Joan Clos: ¡°El acceso a la vivienda es un problema nacional¡±
Con unas 20.000 casas en las carteras de sus socios, el objetivo de Asval es sentarse con el Gobierno y llegar a los peque?os propietarios
Ha sido alcalde, ministro, embajador y director de la agencia dedicada al urbanismo de Naciones Unidas. Con esas credenciales llega Joan Clos (Parets del Vall¨¦s, Barcelona, 70 a?os) a la presidencia de Asval, la reci¨¦n creada Asociaci¨®n de propietarios de vivienda en alquiler. Se trata de un modelo novedoso en Espa?a que se inspira en otros pa¨ªses de Europa en los que organizaciones similares funcionan desde hace d¨¦cadas y tienen un papel en el mercado del arrendamiento. Ese, aproximarse a los est¨¢ndares continentales, es precisamente su primer objetivo. ¡°Deseamos colaborar para promover un incremento del mercado de alquiler, al menos para acercarnos al promedio europeo de entre un 33% y un 35% de inquilinos¡±, se?ala Clos en una entrevista que se desarrolla telef¨®nicamente debido a las medidas de confinamiento.
En Espa?a todav¨ªa se ven muy lejos esos porcentajes. Seg¨²n Eurostat, un 23,7% de personas viven en casas que no son de su propiedad (incluyendo a quienes sus allegados han cedido gratis una vivienda, que son sobre un 6% seg¨²n el INE). La media en la eurozona, siempre siguiendo los criterios de la oficina estad¨ªstica de la Uni¨®n Europea, es de un 33,8% de arrendatarios. ¡°Tradicionalmente hemos tenido unas pol¨ªticas que han fomentado la propiedad¡±, explica Clos, quien ve poderosas razones para que eso cambie: ¡°La econom¨ªa moderna, que se caracteriza por una mayor movilidad, necesita un mayor mercado de alquiler para desarrollar toda su capacidad¡±.
Pero no ha sido esa la ¨²nica consecuencia de los planes nacionales de vivienda. Para quien fue primer edil de Barcelona entre 1997 y 2006, y durante 19 meses ministro de Industria del Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, ¡°la ausencia de una pol¨ªtica p¨²blica consistente en vivienda asequible¡± ha dejado los arrendamientos al albur del mercado. ¡°Esto hace que los precios puedan evolucionar m¨¢s f¨¢cilmente en las zonas con una demanda creciente; en cambio, en la Espa?a vaciada van hacia abajo¡±, lamenta.
Hecho el diagn¨®stico, toca ponerse manos a la obra. ¡°La soluci¨®n es compleja: es producir vivienda asequible para los que pueden estar interesados en ella y en los sitios donde hay demanda¡±, explica Clos. ¡°No es un problema t¨¦cnico, de construir; es un problema urban¨ªstico de d¨®nde se ponen estas viviendas¡±. Y la nueva asociaci¨®n, a?ade, ve esto como un problema de primer orden porque ¡°para que funcione el alquiler, tiene que funcionar bien el alquiler asequible¡±.
Ocho a?os al frente de ONU-H¨¢bitat, el programa de Naciones Unidas que vigila los desarrollos urbanos, dan perspectiva sobre el desaf¨ªo que hay por delante. ¡°No quisiera que se saque la conclusi¨®n de que es sencillo¡±, insiste el presidente de Asval, ¡°hay ¨¦xitos y fracasos en todo el planeta tratando de resolver estos temas, pero predominan los fracasos porque hay que trabajar con mucho detalle para que vaya bien¡±. No intentarlo, eso s¨ª, aboca a una situaci¨®n mucho peor: ¡°Si no se resuelve el problema de acceso a la vivienda, entonces estamos ante un problema nacional¡±, zanja.
