"Hay chicos que leen bien, pero en lo digital se pierden al tercer clic"

Ya no hay an¨¢lisis sobre la ense?anza donde no se mencione de alguna manera el informe PISA de la OCDE (Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico). Para algunos, la influencia de este estudio que mide cada tres a?os los conocimientos de los alumnos de 15 a?os en matem¨¢ticas, ciencias y lectura es exagerada o, al menos, creen que no se utilizan bien las ense?anzas que de ¨¦l se desprenden. Lo que es innegable es que se trata de una de las mayores bases de datos educativas del mundo. Nacida de una decisi¨®n de los ministros de educaci¨®n de la OCDE en 1995, en la primera prueba, hecha en 2000, participaron 43 pa¨ªses, y en la ¨²ltima, la cuarta, 65.

Pocos d¨ªas antes de que se presenten los resultados de esta ¨²ltima edici¨®n (el pr¨®ximo 7 de diciembre), el responsable de estas pruebas y de los an¨¢lisis educativos de la OCDE, Andreas Schleicher (Hamburgo, Alemania, 1964), pas¨® la semana pasada por Madrid para participar en la 25? Semana Monogr¨¢fica de la Educaci¨®n de la Fundaci¨®n Santillana. No puede adelantar nada sobre esos resultados, pero habla del impacto que los informes anteriores han tenido en Espa?a. Unos resultados considerados mediocres por muchos, pero que numerosos especialistas consideran que colocan a Espa?a muy cerca del pelot¨®n central de pa¨ªses europeos. Sin embargo, el gran impacto se produjo en la prueba de 2006, cuando los alumnos espa?oles registraron el mayor retroceso en lectura de los pa¨ªses desarrollados, de 20 puntos con respecto al informe anterior.

"Creo que Espa?a deber¨ªa ver su sistema como un vaso medio lleno"

"La escuela es incapaz de percibir c¨®mo est¨¢ cambiando el mundo"

Pregunta. ?Qu¨¦ situaci¨®n educativa dibuja el informe PISA de Espa?a?

Respuesta. La cuesti¨®n es si ves el vaso medio lleno o medio vac¨ªo, y, si lo miras en perspectiva (los avances que ha hecho Espa?a en las ¨²ltimas d¨¦cadas en calidad de la educaci¨®n, en igualdad de oportunidades o en reducci¨®n de las diferencias sociales), creo que el vaso est¨¢ medio lleno. Comparado con los pa¨ªses que tienen mejores resultados (en China, Shangh¨¢i; Finlandia, Canad¨¢...), Espa?a a¨²n tiene mucho camino por recorrer, pero comparado con Francia y otros pa¨ªses europeos no est¨¢ muy lejos; creo que est¨¢ en el buen camino.

P. Entonces, ?por qu¨¦ cree que en Espa?a, en general, se ve m¨¢s bien vac¨ªo el vaso?

R. Realmente no lo s¨¦, estoy sinceramente sorprendido. La gente suele ser muy cr¨ªtica consigo misma, y suelen comparar los resultados de hoy con respecto a otros pa¨ªses, y no en perspectiva. Aunque de todas maneras creo que eso es bueno, porque a pesar de los avances, los retos de Espa?a son muy grandes.

P. ?Qu¨¦ retos?

R. Principalmente, cambiar un sistema que ha estado muy centrado en la reproducci¨®n de los contenidos de unas materias para ir a otro que ense?e a los alumnos a pensar, a aplicar de forma creativa lo que saben, en el que se deje de decir a los profesores qu¨¦ tienen que hacer, qu¨¦ tienen que ense?ar, para articular en su lugar lo que los alumnos deben ser capaces de hacer y que los docentes decidan qu¨¦ y c¨®mo ense?ar para llegar a conseguirlo. Eso es muy dif¨ªcil.

P. El hecho cierto, en cualquier caso, es que Espa?a baj¨® en lectura 20 puntos en el ¨²ltimo informe.

R. En 2000, la prueba de lectura midi¨® todas las sub¨¢reas, las distintas capacidades, y entonces los espa?oles lo hicieron bien en muchas de ellas, por ejemplo, en la capacidad para extraer informaci¨®n de los textos. Pero en 2006 la evaluaci¨®n se centr¨® en una sub¨¢rea donde Espa?a flaquea: evaluar cr¨ªticamente la informaci¨®n y construir una perspectiva propia con ella. Yo no ver¨ªa esos resultados como un retroceso, sino como un toque de atenci¨®n sobre un reto fundamental del sistema, que necesita dejar atr¨¢s la ense?anza basada en unos contenidos acumulados. Los contenidos concretos se deprecian hoy muy r¨¢pidamente. Todo lo que sabes por ti mismo hoy, ma?ana se convierte en un bien com¨²n para cualquiera.

P. Pero los curr¨ªculos, las escuelas, el sistema entero no est¨¢ preparado para ese cambio, ni en Espa?a ni en la mayor¨ªa de pa¨ªses.

R. Es cierto. El sistema educativo no es capaz de ver ni o¨ªr c¨®mo est¨¢ cambiando el mundo, pero lo est¨¢ haciendo y no se puede detener.

P. Los cambios vienen en gran parte de la mano de las tecnolog¨ªas. Una de las novedades del ¨²ltimo examen PISA es que se ha a?adido una prueba m¨¢s, de lectura digital. ?Por qu¨¦?

R. En el pasado, si te hac¨ªan una pregunta, ibas a la enciclopedia, encontrabas una sola respuesta y pod¨ªas creer que era verdad. Pero en el medio digital, buscas en Google y te aparecen 20.000 respuestas distintas. T¨² tienes que decidir cu¨¢l es relevante, cu¨¢l apropiada, cu¨¢l verdadera. Tienes que manejar la ambig¨¹edad, evaluar. Y eso es lo que quer¨ªamos medir, las estrategias de los chavales cuando manejan un hipertexto con varios niveles de los que solo ves una peque?a parte.

P. ?Y lo han conseguido?

R. Absolutamente. De hecho, hemos visto que hay j¨®venes que son perfectos lectores de libros, pero cuando manejan un hipertexto se pierden al tercer clic. Es imprescindible saber leer, pero eso no te garantiza saber leer en el mundo digital.

P. ?Por qu¨¦ cree que el informe PISA ha tenido tanto ¨¦xito, mucho m¨¢s que otras pruebas internacionales?

R. A diferencia de otras pruebas, que son simplemente ex¨¢menes sobre los contenidos curriculares, PISA conecta lo que los alumnos saben hacer con el contexto de aprendizaje, los recursos, el contexto social y econ¨®mico para entender por qu¨¦ algunos pa¨ªses lo hacen mejor que otros.