EE?UU se lo pone dif¨ªcil al di¨¦sel
La crisis de emisiones de VW reduce el mercado estadounidense de estos motores a los veh¨ªculos todoterreno
Volkswagen est¨¢ al borde de tirar la toalla con el di¨¦sel en Estados Unidos. Herbert Diess, consejero delegado de la marca alemana, admiti¨® recientemente que no le ve futuro y con ello puso fin a un a?o de especulaciones por el esc¨¢ndalo de las emisiones. La decisi¨®n afecta tambi¨¦n a Audi, con una excepci¨®n: la versi¨®n turbodi¨¦sel del todocamino Q7, que llegar¨¢ al mercado cuando la empresa vea la crisis por el espejo retrovisor. Es un veh¨ªculo que cubrir¨¢ un segmento muy determinado.
La jugada de Volkswagen es la forma de admitir que el di¨¦sel ya nunca llegar¨¢ a tener la magnitud previa al fraude de los motores trucados. El da?o a la percepci¨®n que se tiene en EE UU hacia este tipo de motores est¨¢ haciendo complicada la recuperaci¨®n de las ventas. Y el efecto no es nuevo, ya que hace tres d¨¦cadas una sucesi¨®n de problemas t¨¦cnicos en veh¨ªculos de General Motors aliment¨® la imagen de que el gas¨®leo es sucio.
El dieselgate, en realidad, s¨®lo ha reforzado la idea de que el di¨¦sel nunca ha sido una opci¨®n popular en EE UU, con solo el 4% de la flota y el 3% de las ventas (frente al 50% en Europa) antes ya incluso antes de que Volkswagen admitiera que sus motores no eran tan limpios. La mitad de las matriculaciones eran de modelos de la marca alemana, con el Golf TDI de l¨ªder. Sumando otras marcas del grupo, como Audi y Porsche, la cuota ascend¨ªa al 75%. El resto se lo repart¨ªan Chrysler, General Motors, BMW, Land Rover y Mercedes-Benz. Hoy son las dos marcas estadounidenses las que dominan el mercado.
Los expertos creen que el nicho se lo quedar¨¢n los veh¨ªculos con el par motor m¨¢s potente
El esfuerzo hecho durante a?os por los fabricantes para promover el di¨¦sel como una alternativa econ¨®mica y eficiente a la gasolina. La nueva tecnolog¨ªa aplicada a los motores a gas¨®leo ayud¨® a dar un vuelco a su mala reputaci¨®n, hasta el punto de que el 40% de los consumidores se declaraban abiertos a considerarlo. Pero el da?o provocado por el esc¨¢ndalo de las emisiones no solo forz¨® al fabricante alem¨¢n a suspender todas las ventas de modelos ya certificados y la introducci¨®n de otros nuevos, sino que tambi¨¦n elev¨® la vara de medir de los reguladores a sus competidores. Antes de la crisis de Volkswagen, se vend¨ªan en EE UU coches di¨¦sel a un ritmo de entre 4.800 y 9.500 veh¨ªculos al mes. Ahora son menos de 300 unidades.
El agujero que se cre¨® es enorme y fue acompa?ado de un desplome de la confianza de los consumidores. Los rivales de Volkswagen, sin embargo, creen que pueden capitalizar el dieselgate. En total, hay medio centenar de modelos di¨¦sel disponibles en el mercado, en especial en el sector de todoterrenos y furgonetas ¡ªfundamental para la industria estadounidense¡ª en el que los consumidores requieren motores con menor consumo y un par motor m¨¢s alto, justo los factores donde el di¨¦sel brilla. El Ram 1500 EcoDiesel fue el primer veh¨ªculo de carga ligero en incorporar este tipo de motor, al que siguieron el Jeep Grand Cherokee, el Chevy Colorado, el GMC Canyon y los Land Rover, que logran un 30% de ahorro en combustible. Chevrolet tiene planes para ofrecer al menos cuatro modelos turbodi¨¦sel y Mazda present¨® en el Sal¨®n de Los ?ngeles un nuevo CX-5 con un motor a gas¨®leo. El Q7 turbodi¨¦sel no hace sino intentar aprovechar el fil¨®n.
Dan Nicholson, responsable de sistemas de propulsi¨®n en General Motors, cree que hay muchos leales al TDI de Volkswagen que est¨¢n abiertos a una alternativa. ¡°Suelen interesarse m¨¢s por la tecnolog¨ªa que el cliente normal¡±, a?ade. Los t¨¦cnicos que desarrollan el nuevo motor dicen que es tan silencioso que suena como un susurro. Es el concepto que utiliza su filial europea Opel para ofrecer estos coches. A BMW, por ejemplo, la agencia de protecci¨®n del medio ambiente le dio el certificado para vender la nueva gama de veh¨ªculos di¨¦sel, que incluye el sed¨¢n 328d y los todocaminos xDrive28d y el xDrive35d.
La autoridad de EEUU ha endurecido el control para estos motores tras el ¡®dieselgate¡¯
Honeywell, que fabrica los turbos que se usan en los motores di¨¦sel, se?ala que hay varios factores que permitir¨¢n que retomen las ventas tras la debacle de 2016, hasta el punto de que anticipan que podr¨ªa llevar a doblar la cuota de mercado. Se fijan en dos cosas para hacer la reflexi¨®n. Por un lado, indican que el bajo precio de la gasolina en el surtidor ha reducido la ventaja competitiva del di¨¦sel, al igual que la de los h¨ªbridos. Cuando el precio del combustible suba, estos motores ganar¨¢n atractivo. Por otro, citan la tendencia a conducir coches cada vez m¨¢s grandes, hasta el punto de que las ventas de los todoterrenos y furgonetas?representan ya el 55% del mercado de turismos. Las de berlinas y cup¨¦s caen.
Alan Schaeffer, director ejecutivo del Diesel Technology Forum, explica que estos coches son de gran valor para muchos consumidores que conducen veh¨ªculos como todoterrenos y furgonetas. ¡°Muchos se preguntan tras la crisis de las emisiones si el di¨¦sel es una opci¨®n viable¡±, se?ala. ¡°En octubre se vendieron m¨¢s veh¨ªculos de pasajeros di¨¦sel que h¨ªbridos y el¨¦ctricos juntos¡±.
Mercedes-Benz, que tambi¨¦n ofrece modelos a gas¨®leo en sus concesionarios estadounidenses, cree que el esc¨¢ndalo de Volkswagen pone las cosas m¨¢s dif¨ªciles al resto y por eso trata de determinar si merece la pena ofrecer nuevos modelos. El fin de las ventas es en este momento una ¡°opci¨®n te¨®rica¡±, como admit¨ªa Matthias ?L¨¹hrs en la feria de Los ?ngeles. De momento, ha dejado de importar el sed¨¢n C300d. Es por este motivo que los analistas del sector dan por hecho que no habr¨¢ un renacimiento del di¨¦sel. Y, si sobrevive, ser¨¢ un mercado a¨²n m¨¢s de nicho, confinado a los veh¨ªculos grandes.?
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