Interior deja de someter a ¡°especial seguimiento¡± a los 15 presos de las tarjetas ¡®black¡¯
Instituciones Penitenciarias los incluy¨® el 21 de diciembre en un fichero de condenados por casos de corrupci¨®n "que hayan generado gran alarma social¡±
El Ministerio del Interior ha sacado a los 15 presos de las tarjetas black ¡ªentre los que se encuentra Rodrigo Rato¡ª del llamado Fichero de Internos de Especial Seguimiento (FIES), en el que los incluy¨® el 21 de diciembre para reforzar el control penitenciario sobre ellos. La decisi¨®n, confirmada a EL PA?S por fuentes del Departamento del ministro Fernando Grande-Marlaska, se tom¨® el pasado 1 de febrero despu¨¦s de que los abogados de los reclusos recurrieran la resoluci¨®n ante el titular del Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, Jos¨¦ Luis de Castro, y este requiera a Instituciones Penitenciarias un informe, seg¨²n detallan fuentes jur¨ªdicas. Fuentes del ministerio justifican el cambio de criterio en que ¡°se ha considerado que ya no hace falta que sigan en el fichero¡±.
El Fichero de Internos de Especial Seguimiento, actualmente dividido en cinco grupos, fue creado en 1991 para incrementar el control sobre los reclusos de ETA, aunque se extendi¨® a otros reos a los que se consideraba peligrosos e, incluso, a aquellos que entraban en prisi¨®n por su negativa a cumplir el entonces obligatorio servicio militar. Los condenados por las black fueron incluidos en el ¡°FIES-5 Caracter¨ªsticas especiales¡±, al que se adscriben aquellos penados por delitos ¡°relativos a la corrupci¨®n que hayan generado gran alarma social¡±, aunque tambi¨¦n a agresores sexuales, delincuentes arrepentidos que colaboran con la justicia y aquellos reclusos que, sin haber sido implicados en actividades terroristas, se han radicalizado en prisi¨®n.
En este fichero se almacena toda la informaci¨®n ¡°penal, procesal y penitenciaria¡± del interno, entre ellas las incidencias que haya protagonizado y sus ¡°comunicaciones con el exterior¡±, incluidas las que realiza con abogados. Cualquier novedad que suceda durante su reclusi¨®n ¡ªpermisos de salida, visitas al hospital o su participaci¨®n en actividades penitenciarias¡ª debe ser anotada ¡°el mismo d¨ªa que se produzca¡±, seg¨²n la instrucci¨®n interna de Prisiones de 2011 que regula el funcionamiento del FIES.
Interior asegura que desde que se incluy¨® a los 15 presos de las ¡®black¡¯ entre los reclusos de ¡°especial seguimiento¡± no se les hab¨ªa aplicado ninguna de las medidas reforzadas de control que el reglamento penitenciario permite aplicar a los internos incluidos en el fichero. E insisten en que su inclusi¨®n en el FIES tuvo como ¨²nico objetivo ¡°tener un r¨¢pido acceso a la informaci¨®n y novedades que se produjeran sobre estos internos¡±.
Las defensas calificaron entonces la decisi¨®n de ¡°injustificada¡±, ya que ¡°la ley exige que el delito cometido sea grave¡±, y consideraban que esa circunstancia no se daba. Tambi¨¦n descartaban que existiera alarma social, otro de los requisitos. Adem¨¢s, denunciaron que el escrito con el que se comunic¨® a los presos su inclusi¨®n en el FIES no especificaba los motivos de tal decisi¨®n.
En la actualidad, los 15 condenados se reparten entre las c¨¢rceles madrile?as de Navalcarnero y de Soto del Real. En la primera se encuentran los sindicalistas Antonio del Rey, Rodolfo Benito (ambos de CC OO) y Miguel ?ngel Abej¨®n (UGT); los exconsejeros de Caja Madrid por el PSOE Jos¨¦ Mar¨ªa de la Riva, Jorge G¨®mez Moreno, Francisco P¨¦rez Fern¨¢ndez y Antonio Romero, y el del PP Javier de Miguel S¨¢nchez. En la segunda est¨¢n el exvicepresidente Rodrigo Rato; el que fuera secretario de Estado Estanislao Rodr¨ªguez-Ponga, Gonzalo Mart¨ªn Pascual (UGT), ?ngel Eugenio G¨®mez del Pulgar (PSOE), Francisco Baquero (CC OO), Jos¨¦ Antonio Moral Sant¨ªn y Rub¨¦n Cruz (estos dos ¨²ltimos de IU).
Las direcciones de ambas prisiones optaron desde el primer momento por recluir a todos en m¨®dulos de respeto de cada una de las dos c¨¢rceles. Estos son espacios destinados a acoger a aquellos condenados que tienen penas bajas, as¨ª como a reclusos poco conflictivos o que por su buen comportamiento han conseguido un destino laboral dentro de la prisi¨®n. Los internos deben cumplir unas normas de convivencia, repartirse tareas y autogestionar los conflictos que surjan. Los siete que est¨¢n en Soto comparten m¨®dulo con los siete dirigentes del independentismo catal¨¢n que est¨¢n siendo juzgados en el Tribunal Supremo, adem¨¢s de con tres condenados por el caso G¨¹rtel, entre ellos Luis B¨¢rcenas.
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