Portugal aprueba el ¨²ltimo examen de la troika y encara el final del rescate

Despu¨¦s de tres a?os que implicaron una brutal subida de impuestos, la eliminaci¨®n de las pagas extras a los funcionarios y pensionistas, la bajada de salarios, un alza del IVA (hasta el 23%), entre otras duras medidas, Portugal parece que vuelve a respirar. Lisboa ha anunciado este viernes que la troika ha dado su visto bueno a los esfuerzos acometidos para cumplir con el programa de ajustes acordado hace tres a?os, despu¨¦s de concluir la d¨¦cimo segunda y ¨²ltima evaluaci¨®n al pa¨ªs. Sin embargo, el tr¨ªo formado por Comisi¨®n Europea, FMI y BCE, que est¨¢ encargado de los rescates a los pa¨ªses abatidos por la crisis del euro, ha exhortado al Gobierno portugu¨¦s a no confiarse en exceso por encontrarse a un paso de cerrar con ¨¦xito su rescate financiero, debido a la existencia a¨²n de "riesgos" y "problemas persistentes" por resolver, que exigir¨¢n m¨¢s reformas.

"La d¨¦cimo segunda evaluaci¨®n est¨¢ concluida y fue superada", ha anunciado en rueda de prensa el viceprimer ministro del Ejecutivo luso, Paulo Portas. El resultado positivo de esta inspecci¨®n permite a Portugal enfilar ya la recta final de su rescate financiero, que cerrar¨¢ oficialmente el pr¨®ximo 17 de mayo, en un ambiente de aparente confianza y tranquilidad en los mercados extensivo a toda Europa.

En una declaraci¨®n conjunta, la troika ha dado el visto bueno de la troika da luz verde al desembolso del ¨²ltimo tramo de la ayuda a Portugal, 2.600 millones de euros que servir¨¢n para completar los 78.000 millones que le fueron prestados al pa¨ªs en mayo de 2011 y que ha recibido de forma progresiva. "Con el cierre del rescate, es esencial que Portugal se comprometa a aplicar pol¨ªticas econ¨®micas s¨®lidas a medio plazo (una vez deje de encontrarse bajo la supervisi¨®n de la UE y el FMI). Las actuales condiciones econ¨®micas y financieras, favorables, no deben conducir a una actitud complaciente", han alertado los responsables de la misi¨®n internacional.

"Misi¨®n cumplida", ha resumido Paulo Portas, quien hizo balance del programa de ajuste acordado con la troika en mayo de 2011, un mes antes de que los conservadores lusos accedieran al poder. El n¨²mero dos del Gobierno ha recordado que el motivo que llev¨® a Portugal a pedir ayuda financiera fue la dificultad de acceder a financiaci¨®n a tasas de inter¨¦s sostenibles, ya que para vender su deuda los inversores le exig¨ªan una rentabilidad muy elevada.

"Cuando tomamos posesi¨®n -en junio de 2011-, los intereses sobre los t¨ªtulos a diez a?os estaban al 10,6 %, y hoy est¨¢n al 3,6 %", ha comentado el viceprimer ministro luso, quien ha incidido en que estas cifras "dan una idea del sentido que ha tenido el esfuerzo realizado".

La troika ha destacado que uno de los principales problemas que enfrenta Portugal es la estructura y el funcionamiento de los mercados que reducen la flexibilidad de la econom¨ªa a la hora de dar respuesta a acontecimientos adversos. Los organismos internacionales citaron como ejemplo el mercado laboral, donde es preciso un "mayor dinamismo para reducir el nivel todav¨ªa muy elevado de desempleo", que se sit¨²a actualmente en el 15,2 %.

"Estos a?os supusieron para los portugueses esfuerzos muy dolorosos, momentos dif¨ªciles, pero donde siempre prevaleci¨® la moderaci¨®n", ha agradecido Portas en referencia a la ausencia de violencia en las m¨²ltiples y multitudinarias manifestaciones celebradas desde entonces contra la troika y la austeridad. En su opini¨®n, los portugueses eran conscientes de que "el pa¨ªs se qued¨® sin dinero y tuvo que recurrir a los acreedores, de los que comenz¨® a depender".

Portas ha defendido los beneficios del programa de ajustes y reformas negociado con la UE y el FMI, y destac¨® que Portugal espera volver a crecer ya este mismo a?o por encima del 1 % despu¨¦s de tres ejercicios consecutivos en recesi¨®n. Adem¨¢s, ha explicado que las exportaciones lusas han duplicado su peso en la econom¨ªa nacional durante este per¨ªodo, y que el d¨¦ficit p¨²blico se redujo del 9,8 % del PIB en 2010 al 4,9 % en 2013.