Las lecciones de las d¨¦cadas perdidas de Jap¨®n
El Gobierno de Shinzo Abe impulsa una estrategia de acuerdos comerciales como ¨²ltimo pelda?o en su carrera, de modestos resultados, por reactivar el crecimiento
En Tokio se han puesto de moda las tiendas donde comprar y probar vinos. Donde reinaban las marcas chilenas y poco m¨¢s hoy es f¨¢cil encontrar una amplia variedad de vinos californianos, sudafricanos, argentinos, neozelandeses pero, sobre todo, vinos europeos. ¡°La gente viene a comprar un par de botellas para llevar a casa y tomarlo con queso, tambi¨¦n de importaci¨®n¡±, explica Shuichi Naruse, directivo de la cadena de supermercados Meidi-Ya en la principal tienda del grupo, en el barrio de Hiroo. Y, claro, ahora que el acuerdo comercial entre Jap¨®n y Europa ha propiciado una bajada de los aranceles sobre estos productos ¡°la gente se ha animado a consumir", admite Naruse que repasa el estado de la tienda antes de la hora de apertura. El Ministerio de Exteriores de Jap¨®n ha invitado a tres medios europeos, entre ellos EL PA?S, a conocer el impacto del acuerdo comercial UE-Jap¨®n sobre la econom¨ªa.
Como consecuencia de ese acuerdo, los aranceles sobre el vino europeo han desaparecido pero los del queso apenas se han reducido del 10% al 8,8%, aunque se ir¨¢n recortando progresivamente en los pr¨®ximos a?os. As¨ª que en algunos casos la rebaja es m¨¢s una ilusi¨®n que un hecho real ¡°pero suficiente para haber animado las ventas entre un 2% y un 3%¡±, puntualiza el responsable de Vinos Yamazaki, Kiyohito Hosaka, en su local de Ginza. Significativamente la publicidad del acuerdo comercial ha servido para compensar en cierta forma la reciente subida del impuesto equivalente al IVA del 8% al 10%, que ha entrado en vigor el pasado d¨ªa 1. Para evitar la repetici¨®n del escenario de 2014, cuando la subida de tres puntos del IVA provoc¨® un frenazo del consumo y llev¨® a la econom¨ªa a la recesi¨®n, el Ejecutivo promueve que las tiendas reembolsen adem¨¢s parte de las compras con vales descuento o con cheques de compra. Parece que, por ahora, funciona. "En 2014 s¨ª que sufrimos un serio varapalo en las ventas pero en esta ocasi¨®n no esperamos que tenga un gran impacto, por ahora no se nota", admite Shuichi Naruse en voz baja, mientras los empleados hacen su obligatoria tabla de ejercicios matutina.
"La apuesta de Abe por una estrategia de grandes acuerdos de libre comercio tiene como ¨²ltimo objetivo el crecimiento. La fuerte dependencia de la industria japonesa de las redes de producci¨®n internacionales le obliga a mantener los canales a la exportaci¨®n abiertos. De ah¨ª el empe?o en mantener el Acuerdo de Cooperaci¨®n Transpac¨ªfico (TPP por sus siglas en ingl¨¦s) pese a que Estados Unidos decidi¨® abandonarlo", apunta el profesor Fukunari Kimura, de la Facultad de Econ¨®micas de la Universidad de Keio. El profesor explica que Abe ha fijado las cesiones hechas con aquel acuerdo ¨Caceptar rebajas arancelarias sobre los productos agr¨ªcolas con la excepci¨®n del arroz, la carne, los productos l¨¢cteos el trigo y el az¨²car-- como la base para futuras negociaciones y el primer ministro conf¨ªa en sellar un pacto comercial antes de final de a?o que incluya a India, China, Corea, Australia y Nueva Zelanda, entre otros pa¨ªses de la regi¨®n. "Ser¨¢ dif¨ªcil y tendr¨¢ que hacerse a distintas velocidades entre los pa¨ªses pero marcar¨¢ un antes y un despu¨¦s para Jap¨®n", sentencia Kimura.
Desde que Shinzo Abe asumi¨® el poder en 2012, Jap¨®n ha intentado remontar la senda de deflaci¨®n y bajo crecimiento en la que llevaba sumida m¨¢s de dos d¨¦cadas aunque con resultados modestos. Su Gobierno acaba de revisar a la baja el crecimiento de la econom¨ªa en el segundo trimestre, del 1,8% calculado inicialmente al 1,3%. La inversi¨®n de las empresas se ha desplomado (apenas creci¨® el 0,2% frente al 1,5% inicial) ante la debilidad del crecimiento global y la amenaza proteccionista.
