Bruselas, tenemos un problema fiscal
La reforma de la fiscalidad, aplazada al verano, ser¨¢ foco de conflicto en la nueva ronda que se inicia esta semana para comprobar el nivel de cumplimiento de las exigencias de Bruselas
Desde que los efectos de la crisis, y de las decisiones para combatirla, hincharon el d¨¦ficit p¨²blico, el escrutinio de la Comisi¨®n Europea cobra otra dimensi¨®n. Lo que antes eran recomendaciones con un escaso grado de seguimiento, ahora son exigencias. Y no solo para acortar el d¨¦ficit; el reforzado poder institucional de Bruselas le permite reclamar reformas en todos los ¨¢mbitos. En Espa?a, el programa de rescate a la banca lleg¨® a convertir esas exigencias en mandatos. El Gobierno de Rajoy inicia la pr¨®xima semana una nueva ronda de ex¨¢menes con algunos deberes hechos, varias tareas retrasadas, y un conflicto en ciernes: la reforma fiscal.
El temario del examen fue fijado por el Consejo Europeo en julio pasado. Y como ha ocurrido en los ¨²ltimos a?os, la cuesti¨®n principal que plantea Bruselas es qu¨¦ har¨¢ Espa?a para reducir el d¨¦ficit p¨²blico. En el dictamen de los Veintiocho, adem¨¢s, se hace una clara advertencia: ¡°La proporci¨®n entre impuestos y PIB de Espa?a sigue siendo una de las m¨¢s bajas de la Uni¨®n¡±.
Reformas a examen
Abril. El Gobierno debe presentar el Programa de Estabilidad, con las medidas para reducir el d¨¦ficit p¨²blico y el nuevo Plan Nacional de Reformas.
Mayo. El Eurogrupo se re¨²ne para analizar el primer informe de vigilancia tras el fin del programa del rescate a la banca.
Junio. La Comisi¨®n Europea eval¨²a los planes espa?oles y comunica sus recomendaciones al Consejo.
Julio. El Consejo Europeo dictamina sobre la idoneidad del plan espa?ol para rebajar el d¨¦ficit y sobre el grado de cumplimiento de las reformas propuestas.
En 2013, los ingresos p¨²blicos apenas llegaron al 38% del PIB, uno de los niveles m¨¢s bajos de la UE. Pero, esta vez, ante el aviso de Bruselas, el Ejecutivo del PP se hace el distra¨ªdo: ¡°Cumpliremos el programa electoral en lo que queda de legislatura, bajaremos los impuestos¡±, proclam¨® este viernes Miguel Arias Ca?ete en su primer acto como candidato popular al Parlamento Europeo.
En lo que queda de legislatura, hasta 2016, el d¨¦ficit deber¨ªa pasar del 6,6% al 2,8% del PIB. ?C¨®mo hacerlo si se bajan los impuestos? Tras descontar sueldo a los funcionarios y reducir plantillas, jibarizar la inversi¨®n p¨²blica, limitar al m¨ªnimo (0,25%) el alza anual de las pensiones o impopulares recortes en sanidad, educaci¨®n y asistencia social, el Ejecutivo centra los nuevos planes de ahorro en mejorar la eficiencia de la Administraci¨®n.
La respuesta que esboza el PP es que la incipiente recuperaci¨®n le permitir¨¢ recaudar m¨¢s, incluso con tipos m¨¢s bajos en alg¨²n impuesto, y producir¨¢ ahorros adicionales en la factura por el pago de intereses y de las prestaciones por desempleo.
El examen europeo comenzar¨¢ este mi¨¦rcoles, cuando el Gobierno presente el nuevo Programa de Estabilidad. Y lo har¨¢ con un incumplimiento flagrante. Si el Consejo Europeo le reclam¨® ¡°una revisi¨®n sistem¨¢tica del sistema tributario para marzo de 2014¡±, el Ejecutivo de Rajoy ha pospuesto la reforma fiscal hasta, al menos, junio.
