La econom¨ªa colaborativa para ejecutivos

El concepto de econom¨ªa colaborativa est¨¢ cambiando. Las compa?¨ªas han crecido y ya no se conforman con la idea rom¨¢ntica del intercambio entre desconocidos que comparten una habitaci¨®n o el coche que no usan el fin de semana. Dos de las firmas emblem¨¢ticas, Uber y Airbnb, han lanzado servicios espec¨ªficos para empresas en Espa?a. Pero no son las ¨²nicas. El segmento business gana terreno en un sector que aspira a integrarse a las cadenas globales de producci¨®n.

¡°La demanda de Uber empez¨® en el segmento de particulares, pero nos dimos cuenta de que las personas que nos usaban para ir a cenar una noche tambi¨¦n quer¨ªan hacerlo para sus desplazamientos de trabajo¡±, explica Yuri Fern¨¢ndez, director de comunicaci¨®n de Uber para Espa?a y Portugal. Como respuesta, la plataforma ha implementado en Madrid el servicio para clientes corporativos, una opci¨®n que ya estaba disponible en otros pa¨ªses. ¡°Aprendimos en otras ciudades que tenemos que lanzar el producto para empresas una vez que el transporte de pasajeros normal est¨¢ maduro¡±, subraya el directivo.

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Cuando la econom¨ªa colaborativa empezaba a dar los primeros pasos, las compa?¨ªas no se fiaban de la calidad de los productos que ofrec¨ªa, recuerda Albert Ca?igueral, creador de la web Consumo Colaborativo. ¡°Que el consumidor ahora sea una empresa simplemente es un signo de maduraci¨®n¡±, concluye el experto, que destaca la relaci¨®n precio calidad, la oferta variada y la posibilidad de conocer la reputaci¨®n de los proveedores como los principales atractivos para las empresas.

Uber ofrece dos tipos de servicio a los usuarios, uno para compa?¨ªas y otro para ejecutivos o profesionales. Los clientes corporativos pueden gestionar en forma centralizada los trayectos de todos los empleados y la facturaci¨®n, lo que simplifica la tramitaci¨®n para la devoluci¨®n del IVA. Los ejecutivos pueden tener un perfil profesional asociado a su cuenta personal, que le permite elegir la tarjeta de empresa a la hora de hacer el pago.

El pulso de la demanda tambi¨¦n marc¨® el camino de Airbnb, que ha implementado un portal espec¨ªfico para clientes business y ha firmado tres acuerdos con empresas globales de viajes corporativos: American Express Global Business Travel, BCD Travel y Carlson Wagonlit Travel. Gracias a estos convenios, las agencias ofrecen en sus plataformas los pisos publicados en Airbnb, lo que facilita la reserva de alojamiento para los viajes de negocios.

¡°El viajero business no es el mismo que el de ocio, necesita m¨¢s flexibilidad a la hora de hacer el check in, un WiFi confiable y una pol¨ªtica de cancelaci¨®n que les asegure el lugar¡±, resume Andreu Castellano, director de Comunicaci¨®n de Airbnb para Espa?a y Portugal. Solo se ofrecen para empresas aquellos apartamentos que cumplen con los requisitos definidos para este segmento. El directivo asegura que los empleados prefieren alojarse en Airbnb y no en un hotel cuando los viajes duran m¨¢s de cinco d¨ªas. ¡°Ofrece la opci¨®n de cocinar y hasta de realizar reuniones con clientes¡±, ejemplifica Castellano. La firma prev¨¦ que este segmento genere el 10% de la facturaci¨®n en Espa?a.

La junta es en el yate

El brindis de fin de a?o de la gerencia en un yate o una regata entre los ejecutivos de la empresa, este tipo de actividades tambi¨¦n pueden organizarse con econom¨ªas colaborativas por medio de Nautal, una plataforma para arrendar embarcaciones. La compa?¨ªa naci¨® en 2013 con la idea de aprovechar mejor los barcos que pasaban la mayor parte del tiempo atracados en los clubes n¨¢uticos, ¡°incluso en los d¨ªas soleados¡±, recuerda Octavi Uy¨¤, consejero delegado de la firma. ¡°Quer¨ªamos que navegar se volviera algo masivo¡±, explica el ejecutivo.

Un a?o despu¨¦s, Nautal detect¨® que cada vez m¨¢s empresas consultaban el portal y decidi¨® especializar a uno de los comerciales para que atendiera a este tipo de clientes. M¨¢s de 30 empresas ya han alquilado barcos con sus servicios. ¡°El sector n¨¢utico es un mercado muy espec¨ªfico, por eso tenemos m¨¢s participaci¨®n en la preventa que otras plataformas colaborativas¡±, explica Uy¨¤. A pesar de que el segmento de empresas tiene buenas perspectivas, el empresario considera que el n¨²cleo del negocio seguir¨¢ siendo el alquiler a particulares. Los clientes corporativos solo representan el 10% de los ingresos de Nautal.

Los servicios para empresas de Uber, Airbnb y Nautal tienen algo en com¨²n: el oferente es un particular y el demandante una organizaci¨®n. Drivy es el caso contrario. El emprendimiento comenz¨® como un portal para alquilar coches de particulares, pero acaba de inaugurar en Espa?a el servicio Pro Supply, una unidad de negocio que pretende incorporar a la plataforma las flotas de veh¨ªculos subutilizados por las compa?¨ªas. "El objetivo es sumar a empresas que tienen varios coches parados y los puedan alquilar mientras no los utilizan, para rentabilizarlos. Sobre todo los fines de semana, cuando hay m¨¢s demanda", explica Raquel Priego, directora de Comunicaci¨®n de Drivy en Espa?a.

El modelo de Drivy pone sobre la mesa una pregunta recurrente: ?es un ejemplo de econom¨ªa colaborativa??Javier Creus, creador de?la consultora Ideas for change, cree que s¨ª y engloba los cuatro casos bajo mismo concepto: "Hay una l¨®gica colaborativa para organizar los modos de producci¨®n. La gente coordina lo que hay disponible y est¨¢ distribuido, y eso es m¨¢s eficiente que en muchos sistemas centralizados¡±. El especialista considera que la penetraci¨®n de las organizaciones colaborativas en el tejido empresarial es una evoluci¨®n natural. ¡°Si miras a los que est¨¢n dominando los negocios, todos juegan en tramos de su cadena de valor con l¨®gicas colaborativas¡±. Google, Facebook o Amazon son ejemplos de ello. Creus destaca que estas formas de organizaci¨®n se traducen en mejoras de la productividad y, por lo tanto, "el que no incorpore estas reglas estar¨¢ en desventaja y no podr¨¢ competir".