El terrorismo hace temblar Oslo
Una bomba en el centro de la capital de Noruega mata a siete personas poco antes de que 10 j¨®venes cayeran abatidos en un tiroteo en un acto del Partido Laborista
La explosi¨®n de una potente bomba en el centro de Oslo mat¨® ayer al menos a siete personas y caus¨® heridas a decenas. Poco tiempo despu¨¦s, cuando los vecinos de la capital noruega observaban at¨®nitos los efectos del estallido, un hombre disfrazado de polic¨ªa acribill¨® al menos a 10 j¨®venes en la peque?a isla de Utoya. Abri¨® fuego indiscriminadamente contra los 600 asistentes a un acto del gubernamental Partido Laborista (DNA) que se celebraba en un campamento juvenil a 40 kil¨®metros de la capital.
Seg¨²n testimonios recogidos por la televisi¨®n local NRK, se trat¨® de "una ejecuci¨®n en toda regla". La polic¨ªa arrest¨® al pistolero al tiempo que las autoridades llamaron a alejarse de los distritos c¨¦ntricos y a evitar aglomeraciones humanas. El primer ministro de Noruega, Jens Stoltenberg (DNA), que ten¨ªa programado asistir hoy al acto de su partido en Utoya, dijo anoche que la situaci¨®n es "cr¨ªtica". Los investigadores aseguraban que el sospechoso detenido en la isla es noruego y est¨¢ sin duda relacionado con la explosi¨®n de la bomba en el centro de la ciudad.
La polic¨ªa detiene al pistolero, un ciudadano de origen noruego
Seg¨²n el diario estadounidense The New York Times, un grupo islamista llamado Ansar al-Yihad al-Alami (Colaboradores de la Yihad Mundial) se atribuy¨® los atentados. La televisi¨®n noruega se?al¨® poco despu¨¦s que ese mismo grupo hab¨ªa negado toda responsabilidad en el atentado.
El Ejecutivo noruego se mostr¨® muy cauteloso en cuanto a la autor¨ªa del atentado. Seg¨²n el peri¨®dico estadounidense, el desconocido grup¨²sculo yihadista que se atribuye el atentado amenaza con cometer nuevos ataques.
La polic¨ªa cerr¨® la Estaci¨®n Central de Oslo por temor a nuevos atentados. Las im¨¢genes tomadas por videoaficionados despu¨¦s de la explosi¨®n muestran una situaci¨®n ca¨®tica en las calles del centro de Oslo. Desde helic¨®pteros, c¨¢maras de televisi¨®n grababan, algo m¨¢s tarde, los desesperados intentos de los j¨®venes por escapar de la isla de Utoya. La seguridad ciudadana se suele dar por descontada en Noruega, por lo que es probable que las medidas policiales en la isla fueran muy escasas. La peque?a superficie de Utoya facilit¨®, adem¨¢s, que un pistolero con armas autom¨¢ticas puediera cometer en ella una masacre. Seg¨²n algunos testimonios, el detenido portaba pistolas y rifles.
Algunos testigos contaban anoche a la televisi¨®n p¨²blica NRK y a otros medios locales que el n¨²mero de muertos en la isla de Utoya podr¨ªa ser mucho mayor. Uno de ellos dijo incluso haber visto "entre 20 y 30 cad¨¢veres" en el mar y en la costa. Algunos de los participantes en el campamento trataban por la tarde de escapar de la isla por barco o incluso a nado. Dado que el presunto terrorista iba vestido de polic¨ªa, los asistentes al campamento hu¨ªan de los polic¨ªas aut¨¦nticos, que se afanaban en recuperar la confianza de los muchachos. Seg¨²n la prensa local, este tipo de actos congrega a j¨®venes de entre 15 y 25 a?os, aunque suelen asistir tambi¨¦n pol¨ªticos en activo o retirados. Por la noche, las fuerzas de seguridad segu¨ªan buscando m¨¢s artefactos explosivos.
En la capital, diversos edificios p¨²blicos del distrito gubernamental de la capital noruega quedaron gravemente da?ados. Entre ellos qued¨® devastada la sede gubernamental que alberga las oficinas de Stoltenberg, que no se encontraba en ellas, as¨ª como los Ministerios de Petr¨®leo y Hacienda. Tambi¨¦n la sede del tabloide Verdens Gang (VG) qued¨® seriamente afectada por el atentado.
El Gobierno de Noruega celebr¨® anoche una reuni¨®n de crisis en un lugar secreto del pa¨ªs. Las calles del centro de Oslo fueron evacuadas despu¨¦s de la explosi¨®n. Seg¨²n diversas informaciones, podr¨ªa haber personas encerradas en los edificios da?ados y, posiblemente, tambi¨¦n m¨¢s cad¨¢veres.
La ciudad donde cada a?o se entregan los premios Nobel de la paz no hab¨ªa sido escenario de escenas tan violentas desde el final de la II Guerra Mundial. Los analistas y observadores internacionales destacan que las medidas de seguridad en el pa¨ªs escandinavo son por lo com¨²n bastante m¨¢s laxas que en el resto de Europa.
Noruega, miembro de la OTAN, participa en la misi¨®n de Afganist¨¢n y en otras operaciones aprobadas por Naciones Unidas. La comunidad musulmana del pa¨ªs se compone, sobre todo, de inmigrantes paquistan¨ªes. Los pa¨ªses escandinavos han sido escenario de diversos intentos de atentados islamistas en los ¨²ltimos diez a?os, sobre todo desde la controversia por la publicaci¨®n de las caricaturas que mostraban al profeta Mahoma.
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