El legado de un visionario

Un feliz Ferran Adri¨¤ (es lo que tiene hacer realidad los sue?os) vivi¨® ayer su particular "momento Bulli". M¨¢gico, emoci¨®n, trabajo, familia, amigos, energ¨ªa, creatividad... son palabras que salpican su discurso. Todo eso fue un c¨®ctel, regado con cava, frente al mar de Cala Montjoi que se vislumbra desde la cocina de su famoso restaurante. Otros chefs viajaron para abrazar al internacional cocinero catal¨¢n y ponerse con ¨¦l manos a la obra en el d¨ªa final de elBulli como restaurante (no) convencional y en su (re)nacimiento como fundaci¨®n. Su sonrisa -como diciendo a sus ap¨®stoles culinarios "no est¨¦is tristes, nos veremos en el reino de la creatividad"- dur¨® desde la ma?ana hasta la madrugada, cuando la Nochevieja de elBulli se hizo nueva al lanzarse al cielo deseos de prosperidad con un "pastel volador" creado por otro disc¨ªpulo, Christian Escrib¨¤, que tambi¨¦n model¨® un bulldog con merengue y collar multicolor de dulces.

Ausentes y presentes hablaban de "el esp¨ªritu de elBulli"

Arzak: "Adri¨¤ ha sido el hombre con m¨¢s imaginaci¨®n de la cocina universal"

Otros amigos y colegas, como Juan Mari Arzak, Heston Blumenthal, Gast¨®n Acurio o Michel Gu¨¦rard no estuvieron en Roses, pero le lleg¨® el apoyo virtual ante la futura etapa adrianesca. Al chef le emocion¨® el cari?oso mensaje de Gu¨¦rard, art¨ªfice de la nouvelle cuisine. Pero ausentes y presentes ten¨ªan su lenguaje com¨²n: hablaban de "el esp¨ªritu de elBulli", un legado que sus ya miles de disc¨ªpulos riegan por el mundo. Saben interpretar lo que Adri¨¤ llama "c¨®digo Bulli". Un legado que no para.

Un maestro como Arzak subraya que Adri¨¤ "ha sido el hombre con m¨¢s imaginaci¨®n de la cocina universal. De elBulli ha salido la base para la evoluci¨®n de la cocina contempor¨¢nea. Nos ha abierto mundos a todos. Cuando llegu¨¦ por primera vez no entend¨ªa nada, pero lo que entend¨ªa estaba bien hecho", cuenta un hombre a quien el propio Adri¨¤ no deja de agradecer "la generosidad de su apoyo". "La lucha de egos es absurda. En vez de rivalizar hay que unir fuerzas", dice el veterano chef vasco. Y es lo que piensan Joan Roca, Andoni Luis Aduriz, Carme Ruscalleda o Quique Dacosta. "No habr¨¢ otro Ferran. No hay un sustituto. Somos muchos, un gran equipo", afirma Roca. Ruscalleda cree que "seguir¨¢ conmoviendo al mundo con un Bulli reinventado, fruct¨ªfero, docente y sin la presi¨®n del servicio diario de un restaurante gastron¨®mico".

"Adri¨¢ es un gran entrenador de talentos", opina Grant Achatz, que trabaj¨® en elBulli en 2000. "Ha ense?ado a los j¨®venes cocineros a asumir riesgos, a expresar su personalidad y a tener confianza en sus capacidades". El cocinero de Chicago, que super¨® con tes¨®n inquebrantable un c¨¢ncer bucal, habla en sus platos con idioma propio y acento del maestro. En su nuevo restaurante, que cada tres meses hace men¨²s tem¨¢ticos , prepara "una retrospectiva Adri¨¤".

Otro alumno aventajado y talento aupado al n¨²mero uno mundial con Noma, el dan¨¦s Ren¨¦ Redzepi, est¨¢ orgulloso de formar parte de "la revoluci¨®n culinaria de elBulli". "Cada uno se ha llevado la revoluci¨®n a casa", considera el agitador de la emergente cocina n¨®rdica.

El peruano Acurio reconoce el legado Bulli: "Le ha dado a la cocina libertad y compromiso. Son ingredientes que en Am¨¦rica venimos cultivando desde hace tiempo y que gracias al espiritu permanentemente revolucionario de Adri¨¤ ser¨¢n comunes en la cocina mundial".

Esa libertad tambi¨¦n la abandera Massimo Bottura, bulliniano en la Emilia Romagna. Reivindica la italianidad con nuevo acento, no siempre comprendido: "Las ense?anzas de Adri¨¤ las expreso a diario con mi respeto a los ingredientes. Y respeto la historia. Tengo una visi¨®n del pasado sin nostalgia, cuestion¨¢ndolo para evolucionar".

Heston Blumenthal no tiene dudas: "Hay un antes y un despu¨¦s. Ferran es uno de los grandes chefs del siglo XXI. Ha hecho que estar involucrado en el mundo de la gastronom¨ªa sea algo emocionante. Su creatividad no tiene fronteras. Echaremos de menos al Bulli, pero seguro que no dejar¨¢ de sorprendernos, hay que estar atentos a lo que pueda pasar".

"No s¨¦ si su influencia seguir¨¢ siendo tan fuerte, pero a los japoneses les ha ense?ado que su mundo culinario puede abrirse y relacionarse con otras cocinas", apunta Setsuko Yuuki, productora de televisi¨®n y embajadora de Adri¨¤ en su pa¨ªs. Vol¨® a elBulli con los responsables del zen restaurante Mibu.

"Los chefs franceses est¨¢n alucinados con la decisi¨®n de cerrar elBulli. En mi pa¨ªs se supone que permaneces en tu restaurante hasta que mueres. Pero adem¨¢s de incredulidad hay respeto. En Francia sabemos lo que la cocina del siglo XXI le debe a Ferran Adri¨¤", destaca Luc Dubanchet, responsable del festival gastron¨®mico Omnivore, que ha conocido de cerca "la modestia de un hombre que ha ense?ado a romper barreras y a pensar que siempre hay algo que aprender".