La sorpresa del independiente Unda
La gesti¨®n del consejero de Industria sobresale en el an¨¢lisis del Gobierno - Cultura y Asuntos Sociales, los epicentros de demasiados conflictos
Un independiente, incorporado adem¨¢s como opci¨®n secundaria a una consejer¨ªa de tanta enjundia en tiempos de crisis que corren como Industria, Comercio y Turismo se ha convertido, sin embargo, en "la gran sorpresa" del primer Gobierno vasco socialista, seg¨²n diversas fuentes consultadas por este diario cuando se trata de radiografiar la gesti¨®n de los 10 departamentos, una vez alcanzando el ecuador de su mandato.
"El p¨¢lpito, el contacto directo con el problema y la visi¨®n" acrisolan la trayectoria de Unda, a juicio de quienes le han ido conociendo en estos dos a?os. Este consejero, que abandon¨® la direcci¨®n de La Naval cuando L¨®pez apuraba la constituci¨®n de sus principales cargos directos, tampoco se ha podido sustraer en estos dos a?os de gesti¨®n a acometer una progresiva remodelaci¨®n de su primer equipo de trabajo, un denominador com¨²n, curiosamente, del Gabinete L¨®pez y que tiene en Rodolfo Ares y Gemma Zabaleta sus principales referencias en cuando al ¨ªndice de relevos de sus cargos de confianza.
"El p¨¢lpito y su visi¨®n", cualidades de quienes han tratado con Unda
Idoia Mendia, una de las apuestas de L¨®pez, se consolida como portavoz
ETB y el euskera, dos focos de preocupaci¨®n por su trascendencia
Quienes le siguen de cerca apuntan que Unda "sabe de qu¨¦ habla y as¨ª se ha ganado la credibilidad". Adem¨¢s, en cuestiones como el turismo "tiene los mejores datos de la historia y eso tambi¨¦n juega a su favor", a?aden estas fuentes que, a su vez, subrayan "que apenas ha tenido acometidas desde la oposici¨®n".
Fuera de Industria, tres consejer¨ªas acaparan la referencia expresa de este Gobierno:
- Rodolfo Ares. El coordinador del Gobierno y la mano derecha del lehendakari ante los principales incendios, tanto en el d¨ªa a d¨ªa como con el PP. Su empe?o desde Interior en que los sindicatos no sean quienes decidan a su antojo en la Ertzaintza le est¨¢ poniendo en m¨¢s de un aprieto, incluyendo demasiados cambios para dar con cada miembro de su equipo en el puesto m¨¢s id¨®neo. Aunque mantiene intacto su hilo directo con Ferraz, y comparte sin esfuerzo el an¨¢lisis sobre el fin de la violencia del futurible Rubalcaba, ve, en cambio, c¨®mo Jos¨¦ Antonio Pastor le arrebata cuota de poder interno en el PSE-EE, la base de su fortaleza.
- Isabel Cela¨¢. Tiene el reto del triling¨¹ismo como uno de los ejes nucleares de su proyecto modernista en Educaci¨®n, pero sabe que la tarea durar¨¢ a?os porque no le acompa?a la realidad socioling¨¹¨ªstica del pa¨ªs. Mientras, digiere a rega?adientes el adverso resultado de las ¨²ltimas elecciones sindicales, y no ha bajado los brazos para proyectar un futuro de la ense?anza hacia la innovaci¨®n y las exigencias del mercado. Eso s¨ª, el discurso pol¨ªtico de esta curtida dirigente socialista parece haberse reconvertido hacia su ¨¢rea de influencia, con la n¨ªtida excepci¨®n de su apuesta por llevar a las aulas el esp¨ªritu de las v¨ªctimas del terrorismo.
- Rafael Bengoa. El PNV le ha puesto en su diana. Quiz¨¢ porque no le perdona que pertenezca a un Gobierno socialista siendo hijo de un jeltzale. O tal vez porque ha dudado de la gesti¨®n de un sistema sanitario gestionado por nacionalistas. Esta ofensiva, adem¨¢s, ha coincido con la falta de una pol¨ªtica de comunicaci¨®n para atajar demasiados errores internos en cuestiones que llegan a la ciudadan¨ªa y que ha distorsionan el objetivo de un consejero independiente empe?ado en racionalizar la asistencia sanitaria, sobre todo en tiempos de crisis.
