Zapatero ofrece a EE UU aumentar su presencia militar en Espa?a
El Gobierno espa?ol propone acoger, en la base naval de Rota, al nuevo mando del Pent¨¢gono para ?frica - "Todas las puertas est¨¢n abiertas para usted", le dijo en enero el presidente al embajador de Obama - Estados Unidos a¨²n no ha decidido
El Gobierno espa?ol ha ofrecido a Estados Unidos aumentar su presencia militar en Espa?a. As¨ª lo revelan varios cables confidenciales de la Embajada en Madrid. Los documentos indican que, tras la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca, el Ejecutivo mostr¨® su disposici¨®n a acoger en la base naval hispano-estadounidense de Rota el reci¨¦n creado mando del Pent¨¢gono para ?frica (Africom). "Todas las puertas est¨¢n abiertas para usted", le dijo Zapatero a Alan D. Solomont, el nuevo embajador de EE UU en Madrid al que recibi¨® por primera vez en La Moncloa el 22 de enero pasado. "He dicho a mi equipo que el embajador de EE UU en Espa?a y el representante personal del presidente Obama no es otro embajador m¨¢s, sino alguien especial", agreg¨®, seg¨²n los informes confidenciales.
"Espa?a est¨¢ abierta a incrementar la presencia de EE UU en la base naval de Rota (C¨¢diz) para que sirva a los objetivos del AFRICOM", escribi¨® Solomont en la nota que resume sus dos horas de audiencia con Zapatero.
El AFRICOM es el sexto mando militar regional del Pent¨¢gono. Lo cre¨® en 2007 y se consagra espec¨ªficamente a ?frica. Su sede provisional est¨¢ en Stuttgart (Alemania). Lo manda el general William Ward y es operativo desde 2008. Su principal objetivo es ayudar a los ej¨¦rcitos africanos a mejorar su eficacia y a coordinarse entre ellos y con EE UU para luchar contra el terrorismo, la pirater¨ªa y el crimen organizado.
Tras hacer su ofrecimiento general, el presidente pregunt¨® al embajador "si el Gobierno de EE UU segu¨ªa interesado en instalar el AFRICOM o uno de sus componentes" en Rota. La base de utilizaci¨®n conjunta de Rota es una de las opciones barajadas como sede del AFRICOM, pero Washington no ha tomado a¨²n una decisi¨®n.
Para EE UU, Rota y Mor¨®n (Sevilla), la otra base compartida, son "plataformas estrat¨¦gicas a mitad de camino entre EE UU y Afganist¨¢n e Irak", seg¨²n su embajada. Cada a?o los aviones militares estadounidenses efect¨²an 4.000 vuelos en Espa?a y se registran 250 atraques en los muelles de Rota.
El entusiasmo de Zapatero no decay¨® durante la conversaci¨®n. Concluy¨® la audiencia con el nuevo embajador "describi¨¦ndose a s¨ª mismo como un apasionado estudioso, desde hace largo tiempo, de la pol¨ªtica (...)". "(...) sigue admirado y fascinado el escenario pol¨ªtico norteamericano", resalta Solomont, aunque desconoce el ingl¨¦s.
Antes incluso de que Obama llegase a la Casa Blanca, las bases conjuntas fueron utilizadas por el Gobierno espa?ol para intentar acercarse a la Administraci¨®n de George Bush con la que tan malas relaciones manten¨ªa desde la brusca retirada espa?ola de Irak en abril de 2004.
En agosto de 2007, el entonces embajador de EE UU en Espa?a, Eduardo Aguirre, evoc¨®, por primera vez, con sus interlocutores espa?oles "la posibilidad de colocar en Rota un componente del AFRICOM, el centro conjunto de operaciones de inteligencia", seg¨²n recuerda ¨¦l mismo en una nota confidencial redactada el 4 de junio de 2008, cuatro d¨ªas antes de que el general William Ward iniciase su primera visita a Espa?a.
El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, contest¨® poco despu¨¦s al embajador "que tanto el presidente Zapatero como el ministro de Defensa, Jos¨¦ Antonio Alonso [dej¨® el cargo en 2008], dicen que Espa?a acoge con entusiasmo el ser tomada en consideraci¨®n para este proyecto".
El gabinete del secretario de Defensa de EE UU y la Junta de Jefes de Estado Mayor hab¨ªan incluso indicado informalmente al embajador que "Rota es uno de los lugares que se toman en consideraci¨®n para alojar la sede de AFRICOM" ahora provisionalmente en Stuttgart. "Creo", escribi¨® Aguirre, "que Espa?a ser¨¢ receptiva a cualquier propuesta concreta que hagamos aunque albergar al cuartel general es un asunto de mayor calado pol¨ªtico interno".
El general Ward, reci¨¦n nombrado jefe del AFRICOM, fue recibido con entusiasmo en Madrid en junio de 2008. Tras escuchar la presentaci¨®n del nuevo mando del Pent¨¢gono el entonces jefe de Estado Mayor de la Defensa, el general F¨¦lix Sanz Rold¨¢n, lleg¨® a decirle: "El ¨¦xito del AFRICOM ser¨¢ el ¨¦xito de Espa?a".
Los interlocutores espa?oles le preguntaron por sus intenciones con relaci¨®n a Rota, a lo que Ward contest¨® que "la cuesti¨®n de la sede permanente del AFRICOM se deja para el futuro", seg¨²n explic¨® Hugo Llorens, n¨²mero dos de la Embajada de EE UU en la nota que informa a Washington de la visita del general.
Durante su estancia, Ward invit¨® adem¨¢s a Espa?a a participar en las maniobras militares Flintlock que organiza el AFRICOM en varios pa¨ªses del Sahel (Mal¨ª, Burkina Faso, Senegal, Mauritania) para mejorar la coordinaci¨®n de la lucha antiterrorista contra la rama local de Al Qaeda. Su propuesta fue aceptada y un grupo de oficiales y suboficiales espa?oles se desplazaron en secreto, la pasada primavera, a la zona para tomar parte en el ejercicio junto con otros militares europeos y de pa¨ªses africanos.
La participaci¨®n espa?ola en Flintlock 10 se intent¨® mantener en secreto -Defensa no contest¨® en abril a las preguntas de EL PA?S- para evitar que la rama magreb¨ª de Al Qaeda tomase represalias contra los dos rehenes catalanes -Roque Pascual y Albert Vilalta- que estuvieron hasta agosto en poder del grupo terrorista.
EE UU puso, por otra parte, a disposici¨®n del Gobierno espa?ol algunos medios de sus servicios secretos para intentar localizar a los secuestrados en el norte de Mal¨ª. Zapatero le agradeci¨® a Solomont esa ayuda que no sirvi¨® de nada.
Para que AFRICOM gane en eficacia, el Pent¨¢gono mostr¨® tambi¨¦n su inter¨¦s en que se ampl¨ªe la lista de puertos espa?oles en los que pueden atracar buques militares de propulsi¨®n nuclear. Ahora solo son tres -Cartagena, Palma de Mallorca y Rota- a los que quiere a?adir Tarragona y, sobre todo, Las Palmas. Por parte espa?ola no hay ninguna decisi¨®n tomada.
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