Es algo m¨¢s que un retraso de tres meses. Sin el detalle oficial de cu¨¢l ser¨¢ la reforma tributaria de Rajoy, la Comisi¨®n no podr¨¢ comprobar si se ajusta a sus exigencias. Adem¨¢s, el aplazamiento tiene lecturas pol¨ªticas, ninguna del agrado de Bruselas, que ya lament¨® que Rajoy condicionara el crucial presupuesto de 2012 a las elecciones andaluzas. Porque el retraso permite al PP lanzar un valioso mensaje gen¨¦rico ¡ªbajar impuestos¡ª en los comicios europeos. Y porque, en verano, la Comisi¨®n estar¨¢ ya en una situaci¨®n d¨¦bil, de interinidad, para el conflicto que se anuncia.
Bruselas estableci¨® las l¨ªneas maestras de lo que deber¨ªa ser esa reforma, entre ellas ¡°una mayor limitaci¨®n de las deducciones en la imposici¨®n directa¡±, ¡°explorar el margen existente para una mayor limitaci¨®n de la aplicaci¨®n de los tipos de IVA reducidos¡± o ¡°adoptar medidas adicionales en impuestos especiales¡±. Fuentes de la Comisi¨®n insisten en la idea de aprovechar el alza del IVA para promover una rebaja de las cotizaciones a la Seguridad Social, mucho m¨¢s amplia y permanente que la tarifa plana de 100 euros para nuevos contratos fijos que el Gobierno aplicar¨¢ este a?o.
Rajoy va al examen con la reforma de las pensiones hecha y retraso en otras ¨¢reas
El informe de los expertos sobre la reforma fiscal, encargado por el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, asum¨ªa esas l¨ªneas maestras. Pero el propio Montoro se ha encargado de desmontarlo. Hace un mes, el ministro de Hacienda sostuvo que ¡°ning¨²n producto subir¨¢ en su tributaci¨®n¡±, porque vayan a pasar del tipo reducido (10%) al general (21%) del IVA. Su n¨²mero dos, Miguel Ferre, ha deslizado que tampoco habr¨¢ subidas en impuestos especiales (carburantes, alcohol o tabaco). El Ejecutivo descarta quitar la deducci¨®n por compra de vivienda en el IRPF y el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tom¨¢s Burgos, se emple¨® esta semana contra la rebaja a las cotizaciones.
A falta de los detalles finales, Hacienda perfila una propuesta que choca de frente con las exigencias comunitarias: una rebaja gradual de los tipos en el impuesto sobre la renta, y la apuesta por que la mejora en la recaudaci¨®n, de la mano del crecimiento econ¨®mico, facilite el ajuste del d¨¦ficit.
Al examen europeo, Rajoy se presenta con una recuperaci¨®n en ciernes, el viento de los mercados a favor (sopla el Banco Central Europeo), un ajuste suficiente del d¨¦ficit en 2013 y el fin del rescate bancario. Y exhibe, m¨¢s all¨¢ del conflicto larvado por los impuestos, un cumplimiento desigual de las reformas propuestas por Bruselas. Casi todas ellas est¨¢n en vigor, o en proyecto, pero algunas acumulan llamativos retrasos. Otras han tenido un impacto escaso. Eso s¨ª, organismos como la OCDE se?alan que el Gobierno de Rajoy ha promovido cambios legales, muchas veces pol¨¦micos y contestados, a un ritmo similar al de Grecia o Portugal, m¨¢s acuciados por la situaci¨®n financiera y la exigencia comunitaria tras los rescates.
El principal aval de Rajoy ante la prueba comunitaria es la aprobaci¨®n de la reforma de las pensiones, un proyecto muy demandado por Bruselas. Con estos cambios, el aumento del gasto en pensiones estar¨¢ limitado durante varios a?os al m¨ªnimo (0,25%) establecido por el Gobierno. Y, a medio plazo, el gasto tambi¨¦n se contendr¨¢ al incorporar el impacto de una mayor esperanza de vida.
Adem¨¢s de la reforma de las pensiones, el Congreso, dominado por el PP, ha dado tambi¨¦n luz verde en los ¨²ltimos meses a otros proyectos exigidos por la Comisi¨®n, como la Ley de Garant¨ªa de Unidad de Mercado, la Ley de Apoyo al Emprendedor o un nuevo marco legal para las insolvencias de las empresas, ¡°que facilite una segunda oportunidad a las compa?¨ªas quebradas¡±. Tambi¨¦n se ha puesto en marcha una Autoridad Fiscal Independiente, pero con tanto retraso que no ha podido evaluar las cuentas p¨²blicas de 2014, como ped¨ªa Bruselas.
