El secuestro de europeos es la mayor amenaza de Al Qaeda en el Magreb
La organizaci¨®n no logra implantarse en Marruecos y retrocede en Argelia
El ministro del Interior marroqu¨ª, Taieb Cherkaoui, asegur¨® el pasado fin de semana que "la manera en que fue perpetrado [el atentado de Marraquech] recuerda al estilo habitual de Al Qaeda". Cinco d¨ªas despu¨¦s de la voladura del caf¨¦ Argana, que caus¨® 16 muertos en la ciudad m¨¢s tur¨ªstica de Marruecos, los secuaces en el Magreb de la organizaci¨®n que fund¨® Osama bin Laden no parecen ser los autores del brutal golpe terrorista.
Al Qaeda en el Magreb Isl¨¢mico (AQMI) est¨¢ desde hace a?os en declive. No ha logrado implantarse en Marruecos ni en T¨²nez. En Argelia, su cuna, es cada vez menos activa desde su aparici¨®n, en 2007. Aunque el Ministerio del Interior argelino no publica datos oficiales, los recuentos de muertos por terrorismo que da a conocer la prensa demuestran que cada vez son menos numerosos.
La red mantiene en su poder a cuatro rehenes franceses apresados en 2010
Fue hace ya algo m¨¢s de cuatro a?os cuando el Grupo Salafista de Predicaci¨®n y Combate decidi¨® convertirse en vasallo de Bin Laden y cambi¨® su nombre por el de AQMI. Ayman Zawahiri, el n¨²mero dos de la organizaci¨®n, le dio la bienvenida en un v¨ªdeo. Poco despu¨¦s asest¨® su mayor golpe con la voladura, en abril de 2007, de edificios gubernamentales en el centro de Argel, pero desde entonces ha sido incapaz de volver a actuar en la capital. Solo se mantiene activa en zonas rurales y monta?osas. Su l¨ªder es Abdelmalek Droukdel.
La represi¨®n del Ej¨¦rcito argelino, junto con la pol¨ªtica de reconciliaci¨®n del presidente Abdelaziz Buteflika, salpicada de amnist¨ªas, ha hecho mella en las filas terroristas. Si el llamado islam pol¨ªtico, aquel que opta por la participaci¨®n para imponer sus ideas, est¨¢ en auge en el Magreb, el violento est¨¢ en decadencia.
Su ¨²nico ¨¦xito reciente es su implantaci¨®n, desde 2008, en el Sahel, sobre todo en Mal¨ª, Mauritania y N¨ªger. Los secuestros de turistas, voluntarios o funcionarios occidentales que lleva a cabo se han convertido, junto con el contrabando, en una importante fuente de ingresos con la que paga a las familias de sus miembros, compra armas y perpetra atentados. Se calcula que desde hace tres a?os ha podido recaudar m¨¢s de 20 millones de euros.
Tres voluntarios espa?oles de la ONG Barcelona Acci¨® Solidaria fueron apresados, en noviembre de 2009, a 170 kil¨®metros al norte de Nuakchot (Mauritania) y liberados entre marzo y agosto de 2010 despu¨¦s de que intermediarios locales entregaran a los terroristas un rescate que les dio el CNI, el servicio secreto espa?ol.
AQMI mantiene en su poder a cuatro rehenes franceses que fueron apresados en septiembre, junto con otros tres que ya han sido liberados cerca de la mina de uranio de Arlit (N¨ªger), donde trabajaban para una multinacional francesa. Se teme que sean asesinados, en venganza, como lo fue en julio en Mal¨ª el septuagenario Michel Germaneau tras el fracaso de una operaci¨®n de rescate franco-mauritana.
El ¨²ltimo gran atentado que ha padecido el Magreb, el de Marraquech, fue cometido con un mando a distancia, seg¨²n el ministro del Interior marroqu¨ª. Su autor dej¨® en el caf¨¦ Argana una bomba cuya explosi¨®n se produjo despu¨¦s de su salida del local.
Ese no es el estilo de Al Qaeda ni de sus seguidores en Marruecos, donde nunca se ha utilizado este sistema. En la mayor¨ªa de los casos, en 2003 y 2007, fueron terroristas suicidas los que actuaron en Casablanca. Otras veces se trat¨® de una mera agresi¨®n con armas blancas a polic¨ªas o turistas occidentales.
Se apuntaba tambi¨¦n a AQMI como responsable del atentado de Marraquech porque el 25 de abril, tres d¨ªas antes de que se produjera, fue colgado en Internet un v¨ªdeo en el que un marroqu¨ª amenazaba a las autoridades de su pa¨ªs al tiempo que exig¨ªa la liberaci¨®n de los presos islamistas. Anne Giudicelli, que dirige en Par¨ªs la consultora Terrorisc, revel¨® que se trataba, en realidad, de parte de un v¨ªdeo de 2007.
"Su reaparici¨®n, ahora, no es una casualidad", declar¨® a este peri¨®dico por tel¨¦fono. "El prop¨®sito es, probablemente, influir sobre la investigaci¨®n y reforzar la hip¨®tesis de que AQMI est¨¢ detr¨¢s" de lo sucedido en Marraquech. La tragedia coincide con el inicio de un proceso de reformas.
El rey Mohamed VI excarcel¨®, el 14 de abril, a 92 presos, en su mayor¨ªa islamistas radicales pero no violentos. Los integristas que a¨²n permanecen en prisi¨®n han difundido v¨ªdeos y comunicados en los que rechazan el atentado con la esperanza de que se produzcan m¨¢s indultos reales.
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