"Jap¨®n como Europa combate los s¨ªntomas, no las causas. Cree que con el apoyo a las grandes empresas, que es lo que significa la compra de bonos, es suficiente pero se equivoca, solo ha conseguido disparar la deuda", subraya durante una conversaci¨®n William Pesek, autor de Japonizaci¨®n, lo que el mundo puede aprender de las d¨¦cadas perdidas de Jap¨®n y que lleva 17 a?os viviendo en Tokio. "El Gobierno justifica la subida del IVA para financiar la sanidad y las pensiones y mantener el ajuste presupuestario. Pero ya lo hizo en 2014 y la deuda se ha disparado, es una patada adelante", recalca Pesek. La deuda p¨²blica supera ya el 230% del PIB.
En los ¨²ltimos meses, el Banco Central Europeo (BCE) repite con insistencia que la pol¨ªtica monetaria no puede por si sola reactivar la econom¨ªa europea y que para alejar el fantasma de un escenario a la japonesa hace falta un instrumento fiscal central que act¨²e de forma antic¨ªclica a nivel federal. ¡°No hay ninguna pol¨ªtica monetaria que no tenga una pol¨ªtica fiscal¡±, dec¨ªa su presidente Mario Draghi ante la Euroc¨¢mara en una de sus ¨²ltimas comparecencias al frente del organismo, cuya batuta asumir¨¢ el 1 de noviembre Christine Lagarde.
Lo cierto es que la econom¨ªa de la eurozona se fren¨® entre abril y junio, al crecer un 0,2% frente al 0,4% del trimestre anterior. En t¨¦rminos interanuales eso implica un crecimiento del 1,2% en el segundo trimestre frente al 1,3% alcanzado tres meses antes. Y los expertos advierten que con Alemania al borde de la recesi¨®n, tras la contracci¨®n del PIB en el segundo trimestre, la desaceleraci¨®n ir¨¢ a m¨¢s en la segunda mitad del a?o.
Mientras, la inflaci¨®n de la zona euro se mantiene en su nivel m¨¢s bajo en casi tres a?os al situarse en agosto en el 1%, muy por debajo del objetivo de inflaci¨®n del BCE cercano al 2%, a pesar de a?os de est¨ªmulos monetarios sin precedentes con recortes de tipos y compras de miles de millones de euros en bonos.
Lo peor, sin embargo, se lo lleva la productividad. Como alerta Adam Slater, economista jefe de Oxford Economics, el crecimiento de la productividad entre 2008 y 2018 en la eurozona se ha situado en el entorno del 0,1% y en e 0,3% entre 2001 y 2007. Ambos registros se situar¨ªan por debajo de las cifras que alcanz¨® Jap¨®n en los a?os noventa e incluso del 0,3% registrado por la econom¨ªa nipona desde 2008. En cambio, la eurozona ha sido capaz de aumentar la mano de obra un 0,5% anual desde 2016 pese a una ligera ca¨ªda de la poblaci¨®n en edad de trabajar, gracias en parte, seg¨²n Slater, a las reformas relacionadas con el aumento de la edad de jubilaci¨®n.
¡°Las similitudes entre buena parte de la eurozona y Jap¨®n son inc¨®modas, con un crecimiento y una inflaci¨®n muy bajos y el riesgo persistente de entrar en deflaci¨®n¡±, subraya Slater en su informe Por qu¨¦ evitar la Japonizaci¨®n puede ser una tarea masiva. La experiencia nipona, concluye el responsable de Oxford Economics, demuestra que es necesario llevar a cabo una fuerte expansi¨®n fiscal y monetaria, en l¨ªnea con lo que viene exigiendo el BCE.
Conversaciones preliminares con el Reino Unido ante el Brexit
La preocupaci¨®n sobre los efectos de la salida del Reino Unido de la Uni¨®n Europea tiene tambi¨¦n en vilo a Jap¨®n. Tanto que el Gobierno de Tokio ya han abierto conversaciones preliminares --legalmente Londres no puede iniciar ninguna negociaci¨®n comercial hasta que se materialice el Brexit-- con las autoridades brit¨¢nicas, "incluso a nivel t¨¦cnico", admiten fuentes gubernamentales, para un futuro acuerdo comercial entre los dos pa¨ªses.? "No podemos prejuzgar el futuro de las negociaciones pero no cabe duda de que la base de esa negociaci¨®n ser¨¢ el acuerdo de libre comercio entre la UE y Jap¨®n", subrayan esas mismas fuentes. Por lo que pueda pasar ante la creciente incertidumbre, empresas como Toyota, Nissan u Honda ya han empezado a trasladar la mayor parte de sus cadenas de montaje fuera del Reino Unido, as¨ª como las empresas dedicadas al sector de la maquinaria industrial.
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