Montoro se niega a aceptar la receta de subir el IVA y bajar cotizaciones
El a?o pasado tambi¨¦n se sucedieron los cambios legales para atajar el d¨¦ficit tarifario en el sector el¨¦ctrico, pero con unos resultados dudosos ¡ªvolvi¨® a haber un desfase millonario en 2013¡ª que se antojan insuficientes. Y est¨¢ en tr¨¢mite parlamentario la Ley de Desindexaci¨®n para evitar una subida autom¨¢tica de los precios p¨²blicos con la inflaci¨®n. Es una medida muy del gusto de Bruselas y que ahora, con la inflaci¨®n tan baja, es menos urgente.
Entre los retrasos clamorosos destaca la Ley de Colegios y Servicios Profesionales, reclamada con insistencia por la Comisi¨®n desde el inicio de la crisis. Tras una tortuosa elaboraci¨®n, el ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, asegura que pasar¨¢ a Consejo de Ministros en las pr¨®ximas semanas.
Los mecanismos para suministrar financiaci¨®n a las pymes distinta del cr¨¦dito bancario, como el mercado alternativo de renta fija, est¨¢n en marcha pero con una actividad testimonial. Y Bruselas pide m¨¢s a Madrid para eliminar restricciones a las grandes superficies comerciales, extender la licencia expr¨¦s a la apertura de negocios industriales o establecer f¨®rmulas de copago sanitario.
Est¨¢ por ver si Bruselas considera suficiente el plan de Fomento para evitar que el rescate a las autov¨ªas de peaje impacte en las arcas p¨²blicas. O si da el aprobado a los planes para ¡°aumentar la eficiencia de la Administraci¨®n¡±. De algunas recomendaciones, muy pocas, no hay noticia. Ni del ¡°examen sist¨¦mico de las mayores partidas de gasto p¨²blico¡±, que deb¨ªa hacerse ¡°en marzo de 2014 a m¨¢s tardar¡±. La misma fecha estaba fijada para una evaluaci¨®n de las ¨²ltimas medidas de apoyo al mercado del alquiler. O para establecer un sistema que informe con frecuencia del nivel de atraso en los pagos de las Administraciones a los proveedores.
Pobreza y paro juvenil, bajo la lupa
¡°Espa?a se halla por debajo de la media de la UE en los principales indicadores de medici¨®n de la pobreza y la exclusi¨®n social. En general, no se han experimentado grandes mejoras al desarrollar nuevas medidas¡±. El reproche del Consejo Europeo al Gobierno espa?ol en el dictamen de 2013 evidencia la preocupaci¨®n creciente de las autoridades comunitarias sobre c¨®mo se sale de la crisis.
Al examen de 2014, el Ejecutivo de Rajoy ir¨¢ algo mejor pertrechado: tras varias advertencias, aprob¨® al fin el Plan de Inclusi¨®n Social 2013-2016. Sin embargo, el an¨¢lisis de urgencia de las organizaciones sociales fue ya muy negativo.
En buena medida, el Ministerio de Sanidad y Asuntos Sociales que dirige Ana Mato se limit¨® a recopilar las iniciativas ya adoptadas por el Gobierno central, las comunidades aut¨®nomas o los ayuntamientos. Un fondo extraordinario para la lucha contra la pobreza infantil, dotado con 17 millones, o el anuncio de una estrategia integral contra las personas sin hogar, del que luego no ha habido m¨¢s pistas, son algunas de las escasas novedades incorporadas.
El paro juvenil es otro asunto bajo la lupa comunitaria. Bruselas quiere que se generalice una garant¨ªa joven ¡ªlograr que los menores de 25 a?os en paro, o ya formados, tengan una oferta de trabajo, una pr¨¢ctica u otra propuesta formativa en menos de cuatro meses¡ª, para contrastar la eficacia del plan de empleo joven que activ¨® el Gobierno en 2013. Aqu¨ª los reproches son a la UE, porque los 1.900 millones destinados a respaldar esta estrategia, atascados en los vericuetos burocr¨¢ticos de Bruselas, tendr¨¢n que ser adelantados por el Ejecutivo espa?ol.
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