Ocho a?os de Obama en ocho indicadores econ¨®micos

?Est¨¢ Estados Unidos mejor de lo que se lo encontr¨® Barack Obama hace ocho a?os? Los indicadores muestran que s¨ª. La econom¨ªa toca el pleno empleo, la vivienda recuper¨® gran parte del valor, las ventas de coches est¨¢n a niveles r¨¦cord, el precio de las gasolinas est¨¢ bajo, hay menos personas sin seguro m¨¦dico y el d¨¦ficit se redujo en m¨¢s de la mitad. Pero el registro del presidente est¨¢ lejos de ser perfecto. La pobreza se redujo muy poco, los sueldos se estancaron y creci¨® el n¨²mero de estadounidense que reciben ayudas para comprar alimentos.

Wall Street.- El derrumbe de Lehman Brothers provoc¨® la mayor hecatombe financiera desde la Gran Depresi¨®n. El Dow Jones, el indicador de referencia del parqu¨¦ neoyorquino, luchaba por mantener el nivel de los 8.000 puntos coincidiendo con la toma de posesi¨®n de Barack Obama. El desplome continu¨® hasta comienzos de marzo, cuando cay¨® hasta los 6.600 puntos. Ahora el selectivo neoyorquino tantea desde hace tres semanas el nivel hist¨®rico de los 20.000 puntos. El S&P 500 y el Nasdaq llevan ocho semanas movi¨¦ndose en m¨¢ximos.

Crecimiento.- La econom¨ªa est¨¢ decididamente mejor a la que se hered¨® el dem¨®crata. El producto interior bruto rond¨® en el tercer trimestre los 16,7 billones de d¨®lares, un 12% m¨¢s alto que en el mismo periodo de 2008. EE UU se contrajo un 5,4% en el primer trimestre de 2009 y un 2,7% ese ejercicio. De ah¨ª pas¨® a encadenar siete a?os de crecimiento. La actividad econ¨®mica se expandi¨® un 3,5% en el tercer trimestre de 2016, la mejor lectura en dos a?os. Pese a esta solidez, la recuperaci¨®n se caracteriz¨® por ser irregular. Se proyecta que el crecimiento para el conjunto del a?o rondar¨¢ el 1,9%, un punto y medio por debajo del potencial.

Empleo.- La poblaci¨®n ocupada rondaba los 133,7 millones de personas cuando Barack Obama llev¨® a la Casa Blanca y hab¨ªa 12,4 millones de parados. En los primeros 13 meses de su gobierno se perdieron 4,3 millones de empleos, la mitad de todos los que destruy¨® la Gran Recesi¨®n. El paro escal¨® hasta el 10%. El mercado laboral no recuper¨® el nivel previo a la crisis hasta mediados de 2014. El dem¨®crata har¨¢ el traspaso de poder con una ganancia de 12 millones de empleos y cinco millones de parados menos de los que le dej¨® George Bush.

Tipos.- La recuperaci¨®n se debe en gran medida a la masa de est¨ªmulos que moviliz¨® la Reserva Federal para apoyar el crecimiento y estabilizar el sistema financiero. Obama asumi¨® el cargo con los tipos de inter¨¦s hundidos en el 0%. En paralelo, realiz¨® tres rondas de compra masiva de deuda que dispar¨® su balance de 1,8 billones de d¨®lares a 4,5 billones. El proceso de normalizaci¨®n comenz¨® hace un a?o, con la primera subida de tipos en nueve a?os. Le sigui¨® una segunda el mes pasado. El tipo de una hipoteca a 30 a?os es el 3,54%, la mitad que con Bush.

Inflaci¨®n.- Obama deja a Trump una econom¨ªa que crece lo suficiente para que no se le desboque el alza de precios. La tasa de inflaci¨®n est¨¢ ahora en el 1,7%, tres d¨¦cimas por debajo del objetivo de estabilidad de precios. Eso est¨¢ permitiendo que la Reserva Federal vaya abandonando de manera gradual los est¨ªmulos. Es una situaci¨®n opuesta a la de hace ocho a?os, cuando EE UU qued¨® atrapada una peligrosa espiral deflacionista. Las salarios, en paralelo, vuelven a crecer tras a?os de estancamiento, a un ritmo anual del 2,9%.

Confianza.- Los estadounidenses son optimistas hacia la marcha de la econom¨ªa, pese a la ret¨®rica catastrofista que utiliz¨® Donald Trump durante la campa?a electoral. El indicador de confianza est¨¢ ahora en los 113,7 puntos, la mejor lectura desde agosto de 2001. Cuando Obama jur¨® como presidente, estaba hundida en los 37,4 puntos. La renta media de las familias creci¨® un 12% durante los ¨²ltimos ocho a?o. Pero tambi¨¦n es cierto que ese sentimiento de mejora no es compartido por igual cuando se ve que hay 46 millones de personas que necesitan asistencia p¨²blica para hacer la compra.

Consumo.- La mejora de la econom¨ªa no se debe solo a Obama ni a la Fed. El repunte del crecimiento se explica mayormente por el sector privado, es decir, a que las empresas invierten y a que los consumidores est¨¢n dispuestos a abrir sus bolsillos. El gasto de las familias representa dos terceras partes del crecimiento. Durante los ¨²ltimos ocho a?os aprovecharon para reducir la deuda. El incremento del valor de la vivienda, el bajo coste del dinero y el abaratamiento de la gasolina les puso m¨¢s dinero a disposici¨®n.

Cuentas p¨²blicas.- Barack Obama dejar¨¢ la Casa Blanca dentro de dos semanas habiendo rebajado el d¨¦ficit p¨²blico un 60%, hasta los 590.000 millones de d¨®lares en el ejercicio 2016. Se explica gracias al efecto combinado de un incremento de los ingresos por el mejor crecimiento econ¨®mico y del recorte de gasto p¨²blico, que representa el 21,4% del PIB frente al 24,4% en 2009. Sin embargo, la deuda escal¨® de 10,6 billones de d¨®lares a 19,9 billones en sus ocho a?os de mandato.