Junto a ellos, Patxi L¨®pez proyect¨® en Idoia Mendia, a quien se encuentra muy pr¨®ximo por afinidad y amistad, una apuesta personal y pol¨ªtica:
- Portavoz y Justicia. Superadas las primeras indecisiones como portavoz, ha ido imprimiendo un sello de mayor carga pol¨ªtica en sus comparecencias semanales. Responsable tambi¨¦n de Justicia, es aqu¨ª donde se ha ganado un reconocimiento generalizado sobre la base inicial de recomponer principalmente las complicadas las relaciones entre el Gobierno vasco y la judicatura, casi inexistentes a partir de la decisi¨®n del TSJPV de sentar en el banquillo al lehendakari Ibarretxe por sus contactos con Batasuna. Este contexto m¨¢s favorable ha facilitado a su vez la aplicaci¨®n progresiva de algunas innovaciones en el funcionamiento de la Justicia en el Pa¨ªs Vasco.
Tras dos a?os, el Gobierno se ha visto envuelto en agrias pol¨¦micas sociales y pol¨ªticas. Las ¨¢reas de Cultura y Asuntos Sociales son fiel reflejo de esta inc¨®moda situaci¨®n:
- Gemma Zabaleta. Hay quien consider¨® desde la oposici¨®n al departamento de Gemma Zabaleta como "el camarote de los hermanos Marx" en un intento avieso de reflejar el dif¨ªcil ensamblaje al que se asist¨ªa en los primeros meses de gesti¨®n, mientras se suced¨ªan los cambios constantes en su organigrama. Dotada de un car¨¢cter duro y que puede incluso empeorar, pero dotada de una tenacidad irreductible sin mirar al reloj, Zabaleta nunca olvidar¨¢ aquel septiembre de 2009 cuando recibi¨® en su cara el sopapo pol¨ªtico del PNV a Patxi L¨®pez al capitanear el proceso de transferencia de las pol¨ªticas activas de empleo. Superado el disgusto, esta consejera guipuzcoana a quien no le asustar¨¢ entenderse con Bildu, quiere que se le recuerde como la pol¨ªtica que sent¨® las bases de c¨®mo debe entenderse la garant¨ªa social y el desempleo activo.
- Blanca Urgell. Cultura representaba uno de los conceptos ideol¨®gicos por los que Patxi L¨®pez suspiraba para proyectar uno de los pilares de su cambio pol¨ªtico. Quiz¨¢ por eso pens¨® en una persona sin contaminar para el cargo de consejera, a sabiendas de que reforzaba el ¨¢rea como el peso pol¨ªtico de Antonio Rivera, a quien el nacionalismo sigue viendo como el origen de todos los males. Cultura, de hecho, tiene el inc¨®modo frente abierto de la ca¨ªda de audiencia y de las cr¨ªticas partidistas en ETB, y a¨²n no se ha cerrado la herida abierta con Vizcaya por los dos museos Guggenheim. Adem¨¢s, en su apuesta por el euskera este departamento a¨²n no sabe c¨®mo calar entre la sociedad el mensaje real de lo que est¨¢n haciendo y que pasa tan desapercibido.
A partir de ahora, seg¨²n se dice en el grupo parlamentario socialista, el Gobierno tiene que encarar la ¨²ltima mitad de su mandato con la necesidad de imprimir un sello de mayor calado pol¨ªtico a su gesti¨®n, que se plasmar¨¢ sobre todo en el pr¨®ximo presupuesto. ?Remodelaci¨®n? El lehendakari se ha apresurado a desmentirlo y, sobre todo, sus asesores niegan que un mal resultado el 22-M pueda acelerar una crisis de Gobierno. Con todo, crece la sensaci¨®n de que una vez constituidos Ayuntamientos y Diputaciones, la reestructuraci¨®n es m¨¢s factible.
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