El negocio de los coches ¡®vintage¡¯: cl¨¢sicos de los ochenta que rugen con fuerza
Nuevos ricos tecnol¨®gicos o herederos emergentes entran en el mercado de los autom¨®viles del pasado
Algunos expertos del mercado de coches cl¨¢sicos los llaman 'la generaci¨®n de los foros de Internet', otros se refieren a ellos tan solo como una nueva hornada de intermediarios y compradores que van a dar un impulso a un negocio que vivi¨® un desmedido auge hasta el periodo 2014-15 y que en los ¨²ltimos dos a?os ha experimentado un tremendo ajuste: ya no se vende cualquier cosa ni a cualquier precio. Como dec¨ªa Neil Garrand, experto en la marca Aston Martin, en un reciente balance del mercado hecho para la firma brit¨¢nica Classic & Sport Finance (CSF), "nadie piensa ahora que comprar un autom¨®vil cl¨¢sico es un pasaje directo para obtener enormes beneficios a corto plazo. A ra¨ªz de esto, estamos viendo que vuelven al mercado verdaderos entusiastas que aprecian los autom¨®viles como las obras de arte que son".
Adolfo Orsi, uno de los coautores del Classic Car Auction Yearbook, un texto de referencia en el sector, coincide en que "los n¨²meros [del periodo 2016-17] se?alan que los compradores, a diferencia de los ¨²ltimos a?os, son mucho m¨¢s selectivos y que los precios se est¨¢n asentando gradualmente". Los datos del libro muestran un aumento de la oferta de veh¨ªculos y un incremento a¨²n mayor de los vendidos en subastas, lo que para algunos analistas supone el inicio de una etapa de expansi¨®n del negocio. Orsi, nieto de Adolfo e hijo de Omar Orsi, propietarios de Maserati desde 1937 hasta 1969, lleva 30 a?os en el mercado de cl¨¢sicos y cree que las subastas de Scottsdale (Arizona) de mediados de enero pr¨®ximo y el sal¨®n R¨¦tromobile en Par¨ªs a principios de febrero ser¨¢n clave para calibrar mejor el estado de salud del mercado de coches vintage.
La firma de subastas francesa Artcurial Automobiles vendi¨® veh¨ªculos por valor de 34 millones de d¨®lares en la pasada edici¨®n de R¨¦tromobile y sus expectativas para 2018 son buenas. Matthieu Lamoure, gerente de la empresa, sostiene que el fin de la etapa de m¨¢xima especulaci¨®n en el ¨²ltimo a?o ha beneficiado a tres tipos de veh¨ªculos: los perfectamente restaurados que tienen los documentos y fotograf¨ªas que prueban el trabajo hecho, los coches con historia en estado original sin ninguna restauraci¨®n; y los muy raros, que se han ganado un sitio en la historia del automovilismo.
Dentro de las tres categor¨ªas, los coches de mayor cotizaci¨®n vendidos en subastas entre 2016 y 2017 siguen siendo los fabricados entre los cincuenta y sesenta. De los 10 mejor pagados hay ocho modelos de esos a?os y el que mayor valor alcanz¨® fue un Aston Martin DBR1 de 1956: 22,55 millones de d¨®lares. Claro que el coche, adem¨¢s de estar en perfecto estado, ten¨ªa un historial apabullante: ganador de los 1.000 kil¨®metros de N¨¹rburgring en 1959, gemelo del ganador ese mismo a?o en Le Mans y pilotado por Stirling Moss o Jack Brabham, entre otros.
Lo llamativo, sin embargo, es que el segundo m¨¢s cotizado fue un McLaren F1 de 1995, que alcanz¨® la friolera de 15,62 millones. Este modelo, junto a otros como los Lamborghini Countach o Diablo, los Ferrari 308, Testarossa, F40 y F50, Aston Martin Vantage Zagato o Porsche GT1, est¨¢n en la mira de un comprador cada vez m¨¢s habitual en el mercado de los cl¨¢sicos. "Generalizando, es un cliente que ha hecho fortuna en compa?¨ªas tecnol¨®gicas o que es heredero de grandes fortunas. Y no s¨®lo de Estados Unidos, tambi¨¦n de Oriente Pr¨®ximo y China", explica Lamoure. "Tiene entre 40 y 50 a?os de edad y no sabe ni le interesa nada la mec¨¢nica", a?ade Rob Johnson, gerente de CSF. Para este experto, el coleccionista de coches vintage que levantaba el cap¨® para inspeccionar el motor y que incluso se atrev¨ªa a involucrarse en la reparaci¨®n y restauraci¨®n del veh¨ªculo, simplemente est¨¢ desapareciendo por el ciclo natural de la vida. Buenos coches de la etapa anterior a la Segunda Guerra Mundial hay pocos en el mercado y los de periodos posteriores son los que, de momento, copan la atenci¨®n de esos clientes que son muy ricos pero tambi¨¦n muy mayores. El proceso de regeneraci¨®n del coleccionista, que acaba de empezar, convertir¨¢ en cl¨¢sicos a muchos coches que a¨²n no son considerados de esta categor¨ªa.
Influencia del cine
Esta nueva generaci¨®n de compradores, dicen los expertos, ten¨ªan cuando eran adolescentes en un p¨®ster de su habitaci¨®n los modelos que ahora compran. En muchos casos eran veh¨ªculos que aparec¨ªan en pel¨ªculas o series de televisi¨®n, como el Ferrari 308 GTS que conduc¨ªa el actor Tom Selleck en Magnum, el Ferrari Testarossa que catapult¨® a Don Johnson a la fama en Corrupci¨®n en Miami (Miami Vice), el Maserati Merak que aparece en El precio del poder (Scarface) o el Lamborghini Countach negro del filme Los locos del Cannonball. Lo curioso de esta nueva generaci¨®n de coleccionistas es que no anhelan el coche que conduc¨ªan sus padres o que han supuesto un antes y un despu¨¦s desde el punto de vista mec¨¢nico o de dise?o, sino los que popularizaron el cine, la televisi¨®n y la industria del v¨ªdeo musical.
La renovaci¨®n de la clientela va acompa?ada de la aparici¨®n de nuevos intermediarios que trabajan fuera de las casas de subastas para tener un contacto directo con el inversor. Jan L¨¹hn en Alemania, Arthur Kar de L'Art de l'Automobile en Francia o Ricardo Pessoa con Cool & Vintage en Portugal, son algunas de las nuevas referencias entre los vendedores. Usan im¨¢genes o v¨ªdeos inspirados en un estilo de vida desenfadado en sus webs o Instagram y apuestan por exhibiciones peque?as y ef¨ªmeras.
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