Hipotecarse con tu pareja te puede salir muy caro
M¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s, muchos propietarios siguen compartiendo el piso con sus exnovios ante la imposibilidad de venderlo y saldar la deuda con el banco. Antes de firmar conviene atar algunos cabos
La ¨²ltima crisis inmobiliaria dej¨® un sinf¨ªn de damnificados. Muchos a¨²n no pueden pasar p¨¢gina porque el banco les recuerda cada mes que no hay nada que una m¨¢s ¡ªsalvo los hijos¡ª que la firma de una hipoteca durante 30 o 40 a?os. Los efectos de la crisis a¨²n pesan sobre las personas que se hipotecaron en los a?os de bonanza con sus parejas, con las que hoy no comparten nada, salvo las letras hipotecarias y una casa.
Cuando se acab¨® el amor se encontraron con que las ventas y los precios ca¨ªan en picado (a partir de 2008). Con un exceso de endeudamiento, quedaron atrapados en la hipoteca y sin poder deshacerse de la vivienda (algunos incluso se han visto obligados a vivir bajo el mismo techo a la espera de tiempos mejores). Y as¨ª siguen m¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s, aunque durante este tiempo hayan podido amortizar sus hipotecas gracias a la bajada de los tipos de inter¨¦s. "La casa nos cost¨® 175.000 euros en 2004. Son 50 metros ¨²tiles en el barrio de Canillejas (Madrid). Me quedan por pagar 130.000 euros. Nos dieron un 110%". Es el caso de Laura M¨¢s, una madrile?a de 41 a?os, que se separ¨® de su pareja un a?o despu¨¦s de comprar.
El mercado se ha recuperado, pero no lo suficiente. El precio se ha revalorizado un 10,3% desde el m¨ªnimo de 2015, aunque acumula una ca¨ªda del 36,7% desde el pico del boom en 2007, seg¨²n Tinsa. "Gracias a casi 10 a?os de pago de cuotas con alta amortizaci¨®n de capital ha permitido la venta a precios actuales en muchos casos", se?ala Toni Exp¨®sito, director general de Comprarcasa. "Las econom¨ªas m¨¢s saneadas y con hijos m¨¢s mayores han comenzado a vender la vivienda com¨²n y adquirir una propiedad para cada uno", dice Jes¨²s Duque, vicepresidente de Alfa Inmobiliaria. Aunque no todos: "Todav¨ªa no podr¨ªamos venderla por lo que debemos, pero la idea es hacerlo en cuanto pueda", dice Laura. Aunque Duque avisa de que algunas viviendas, por su ubicaci¨®n, nunca recuperar¨¢n los precios de hace a?os.
Mientras tanto, el auge del alquiler ha supuesto un alivio para sus econom¨ªas. "Algunos quieren acabar con los v¨ªnculos y vender lo antes posible. A¨²n as¨ª, no parecen tener prisa, ya que tienen compensadas sus cargas hipotecarias con los ingresos", recuerda Exp¨®sito.
Pero la memoria es fr¨¢gil y los espa?oles han vuelto a hipotecarse a medias. "No hay datos pero mayoritariamente las hipotecas son firmadas por parejas", dice Santos Gonz¨¢lez, presidente de la Asociaci¨®n Hipotecaria Espa?ola (AHE). En 2017 la contrataci¨®n creci¨® un 9,7%, hasta sumar 310.096, su cifra m¨¢s alta desde 2011, seg¨²n el INE. Y adem¨¢s, entidades como BBVA ya venden hipotecas que cubren m¨¢s del 100% del valor de la tasaci¨®n.
Ante semejante caramelo, toca echar mano de prudencia y sentido com¨²n. Contratar una hipoteca con la pareja tiene riesgos y se hacen m¨¢s patentes cuando acaba el amor y el buen trato, sobre todo si los tipos de inter¨¦s empiezan a subir. Por eso, "que el v¨ªnculo sentimental sea estable es clave porque las parejas se separan, pero el cr¨¦dito no. La estabilidad determina una parte importante de su futuro econ¨®mico", dice Gonz¨¢lez. "Hipotecarse solo no est¨¢ al alcance de todo el mundo, pero limita la responsabilidad y evita que se generen conflictos por culpa de una separaci¨®n. En cambio, hipotecarse en pareja facilita el acceso al cr¨¦dito y reduce notablemente el riesgo de impago, aunque puede convertirse en una atadura importante si hay una ruptura", indica Miquel Riera, experto en hipotecas de HelpMyCash.com. Hay que tener en cuenta que ambos son responsables de su pago, aunque se separen. Y, en caso de demora o impago, el banco ir¨¢ a por el patrimonio presente y futuro de los dos. No har¨¢ distinciones.
El paso por el notario es obligado. Tanto si se trata de novios como de parejas de hecho o matrimonios con separaci¨®n de bienes, "hay que dejar constancia de qui¨¦n paga m¨¢s y cu¨¢nto m¨¢s, ya sea porque sus padres le hayan prestado el dinero y haya abonado la entrada o porque tenga m¨¢s ahorros. En caso contrario, pasados los a?os se olvidar¨¢", dice Jos¨¦ Corral, miembro de la Comisi¨®n Permanente del Consejo General del Notariado y decano del Colegio Notarial de Cantabria. As¨ª, antes de firmar las escrituras "conviene suscribir un contrato ante notario en el que se especifique la proporci¨®n de propiedad de cada uno y la cuota hipotecaria que asumir¨¢n y qui¨¦n se quedar¨ªa con la casa y la hipoteca en caso de separaci¨®n", a?ade Riera.
V¨ªas de escape
Una vez se rompe la pareja hay varias salidas, con permiso del mercado inmobiliario. La m¨¢s sencilla es vender la casa a un tercero y saldar la deuda. Si no es posible, "una de las partes puede renunciar a ella sin compensaci¨®n econ¨®mica o vender su parte a la expareja ¡ªaunque es la peor de las soluciones porque tributa del 6% al 10%, seg¨²n la comunidad aut¨®noma¡ª. Es mejor hacer una extinci¨®n de condominio, que tributa al 1%", dice el notario Jos¨¦ Corral. Con esta operaci¨®n deja de figurar en la escritura de compraventa. Otra cosa bien distinta es que el banco acepte liberar a uno de los titulares de la hipoteca, algo muy improbable. "Supone perder una garant¨ªa de pago, por lo que es normal que, a priori, no est¨¦ dispuesto a efectuar esa operaci¨®n. De hecho, solo se acepta si el que se convertir¨¢ en titular ¨²nico tiene un muy buen perfil o si se a?aden garant¨ªas adicionales, como un nuevo cotitular o un aval", aclara Riera. Para el presidente de la AHE este es, sin duda, el verdadero problema. "Al banco, adem¨¢s de la solvencia, le importa la liquidez, por lo que no se va a conformar con un solo salario. Hay que sustituir al pagador de la hipoteca, por ejemplo, convirtiendo al padre en titular", explica.
Al margen de la hipoteca y del desamor, la firma de un testamento donde se deje el usufructo a la pareja en caso de fallecimiento (para que pueda seguir viviendo en la casa de por vida), puede evitar muchos otros problemas. El notario Jos¨¦ Corral reconoce que cada vez se hacen m¨¢s testamentos en este sentido por parte de parejas de hecho, novios o matrimonios. En caso contrario, se pueden dar casos dram¨¢ticos.
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