Si heredas, ?cu¨¢nto pagar¨¢s por el impuesto de sucesiones en tu comunidad aut¨®noma?
Las reducciones y las bonificaciones son muchas y muy amplias, pero si tienes que pagar este tributo, te saldr¨¢ mucho m¨¢s caro en unas regiones que en otras
Recibir una herencia no son siempre todo ventajas. En tela de juicio se encuentra, desde hace un tiempo, el impuesto de sucesiones que la grava. Este tributo, de or¨ªgenes muy antiguos, est¨¢ regulado por una normativa estatal, pero su gesti¨®n concreta corresponde a las distintas comunidades aut¨®nomas, en el marco de la financiaci¨®n auton¨®mica. Esto se puede traducir en diferencias muy marcadas en el importe a pagar por la sucesi¨®n, seg¨²n la autonom¨ªa en la que haya residido los ¨²ltimos cinco a?os el fallecido del que se hereda, tal y como establece la legislaci¨®n con car¨¢cter general. En el caso de herencias procedentes de difuntos que viv¨ªan en el extranjero, por el contrario, se aplicar¨¢ la normativa estatal.
Entonces, ?cu¨¢nto deber¨¢ a Hacienda un contribuyente que reciba una herencia? Hacer n¨²meros para calcular este impuesto resulta especialmente laborioso.
Reducciones en la vivienda habitual
A grandes rasgos, el primer c¨¢lculo consiste en restar deudas, cargas y gastos deducibles de la llamada masa hereditaria bruta. Se obtendr¨¢ as¨ª la base imponible, sobre la que cada Comunidad Aut¨®noma aplica determinadas reducciones en algunos de los elementos que componen la herencia, como los seguros de vida. Por ejemplo, todas las regiones tienen reducciones sobre el 95% o m¨¢s del valor de la vivienda habitual que se hereda, hasta un techo que va de los 122.606 euros de Castilla-La Mancha, Castilla y Le¨®n, Extremadura, La Rioja y Murcia, a los 500.000 euros de Catalu?a, como aparece en el mapa interactivo.
Importantes bonificaciones
En lo que respecta a las bonificaciones, el caso m¨¢s sonado es el de Andaluc¨ªa, en la que el impuesto de sucesiones no se paga si se recibe una herencia por un importe igual o inferior al mill¨®n de euros. Pero los expertos subrayan que las herencias entre familiares directos, es decir, aquellas que pasan de un c¨®nyuge al otro, o de padres a hijos o al rev¨¦s, son exentas en todas las comunidades, en mayor o menor medida. De esta forma, la pr¨¢ctica totalidad de la herencia ¨Cun 99%¨C que se destine a c¨®nyuges, descendientes o ascendientes estar¨¢ exenta en Cantabria, Madrid y Murcia.?
En La Rioja esta exenci¨®n se aplicar¨¢ solo a una base imponible superior a 500.000 euros. Por debajo de este importe estar¨¢ exento el 98%. Una base imponible de hasta 100.000 euros dar¨¢ lugar a una bonificaci¨®n total en Cantabria, mientras que en Castilla y Le¨®n este l¨ªmite est¨¢ fijado en 400.000 euros.
Las comunidades establecen otras elevadas exenciones para personas con discapacidad o, en Baleares, para los hijos menores de 21 a?os. El complejo sistema de reducciones y bonificaciones que caracteriza este impuesto hace que el 80% de los herederos no tenga que pagarlo, seg¨²n los expertos.
?Arag¨®n, la m¨¢s cara?
Por el contrario, los que s¨ª tendr¨¢n que hacerlo podr¨ªan verse m¨¢s o menos afectados seg¨²n la regi¨®n en la que vivi¨® el difunto. Con datos del Consejo General del Notariado, Stop Impuesto de Sucesiones, una plataforma que lucha por la supresi¨®n de este tributo, ha elaborado el ejemplo de una persona de 30 a?os, soltera, que hereda de su padre bienes por 800.000 euros, de los que 200.000 euros corresponden a su vivienda.
En Andaluc¨ªa, este heredero no deber¨ªa pagar ni un euro a Hacienda por la sucesi¨®n, y en Canarias el recibo ser¨ªa de apenas 134 euros. Por el contrario, este importe se elevar¨ªa a 155.393 euros o 103.135 euros, respectivamente, en Arag¨®n y Asturias, las dos Comunidades Aut¨®nomas donde este contribuyente deber¨ªa m¨¢s dinero a las arcas p¨²blicas. Les siguen Castilla y Le¨®n (81.018 euros), la Comunidad Valenciana (63.193 euros), Castilla-La Mancha (31.759 euros), Galicia (15.040 euros), Cantabria (14.765 euros), Catalu?a (9.796 euros), Baleares (5.950 euros), La Rioja (3.175 euros), Murcia (1.640 euros), Extremadura (1.587 euros), y Madrid (1.586 euros). En Pa¨ªs Vasco y Navarra se aplica el r¨¦gimen foral.
Dificultades para asumir las deudas
¡°Los impuestos deben ser justos y, en este caso, no lo son¡±, denuncia el presidente de Stop Impuesto de Sucesiones, Juan Carlos Valverde. En sus palabras, ¡°en algunas comunidades, si te pasas del capital y en funci¨®n del grado de parentesco, Hacienda se puede llevar hasta un 80% de la herencia¡±. En opini¨®n de Rebeca V¨¢zquez, experta de fiscalidad del comparador bancario iAhorro, ¡°la normativa estatal deber¨ªa fijar unos l¨ªmites m¨¢ximos y m¨ªnimos dentro de los cuales pudieran moverse las normativas de las diferentes Comunidades Aut¨®nomas¡±.
Los que defienden la abrogaci¨®n de este tributo agitan los datos de las renuncias a las herencias como supuesta prueba de una excesiva imposici¨®n. En efecto, estas han pasado de las 11.048 que se registraron en 2007 a las 42.987 de 2017 (un 10,5% del total), lo que representa un incremento del 289% en tan solo 10 a?os. Los expertos que, por el contrario, abogan por su mantenimiento subrayan que estas renuncias no tienen como causa una fiscalidad exorbitante sino la crisis econ¨®mica, es decir, el c¨®ctel mortal formado por la burbuja inmobiliaria, hipotecas altas sobre inmuebles cuyo valor ha ido disminuyendo, y la dificultad que registraron las familias para desendeudarse. En otras palabras, las herencias llegan cargadas de deudas que algunos herederos no pueden asumir.
?Mejor donar en vida?
Sea como fuere, para pagar el impuesto el contribuyente tiene seis meses desde el fallecimiento de la persona que deja la herencia, aunque es posible solicitar una pr¨®rroga de otros 180 d¨ªas si se pide antes de que hayan transcurrido cinco meses. En determinadas ocasiones, sin embargo, y con el objetivo de pagar tributos m¨¢s bajos, V¨¢zquez aconseja plantearse una donaci¨®n en vida, sobre todo si se trata de patrimonios elevados. ¡°Ahora bien, no hay que olvidar que la donaci¨®n de bienes inmuebles es m¨¢s cara que la sucesi¨®n, por lo que se deber¨ªa analizar cada caso particular¡±, concluye.
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