Una acusaci¨®n de acoso laboral avinagra el ribeiro
La exgerente del consejo regulador de la Denominaci¨®n de Origen Ribeiro demanda al organismo por respaldar el ¡°hostigamiento¡± del presidente
Apenas unas semanas bastaron para que prendiera un fulgurante conflicto en la direcci¨®n del Consejo Regulador de la Denominaci¨®n de Origen Ribeiro, el m¨¢s antiguo de los cinco organismos de control de los vinos gallegos. El cisma en las bodegas de la comarca orensana ha echado ra¨ªces, divididos los apoyos entre los dos protagonistas del enfrentamiento: Cristina Alcal¨¢, experta en vinos, gerente y secretaria del organismo desde 2016 hasta diciembre del a?o pasado, y Juan Manuel Casares, presidente del consello, al que Alcal¨¢ atribuye su despido como represalia por haber informado al pleno del supuesto acoso laboral al que Casares la somet¨ªa.
La exgerente, que ha demandado al consello en el juzgado de lo social, acusa al presidente de haber vaciado de funciones su cometido, de "difusi¨®n de rumores falsos" y de "proferir comentarios injuriosos" contra ella. Una parte de las bodegas se ha posicionado en contra de la decisi¨®n de Casares que, no obstante, logr¨®, al segundo intento, el respaldo del pleno, principal ¨®rgano de gobierno, al despido.
Alcal¨¢ accedi¨® al organismo regulador de O Ribeiro, con sede en Ribadavia, en enero de 2016 con un contrato indefinido de direcci¨®n y gerencia tras haber superado un proceso de selecci¨®n externo. Fue la primera vez en la que el consello confi¨® en un profesional del sector elegido mediante un sistema objetivo.
Cinco meses despu¨¦s, el pleno, integrado por representantes del sector, de sindicatos agrarios y de la Xunta (estos con voz y sin voto), le pidi¨® que asumiese tambi¨¦n las funciones de secretaria. Alcal¨¢ gestion¨® sin problema aparente el organismo hasta que el pasado agosto la Xunta design¨® como presidente a Juan Manuel Casares, un cargo del PP orensano, veterinario, al que ya hab¨ªa situado antes como director de la Estaci¨®n de Viticultura y Enolog¨ªa de Galicia. Con la presidencia de Casares, el control del organismo volvi¨® al PP, tras un periodo de interinidad a cargo de Felic¨ªsimo Pereira (profesional vinculado al sector del vino por tradici¨®n familiar durante m¨¢s de 25 a?os). Pereira sustituy¨® a Miguel ?ngel Viso, a quien el l¨ªder popular orensano, Jos¨¦ Manuel Baltar, situ¨® de n¨²mero uno en la lista al Congreso en las ¨²ltimas elecciones generales. Antes que Viso, otros presidentes ya hab¨ªan accedido, tras dejar el consello, a cargos institucionales en representaci¨®n del PP.
Casares desembarc¨® el 26 de julio pasado en el consello. Dos meses despu¨¦s, y tras solo unas semanas de trabajo conjunto, estall¨® el conflicto: la demandante sostiene que el nuevo presidente ley¨® y firm¨® ante el pleno "graves acusaciones y falsedades" contra ella, por lo que envi¨® al presidente un burofax, e inform¨® por escrito de su contenido a los vocales, para requerirle que cesara en "las conductas de hostigamiento". Seg¨²n el acta de conciliaci¨®n, Alcal¨¢ afirma que "lejos de proceder al cese en el acoso", Casares comenz¨® a "promover decisiones organizativas" que le supusieron "desprestigio ante el personal de la empresa y ante la sociedad". Tanto la Conseller¨ªa de Medio Rural como Juan Manuel Casares han declinado hacer declaraciones a este diario.
Alcal¨¢ cont¨® inicialmente con el respaldo de los vocales, que se opusieron en su totalidad a la primera propuesta de cese ¡ªentonces solo como secretaria¡ª realizada por Casares en noviembre. D¨ªas despu¨¦s, estando ella de vacaciones, el presidente le comunic¨® por correo electr¨®nico que deb¨ªa convocar dos plenos extraordinarios para proponer su "cese como secretaria" y su "despido como gerente". A la segunda, el pleno respald¨® al presidente.
El pasado 18 de enero Alcal¨¢ acudi¨® al Servicio de Mediaci¨®n, Arbitraje y Conciliaci¨®n en un intento por alcanzar un acuerdo amistoso con el consejo regulador. No obstante, la entidad ¡ªcon autonom¨ªa aunque tutelada por la Conseller¨ªa de Medio Rural¡ª no accedi¨® a la petici¨®n del despido nulo que formula Alcal¨¢ en base al "hostigamiento" sufrido. Una demanda que extiende a los 10 vocales del pleno, a los que achaca "connivencia" con el presidente.
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