Medio Ambiente ignor¨® un informe oficial que alertaba de los da?os
Vecinos y ecologistas dicen que se talar¨¢n 22.000 ¨¢rboles, 1.000 de ellos aut¨®ctonos
Tras varias semanas de desbroces, talas y destierres en el tramo Pontecaldelas-A Lama de la PO-255, la Conseller¨ªa de Medio Ambiente se ha visto obligada a paralizar las obras de ampliaci¨®n "para buscar una alternativa que minimice el impacto medioambiental". El motivo es la repercusi¨®n ecol¨®gica del proyecto, no valorada en ning¨²n estudio de impacto medioambiental conocido y que se acometi¨® sin atender a las advertencias de la Conseller¨ªa de Medio Rural, que en mayo alert¨® al departamento dirigido por Agust¨ªn Hern¨¢ndez de la existencia en la zona de ejemplares de salamandra rabilarga, una especie clasificadaca como vulnerable en el Cat¨¢logo de Especies Amenazadas.
Adem¨¢s de dicha variedad de anfibio, la zona afectada es h¨¢bitat natural del helecho Dryopteris guanchica, otra especie vulnerable, y de entre 500 y 1.000 ¨¢rboles aut¨®ctonos (22.000 sumadas las especies for¨¢neas) que, seg¨²n c¨¢lculos del colectivo ecologista Asamblea do Su¨ªdo, se ver¨ªan afectados por las obras de ampliaci¨®n. La Asociaci¨®n para a Defensa da Ecolox¨ªa de Galiza (Adega) no descarta adem¨¢s la existencia de bufo real en la zona, otra variedad clasificada como vulnerable y cuyo h¨¢bitat, al igual que en los restantes casos, se define en el Decreto 88/2007 como "¨¢rea prioritaria de conservaci¨®n", por lo que reconoce el valor del enclave como "¨¢rea de refugio, reproducci¨®n y alimentaci¨®n de las especies amenazadas".
A d¨ªa de hoy, sin embargo, los m¨¢s amenazados son los ¨¢rboles de la zona, entre los que se cuentan robles y casta?os. Los vecinos afectados por las obras han denunciado que las empresas madereras llevan semanas tal¨¢ndolos ampar¨¢ndose en la expropiaci¨®n forzosa que pesa sobre los terrenos desde enero. Aunque los ecologistas han constatado la presencia de vigilantes en la zona, denuncian que estos no son suficientes para evitar las talas descontroladas. Del mismo modo algunos vecinos han empezado a derribar los muros y cercas para aprovechar la piedra de sus terrenos.
Debido a que el tramo afectado de la PO-255 tiene una extensi¨®n de 9,5 kil¨®metros, inferior por lo tanto a los 10 kil¨®metros requeridos por el Real Decreto 1/2008 para efectuar el estudio de impacto medioambiental, y que no se encuentra dentro de los territorios protegidos por la Red Natura, no exist¨ªa la obligaci¨®n legal de redactar este informe para avalar el proyecto. Con todo, su valor ecol¨®gico y la antig¨¹edad de la carretera (ejecutada con anterioridad a 1860, antes de que hubiese legislaci¨®n medioambiental), son motivos "m¨¢s que suficientes", seg¨²n el ecologista de la Asamblea do Su¨ªdo Alexandre Cend¨®n, para efectuar el denominado estudio de incidencia ambiental. Se trata de un tipo de informe voluntario que debe contar con la aprobaci¨®n del Consello de la Xunta.
A pesar de que este peri¨®dico ha intentado durante semanas conocer si la Conseller¨ªa de Medio Ambiente realiz¨® alg¨²n tipo de estudio de evaluaci¨®n ambiental, no ha obtenido ninguna respuesta. La ¨²nica explicaci¨®n facilitada por la conseller¨ªa es que cuando se aprob¨® el proyecto, en 2009, la salamandra rabilarga no se encontraba en el cat¨¢logo auton¨®mico de especies protegidas. Esa misma variedad figura en el Cat¨¢logo Nacional de Especies Amenazadas desde el 5 de abril de 1990.
Las obras de ampliaci¨®n de la PO-255 saltaron a los medios por primera vez a principios de julio, cuando algunos vecinos interpusieron un recurso ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia por fallos en la tramitaci¨®n de la expropiaci¨®n forzosa. Esperanza Gonz¨¢lez, una de las afectadas, denunci¨® entonces que el tr¨¢mite se hab¨ªa realizado sin la necesaria fase de exposici¨®n p¨²blica. Su caso sigue en el juzgado sin que haya obtenido todav¨ªa una respuesta de la Administraci¨®n.
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