Viento de cola
En el ¨²ltimo a?o el euro se ha depreciado un 25% contra el d¨®lar y un 15% contra el conjunto de la cesta de exportaciones de la Eurozona. El tipo de cambio es un simple precio relativo de lo que costar¨ªan dos cestas de la compra en dos pa¨ªses diferentes. Los escol¨¢sticos de mi querida Universidad de Alcal¨¢ ya nos ense?aron que los precios siguen un fen¨®meno monetario. Por lo tanto, la variaci¨®n de los tipos de cambio deber¨ªa estar explicada por los diferenciales de inflaci¨®n.
Pero los economistas ahora sabemos que hay m¨¢s factores a corto plazo que explican el comportamiento de los mercados de divisas. El Nobel Robert Mundell comenz¨® a observar en los a?os cincuenta el aumento de los flujos financieros globales tras firmarse el acuerdo de Bretton Woods. Y Rudiger Dornsbusch en MIT formaliz¨® con modelos este comportamiento.
El diferencial de intereses entre ambos pa¨ªses determinan donde depositan los inversores sus ahorros. Tanto la Fed como el BCE mantienen los tipos pr¨®ximos al 0%. Pero en EE UU hay expectativas de subidas y en Europa se espera un escenario japon¨¦s con tipos al 0% por un periodo prolongado. El bono a 10 a?os del Tesoro estadounidense cotiza al 2% y el del alem¨¢n al 0,2%. Es m¨¢s atractivo invertir en EE UU y la llegada de capitales explica la apreciaci¨®n del d¨®lar. Adem¨¢s la Fed ha parado su programa de compras de deuda y el BCE lo acaba de iniciar. Por lo tanto, como cualquier precio, el euro ser¨¢ menos escaso y su precio bajar¨¢. Bernanke hundi¨® el d¨®lar con su QE y ahora Draghi ha hecho lo mismo con el euro. Las primas de riesgo tambi¨¦n son determinantes. EE UU ha cogido velocidad de crucero y lidera la revoluci¨®n digital y la energ¨¦tica por lo que no hay muchos riesgos en su horizonte. En Europa, Grecia sigue siendo un avispero sin visos a¨²n de soluci¨®n. Lo que sabemos desde que comenz¨® la Tragedia Griega en 2010 es que siempre que aumenta la tensi¨®n el euro se deprecia.
Tanto por expectativas de tipos, por pol¨ªticas cuantitativas, como por primas de riesgo el euro s¨®lo tiene un lado que es caer. No obstante una periodista le pregunt¨® a Dornsbusch si el d¨®lar se iba a depreciar y respondi¨® ¡°preguntar por el d¨®lar es de mala educaci¨®n¡±. Los tipos de cambio siguen el mismo comportamiento que un electr¨®n dentro del ¨¢tomo y son impredecibles. Aunque dentro del caos siempre hay un orden.
Mundell y Marcus Fleming formalizaron el modelo de una econom¨ªa abierta y una depreciaci¨®n aumentar¨¢ el PIB, el empleo y los precios en la Eurozona. Por lo tanto, la ca¨ªda del euro era una condici¨®n necesaria para reducir la tasa de paro y el riesgo de deflaci¨®n. Pero no es suficiente. El comercio mundial aument¨® un 2% anualizado en el cuarto trimestre, m¨ªnimos desde 2009, y ha empezado 2015 muy d¨¦bil. Europa necesita estimular su demanda interna. La bajada del petr¨®leo ayuda pero es necesario concretar el Plan Juncker de inversi¨®n, aumentar su cantidad e involucrar a los estados, especialmente a los que tienen elevados super¨¢vit exteriores.
Tras seis a?os de crisis, por fin la econom¨ªa europea y la espa?ola tienen viento de cola gracias al cambio de pol¨ªtica econ¨®mica. Hay que aprovecharlo para reducir el d¨¦ficit p¨²blico y hacer planes para aumentar el potencial de crecimiento a largo plazo.
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