M¨¦xico estudia un arancel sobre el ma¨ªz y soja de EE UU si Trump insiste en el proteccionismo
El Gobierno de Pe?a Nieto medita gravar las importaciones de estos productos, valoradas en 4.000 millones de d¨®lares anuales
La batalla comercial entre M¨¦xico y Estados Unidos amenaza con subir de tono en las pr¨®ximas semanas. El pa¨ªs latinoamericano analiza imponer un gravamen sobre los 4.000 millones de d¨®lares en importaciones anuales de ma¨ªz y soja de Estados Unidos si el presidente Donald Trump intensifica la disputa comercial con nuevos aranceles. La mayor parte del ma¨ªz que importa M¨¦xico no es para consumo humano, sino para alimentar al ganado.
A principios de mes, M¨¦xico ya tom¨® represalias contra productos estadounidenses como el acero, las manzanas y la carne de cerdo despu¨¦s de que Trump impusiese?aranceles sobre el acero y el aluminio mexicanos, golpeando a parte de la base electoral del magnate republicano. El presidente estadounidense no incluy¨® en la lista a los productos agr¨ªcolas m¨¢s lucrativos de EE UU: los granos, especialmente el ma¨ªz y la soja, utilizados para alimentar vacas, cerdos y pollos de M¨¦xico.
Los aranceles afectar¨ªan al principal mercado de exportaci¨®n de los productores estadounidenses de ma¨ªz. M¨¦xico podr¨ªa tratar de disminuir el impacto en su propia industria y en los consumidores abriendo cuotas libres de arancel que podr¨ªan representar un aliciente para proveedores como Brasil y Argentina. ¡°Este (...) es un tema que est¨¢ para la fase dos¡±, afirma Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), el principal organismo empresarial de su sector en el pa¨ªs.?
Esta nueva medida por parte del gobierno mexicano se debati¨® en una reuni¨®n a la que asisti¨® De la Vega hace 10 d¨ªas. El empresario agr¨ªcola subraya que cualquier movimiento en contra de los granos afectar¨ªa directamente al llamado cintur¨®n maicero (corn belt) de la primera potencia mundial: Estados como Misuri, Kansas, Iowa y Nebraska, que llevaron a Trump a la Casa Blanca en la elecci¨®n presidencial de 2016.
El director de comercio internacional de la Secretar¨ªa (Ministerio) de Agricultura de M¨¦xico,?Ra¨²l Urteaga, indic¨® a Reuters que M¨¦xico "por el momento" no est¨¢ apuntando a los granos estadounidenses. Pero se neg¨®, en cambio, a descartar tal medida en el futuro, a?adiendo que M¨¦xico estaba buscando proveedores alternativos. Un funcionario de la Secretar¨ªa de Econom¨ªa declin¨® aclarar si los funcionarios estaban estudiando o no los aranceles a los granos procedentes de EE UU.
La decisi¨®n de no imponer aranceles al ma¨ªz y soja estadounidenses como parte de la represalia anunciada por M¨¦xico la semana pasada ten¨ªa el prop¨®sito de mantener opciones en la mesa negociadora en tanto que sigan en marcha las conversaciones para modernizar el TLC. Tambi¨¦n evitar perjudicar al consumidor mexicano con precios m¨¢s altos, seg¨²n remarca una fuente comercial familiarizada con el asunto.
Una de las principales preocupaciones de M¨¦xico es la decisi¨®n de Trump de iniciar una investigaci¨®n de seguridad nacional sobre las importaciones de veh¨ªculos y autopartes. La simple amenaza ha sembrado el temor en el pa¨ªs latinoamericano, cuyas exportaciones al vecino del norte dependen, en gran medida, de la industria automotriz.
Importantes intereses
En las ¨²ltimas dos d¨¦cadas, los granos baratos procedentes de EE UU han contribuido al crecimiento del sector ganadero de res de M¨¦xico, devenido en un importante exportador mundial. Si se impusieran aranceles mexicanos de represalia a la soja y al ma¨ªz, la industria tendr¨ªa que esforzarse ¡ªprevisiblemente, con el apoyo de las autoridades mexicanas¡ª por encontrar suficientes proveedores alternativos sin afectar a su estructura de costos, algo harto complicado.?
¡°No hay una posibilidad real de sustituci¨®n de estos dos productos a corto plazo. Las implicaciones son clar¨ªsimas. En el caso de carne de cerdo y de res el impacto en materia de costos ser¨ªa brutal y eso se transferir¨ªa primero que nadie al consumidor mexicano¡±, ha aseverado Mariano Ruiz-Funes, un ex subsecretario de Agricultura.
De la Vega afirma que se est¨¢ evaluando con la Secretar¨ªa de Econom¨ªa la posibilidad de abrir una amplia cuota libre de aranceles para atraer importaciones de otros proveedores y contrarrestar el mayor costo de los granos estadounidenses: exactamente lo que hizo la semana pasada con la carne de cerdo.
Los beneficiarios inmediatos podr¨ªan ser Brasil y Argentina, pa¨ªses a los que los importadores mexicanos ya est¨¢n comprando m¨¢s granos, tanto por razones econ¨®micas como por parte de una estrategia revitalizada para reducir la dependencia de Estados Unidos desde que Trump comenz¨® a amenazar con sacar a su pa¨ªs del Tratado de Libre Comercio (TLC). El jefe del CNA espera que las importaciones de ma¨ªz de Brasil alcancen el mill¨®n de toneladas para finales de a?o. De Argentina proceder¨¢n otras 500.000. Esos vol¨²menes est¨¢n, sin embargo, muy lejos de los env¨ªos estadounidenses: el a?o pasado, los agricultores de la potencia norteamericana vendieron a M¨¦xico unos 14 millones de toneladas de ma¨ªz y casi cuatro millones de toneladas de soja.
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