La hora de los programas

Finalmente, el presidente del Gobierno anunci¨® el viernes el adelanto electoral al 20 de noviembre. Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero justific¨® la decisi¨®n en la necesidad de "proyectar certidumbre econ¨®mica y pol¨ªtica". Por su parte, el l¨ªder de la oposici¨®n, Mariano Rajoy, lo celebraba afirmando que las elecciones eran un "impulso necesario para salir de la crisis econ¨®mica, porque aportar¨¢n un caudal de confianza que necesita Espa?a". Ya no cabe discutir sobre la conveniencia o no de adelantar las elecciones. Lo que toca ahora es que los partidos pol¨ªticos presenten sus programas econ¨®micos para que los electores puedan decidir en uno u otro sentido. Y, eso s¨ª, aprovechar las tres primeras semanas de septiembre -el Parlamento se disolver¨¢ presumiblemente el 26 de septiembre- para finalizar los tr¨¢mites de una bater¨ªa de leyes y decretos leyes pendientes de aprobaci¨®n.

Est¨¢ en juego recuperar la confianza tras una legislatura de muy mala gesti¨®n econ¨®mica

Comienza el mes de agosto con un escenario claro del calendario para los pr¨®ximos meses

La verdad es que desde Moncloa se ven¨ªan enviando mensajes durante todo el mes de julio. El m¨¢s claro, el mi¨¦rcoles pasado, cuando la vicepresidenta econ¨®mica lleg¨® al Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera con las manos vac¨ªas (salvo la propuesta de cr¨¦ditos ICO) respecto al pago de la deuda de las Comunidades Aut¨®nomas. Al final, la reuni¨®n concluy¨® con un aplazamiento de seis meses, justamente el tiempo en el que se espera que haya nuevo Gobierno. Otros dos signos externos de que se iban a adelantar los comicios eran el retraso en el inicio de las negociaciones de los Presupuestos Generales del Estado para 2012, que tradicionalmente se empezaban a discutir en julio (en esta ocasi¨®n, se prorrogar¨¢n los de 2011), y el propio calendario de reuniones del Consejo de Ministros, limitado a uno solo en agosto.

Sea como fuere, comienza el mes de agosto con un escenario claro en cuanto al calendario de los pr¨®ximos meses. El primer hito ser¨¢ el 19 de agosto, en que el Gobierno, en una reuni¨®n extraordinaria del Consejo de Ministros, aprobar¨¢ un decreto ley de medidas econ¨®micas, cuyo contenido guarda en secreto el presidente Zapatero. A continuaci¨®n, y durante poco m¨¢s de tres semanas, el Parlamento deber¨¢ despachar los proyectos pendientes. Y, a final de septiembre, los dos actos clave: la celebraci¨®n de la Conferencia Pol¨ªtica del PSOE y de la Reuni¨®n Interparlamentaria Popular.

Es ah¨ª donde los dos partidos pol¨ªticos tienen que fijar su estrategia y, por supuesto, sus programas electorales. Y a partir de ese momento empezar¨¢ la cuenta atr¨¢s para unas elecciones en las que el PP parte con una ventaja considerable, m¨¢s por la mala gesti¨®n de la crisis realizada por el Gobierno socialista que por las aportaciones o la propia valoraci¨®n p¨²blica de su l¨ªder. Los programas electorales del PSOE, PP y de todos los partidos pol¨ªticos tienen que plantear propuestas pol¨ªticas y econ¨®micas que consigan un objetivo prioritario: que Espa?a recupere la confianza interna y externa, que est¨¢ por los suelos desde hace meses y que imposibilita una recuperaci¨®n econ¨®mica s¨®lida, capaz de generar empleo.

Para ello, los partidos deber¨¢n aclarar, al menos, las siguientes propuestas:

1. Planes de ajuste de las cuentas p¨²blicas. Los electores tienen que conocer las propuestas para cumplir los compromisos adquiridos por Espa?a con la Uni¨®n Europea respecto al saneamiento fiscal. Si el d¨¦ficit p¨²blico tiene que situarse en el 3% en 2013, los partidos tienen que aclarar c¨®mo lo van hacer, qu¨¦ recortes de gasto van a proponer, si van a plantear subidas o bajadas de impuestos, hasta d¨®nde mantendr¨¢n el Estado de bienestar, c¨®mo van a controlar el actual descontrol en las cuentas de autonom¨ªas y Ayuntamientos, c¨®mo se van a financiar los gastos sociales m¨¢s importantes (sanidad, educaci¨®n, desempleo...), en definitiva, c¨®mo se va a plantear la pol¨ªtica fiscal y econ¨®mica durante los pr¨®ximos cuatro a?os

2. Planes para crear empleo. Ambos l¨ªderes han dicho en p¨²blico que saben c¨®mo luchar contra el desempleo, que se sit¨²a en 4,8 millones de personas, seg¨²n datos del INE del viernes. PSOE, PP y todos los dem¨¢s tienen que aclarar ahora si consideran que las reformas del mercado laboral y de la negociaci¨®n colectiva aprobadas en los ¨²ltimos meses son suficientes o hay que modificarlas, si van a proponer m¨¢s pol¨ªticas activas de empleo, o qu¨¦ otro tipo de medidas van a proponer para lograr un mayor crecimiento econ¨®mico que genere empleo.

3. Reformas en el sistema financiero. La reforma de las cajas de ahorros ya est¨¢ en marcha, pero los partidos pol¨ªticos deber¨ªan comprometerse en sus programas a avanzar en la despolitizaci¨®n de estas entidades. Adem¨¢s, deber¨¢n concretar los vagos anuncios realizados hasta ahora sobre otras posibles reformas en el sistema financiero.

4. Otras reformas estructurales. En todos los debates econ¨®micos realizados en el Parlamento, los diferentes partidos pol¨ªticos han insistido en la necesidad de avanzar en las reformas estructurales. Ahora tienen que concretar c¨®mo hacerlo.

5. Pol¨ªtica energ¨¦tica. Es otras de las inc¨®gnitas que tienen que desvelar los partidos: s¨ª o no a las nucleares, qu¨¦ alternativas proponen y cu¨¢l ser¨¢ su pol¨ªtica tarifaria.

6. Pensiones y Seguridad Social. ?Qu¨¦ har¨¢n respecto a la reciente reforma? ?Hay propuestas alternativas para asegurar la solvencia del sistema?

7. Incentivos a la inversi¨®n. En los debates parlamentarios se ha discutido mucho sobre la necesidad de dotar a Espa?a de un marco legal y fiscal que favorezca la inversi¨®n. ?C¨®mo hacerlo?

La lista podr¨ªa ampliarse sin l¨ªmites. De lo que se trata, en definitiva, es de que los partidos pol¨ªticos tienen que dar la cara en las pr¨®ximas semanas y ense?ar sus cartas con vistas a las elecciones de noviembre. Ya no valen las afirmaciones vagas o las negativas a todo. Es el momento de plantear alternativas reales y concretas.

Alfredo P¨¦rez Rubalcaba y Mariano Rajoy (y, por supuesto, el resto de los l¨ªderes pol¨ªticos) tienen menos de dos meses para preparar sus programas electorales. Est¨¢ en juego la recuperaci¨®n de la confianza en nuestro pa¨ªs despu¨¦s de una legislatura con una muy mala gesti¨®n econ¨®mica.