Se mantiene la moderada creaci¨®n de empleo

Durante el tercer trimestre la econom¨ªa espa?ola sigui¨® creando empleo. Esto ya lo sab¨ªamos por la evoluci¨®n de las afiliaciones a la Seguridad Social, pero lo han confirmado los datos de la EPA, seg¨²n los cuales, el n¨²mero de ocupados aument¨® en 151.000 respecto al trimestre anterior. Ahora bien, para ver si este aumento del empleo obedece a causas tendenciales, es decir, a la evoluci¨®n de fondo de la econom¨ªa y del mercado laboral, o s¨®lo es un producto pasajero de la favorable estacionalidad que caracteriza a los segundos y terceros trimestre, es necesario desestacionalizar las cifras. El INE no acaba de dar el paso de ofrecer los datos en este formato, adem¨¢s del original, como hace ya con la mayor¨ªa de las estad¨ªsticas coyunturales de producci¨®n y demanda. Todos los analistas estamos esperando los datos desestacionalizados y, m¨¢s a¨²n, que los comentarios que el INE hace en la nota de presentaci¨®n de los resultados de esta encuesta los refiera a las cifras desestacionalizadas, pues no tiene sentido anal¨ªtico ni econ¨®mico hablar de las variaciones del empleo o el paro en t¨¦rminos originales. Hacerlo as¨ª perjudica la salud mental de los espa?oles, a la vez que los mantiene desinformados. ?C¨®mo va a entender nadie si las cosas van bien, mal o regular si un trimestre se dice que se han creado cientos de miles de empleos y al siguiente que se han destruido otros tantos?

El caso es que el INE parece entender estos argumentos, ya que desde hace unos cuantos trimestres ofrece en un sitio rec¨®ndito de su p¨¢gina web dos datos de la EPA desestacionalizados (de entre los cientos que recoge esta estad¨ªstica): las tasas de variaci¨®n trimestral de los ocupados y parados. Seg¨²n estas cifras, el aumento neto de los ocupados habr¨ªa sido del 0,36% sobre el trimestre anterior, lo que equivale a unas 62.000 personas. Este es el dato m¨¢s relevante de la EPA. A partir de ¨¦l, podemos decir que aproximadamente el 40% del empleo creado en este trimestre obedeci¨® a factores tendenciales y el resto fue puramente estacional, que se compensar¨¢ con una disminuci¨®n en los siguientes trimestres. Este avance del empleo es totalmente coherente con el del PIB (dato que s¨ª se ofrece y se utiliza siempre por todos en t¨¦rminos desestacionalizados), que puede estimarse en un 0,5%. Tanto el avance del PIB como el del empleo son ligeramente menores que los del trimestre anterior, lo que nos indica que los g¨¦lidos vientos que asolan a Europa tambi¨¦n nos afectan, aunque por ahora de forma poco significativa.

N¨®tese la estrecha relaci¨®n (baja productividad aparente del trabajo) que se deduce de las variaciones del PIB y del empleo. En parte eso es bueno por cuanto que urge sacar el mayor partido en t¨¦rminos de empleo a la moderada recuperaci¨®n de la econom¨ªa, pero, por otra parte, mirando m¨¢s a medio y largo plazo, nos est¨¢ indicando que el modelo de crecimiento que se vislumbra tras la crisis no ha cambiado apenas del que tanto reneg¨¢bamos a?os atr¨¢s. Un modelo de baja productividad, que ni siquiera se reparte equitativamente entre el factor trabajo y el capital, ya que este ¨²ltimo necesita acaparar cada vez mayor parte del producto obtenido para mantener las rentabilidades que exigen los mercados de capitales globalizados. El avance del trabajo a tiempo parcial y temporal desde que se inicia la recuperaci¨®n y los bajos salarios de los nuevos trabajadores (incluso de los que ya tienen experiencia) son los mejores indicadores de este modelo, aunque la EPA de este trimestre apunta positivamente, ya que en t¨¦rminos desestacionalizados disminuye la parcialidad y se estabiliza la temporalidad como porcentajes sobre el empleo total. Otros datos que tambi¨¦n apuntan positivamente son que, con la excepci¨®n de la vol¨¢til agricultura, el empleo aumenta de forma generalizada en todos los sectores, incluido ya el de la construcci¨®n.

La otra cifra que ofrece el INE desestacionalizada es la disminuci¨®n de los parados en un 2,1% respecto al trimestre anterior, que equivaldr¨ªa a unas 120.000 personas. Eso implica que la poblaci¨®n activa ha disminuido en 58.000 personas debido a la reducci¨®n de la poblaci¨®n en edad de trabajar, por lo que casi la mitad de la ca¨ªda del paro se explica por este fen¨®meno y la otra mitad por la creaci¨®n de empleo. La tasa de paro desestacionalizada baj¨® medio punto porcentual, hasta el 24,1%.

?ngel Laborda es director de coyuntura de la Fundaci¨®n de las Cajas de Ahorros (FUNCAS).