Aguirre sale en defensa de Gallard¨®n por la contaminaci¨®n de Madrid

Que las grandes ciudades espa?olas tienen un problema de contaminaci¨®n por culpa del tr¨¢fico no lo dicen solo los ecologistas. Lo dice tambi¨¦n -y sanciona por ello- la Uni¨®n Europea y los cient¨ªficos, que han probado la relaci¨®n entre la mala calidad del aire y las afecciones a la salud. Desde hace unos d¨ªas la cuesti¨®n ha pasado al plano pol¨ªtico, pero de momento brillan por su ausencia las propuestas constructivas. Todo es un y t¨² peor. Ayer la pugna dial¨¦ctica entre el Ayuntamiento de Madrid y el Gobierno sum¨® otro participante. La presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, sali¨® al rescate del Gobierno municipal y calific¨® de "impresentable" que la ministra de Medio Ambiente criticara el cambio de las estaciones de medici¨®n de Madrid. Aguirre y Gallard¨®n, tradicionalmente enfrentados, unidos ahora por la contaminaci¨®n.

El PSOE dice que las estaciones de medici¨®n est¨¢n "mal distribuidas en zonas alejadas del tr¨¢fico"

La presidenta asegur¨® ayer en Santander que las estaciones se cambiaron de ubicaci¨®n en enero de 2010 para cumplir con la legislaci¨®n europea. Y que ese cambio se hizo con el conocimiento del Ministerio de Medio Ambiente. La presidenta a?adi¨® que conoce "perfectamente" que los medidores estaban situados en las zonas m¨¢s contaminadas porque durante seis a?os fue concejal de Medio Ambiente. Es la Uni¨®n Europea, afirm¨®, seg¨²n recoge Efe, la que dice en una directiva que no hay que poner las estaciones en los peores lugares.

El consejero de Sanidad, Javier Fern¨¢ndez-Lasquetty, abund¨® en esa idea al afirmar que las cr¨ªticas a la excesiva contaminaci¨®n de Madrid forman parte de "una campa?a" por la cercan¨ªa de las elecciones municipales y regionales.Y mientras los pol¨ªticos hablan, Madrid sigue encapotada. La boina de contaminaci¨®n que cubre la ciudad cuando el tiempo es estable lleva dos d¨ªas vi¨¦ndose desde varias zonas de la capital. La estaci¨®n de medici¨®n de la plaza de Castilla registr¨® 260 microgramos por metro c¨²bico de di¨®xido de nitr¨®geno a las once de la ma?ana. Durante el d¨ªa, la calidad del aire en varias estaciones era "mala" seg¨²n la web municipal. Y no parece que vaya a mejorar porque la previsi¨®n apunta a m¨¢s d¨ªas de anticicl¨®n, lo que evita que los gases se dispersen.

Ecologistas en Acci¨®n asegur¨® ayer en un comunicado que algunas estaciones medidoras de Madrid est¨¢n a punto de superar los niveles m¨¢ximos de algunos contaminantes, como el di¨®xido de nitr¨®geno (NO2), m¨¢s veces de las autorizadas para todo el a?o.

Seg¨²n la normativa, cada a?o se pueden superar los 200 microgramos por metro c¨²bico durante una hora seguida un total de 18 veces. Sin embargo, "ya hay estaciones que desde principio de a?o han superado este l¨ªmite en 13 ocasiones (Ensanche de Vallecas), 11 (Ram¨®n y Cajal o Plaza El¨ªptica) y 9 (Cuatro Caminos, a pesar de que el medidor est¨¢ junto al Parque de Santander)".

El portavoz municipal socialista de Medio Ambiente, Pedro Sant¨ªn, afirm¨® que su grupo calcula que el 87% de las estaciones de medici¨®n de la contaminaci¨®n (21 de 24) se encuentra en parques, zonas verdes y zonas de tr¨¢fico rodado bajo de la capital. De este modo, seg¨²n ¨¦l, el equipo de Gallard¨®n "falsea descaradamente la realidad de la contaminaci¨®n" e incumple la normativa en vigor, tanto el Real Decreto 102/2011 de 28 de enero sobre Calidad del Aire, que sustituye al de 2002, como la Directiva 50/2008. "Las estaciones est¨¢n mal distribuidas en zonas alejadas del tr¨¢fico y no representan la contaminaci¨®n real, como establece la normativa", asegura.

Mientras, el Ayuntamiento sigue sosteniendo que el Gobierno central es el verdadero culpable de la contaminaci¨®n por di¨®xido de nitr¨®geno -la capital supera los l¨ªmites legales que impone Bruselas-, causado b¨¢sicamente por los motores di¨¦sel, por la fiscalidad favorable al gas¨®leo y por la actual estructura de los impuestos de matriculaci¨®n, que s¨®lo tiene en cuenta el CO2, y el de circulaci¨®n, que grava los caballos fiscales en vez de fijarse en las emisiones a la atm¨®sfera.

Los Ayuntamientos tienen la potestad de primar la compra de determinados veh¨ªculos mediante bonificaciones al impuesto de circulaci¨®n. Por ejemplo, el Consistorio madrile?o favorece a los veh¨ªculos el¨¦ctricos con la exenci¨®n de un 75% del impuesto de circulaci¨®n. Pero la realidad es que solo hay dos veh¨ªculos el¨¦ctricos (de un parque de 1.740.000 en la capital) que gozan de esta exenci¨®n, con lo que la medida es pr¨¢cticamente simb¨®lica y m¨¢s de cara a la galer¨ªa para apuntarse tantos ecol¨®gicos. Madrid tambi¨¦n bonifica a los conductores que achatarran un veh¨ªculo de m¨¢s de cuatro a?os y compran uno de las mismas caracter¨ªsticas.

Pero el concejal de Hacienda, Juan Bravo, niega que la ¨²nica posibilidad que tiene el Ayuntamiento para influir en la compra de un coche de gasolina, que ser¨ªa bonificar a los compradores con una rebaja en el impuesto de circulaci¨®n, sea efectiva. El Ayuntamiento cree que el ahorro anual que esto supondr¨ªa para un coche de gama media estar¨ªa alrededor de 100 euros, mientras que un comprador de un veh¨ªculo di¨¦sel pr¨¢cticamente ahorrar¨ªa lo mismo con lo que paga de menos en gas¨®leo en un par de meses, y siempre lleva ventaja a la hora de pagar el impuesto de matriculaci¨®n, que no tiene en cuenta el di¨®xido de nitr¨®geno que emiten los di¨¦sel. "El problema est¨¢ en la actual legislaci¨®n del Gobierno, que beneficia al di¨¦sel. Bonificar la compra de veh¨ªculos de gasolina en Madrid no solucionar¨ªa el problema y ser¨ªa una medida demag¨®gica", argumenta Bravo, que anuncia que volver¨¢ a llevar a la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias una propuesta para que el Gobierno modifique el impuesto de circulaci¨®n y lo base en la capacidad contaminante de los coches, y no en su potencia fiscal.