tramontana, que altera mentes y ciclos vegetativos. Hay bodegas que merecen la visita. La m¨¢s importante e innovadora: Castillo de Perelada (972 53 80 11; www.castilloperelada.com). Que nos den a probar el Ex EX 7, o el Finca Garbet. Luego, acercarse a las vi?as de Celler Oliver Conti (972 19 31 61; www.oliverconti.com), en el Alt Empord¨¢. Se asientan en terrenos ricos en pedernal que permiten el milagro de la mineralidad. Y tiene habitaciones para alojarse.
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