Evitar los guetos
¡°Los programas que funcionan suelen ser los de pa¨ªses europeos con una larga trayectoria del Estado de bienestar donde se buscan promociones de vivienda m¨¢s peque?as, menos masivas y, adem¨¢s, integradas en el entorno urbano, sin constituir guetos¡±, indica quien ha desarrollado toda su carrera pol¨ªtica en el PSC. Por eso, a la hora de garantizar el derecho a la vivienda digna, muestra una preferencia por ¡°los modelos socialdem¨®cratas europeos frente a otros que parten de tradiciones que son menos asimilables, porque nuestras sociedades no se sentir¨ªan c¨®modas con esa clase de gobernanza¡±. Se refiere a ejemplos como el de Singapur, del que elogia ¡°la mezcla de distintos niveles econ¨®micos dentro de un mismo edificio¡± porque ¡°si no se hace as¨ª, la probabilidad de fracaso es muy alta¡±.
M¨¦dico epidemi¨®logo de formaci¨®n, Clos se mantiene optimista en la actual coyuntura. ¡°Quiero creer que en unos meses el rebote de la econom¨ªa ser¨¢ importante¡±, apunta, y ve adem¨¢s ocasi¨®n ¡°para salir de esto con unas pol¨ªticas basadas en la nueva econom¨ªa¡±. Para las relacionadas con la vivienda, donde mide mucho cualquier cr¨ªtica a las autoridades en un momento en que ¡°la l¨®gica es salir del atolladero¡±, Asval se propone iniciar un di¨¢logo cuanto antes. La organizaci¨®n, tras muchos meses de preparaci¨®n, ha visto la luz en plena crisis del coronavirus.
¡°Un cambio de pol¨ªtica secular requiere de una reflexi¨®n profunda, de un consenso profundo y de una regulaci¨®n a largo plazo. Esto es lo que nos gustar¨ªa hablar con el Gobierno, que creo que coincide en nuestros dos objetivos principales: aumentar el sector del alquiler y desarrollar una pol¨ªtica de vivienda asequible¡±, indica el exministro. Est¨¢ de acuerdo con la idea de fomentar la colaboraci¨®n p¨²blico-privada para, con cesiones del uso de suelo, construir edificios dedicados al alquiler de precio limitado. Sin embargo, ve menos clara la limitaci¨®n de precios prometida por el Ejecutivo.
Con unas 20.000 viviendas en las carteras de sus socios, mayoritariamente grandes actores inmobiliarios, el objetivo de Asval es llegar ahora a los peque?os propietarios, la inmensa mayor¨ªa del mercado espa?ol. Precisamente la adhesi¨®n del fondo Blackstone, el mayor casero de Espa?a, ha provocado una mala acogida de la nueva asociaci¨®n por parte de los sindicatos de inquilinos, que la han calificado de lobby de grandes propietarios. Clos se?ala que ¡°lo deseable es que haya interlocuci¨®n¡± y pide a ambas partes ¡°trabajar para hacer posible el di¨¢logo, aunque algunas actitudes y el l¨¦xico que se utiliza lo dificulten¡±.
En la hoja de ruta del exalcalde los grandes inversores son necesarios porque ¡°es m¨¢s f¨¢cil que intervengan en operaciones que requieren mucha financiaci¨®n¡±, pero no ve una colisi¨®n de intereses con peque?os ahorradores. ¡°En un sistema estabilizado, el inversor natural en vivienda se parece m¨¢s en sus expectativas a una familia que a un fondo especulativo, porque las rentabilidades son m¨¢s bajas y casi por selecci¨®n natural las operaciones van cayendo en manos de fondos estables¡±, concluye.
Control de precios: ¡°Es perjudicial a largo plazo¡±
Desde hace meses, sobre el mercado de alquileres espa?ol planea la sombra del control de precios. El Ejecutivo de coalici¨®n, antes de la epidemia, anunci¨® que este a?o implementar¨ªa una medida que suscita un fuerte rechazo del sector inmobiliario. Joan Clos mantiene el fondo de la cr¨ªtica, aunque el tono suena m¨¢s conciliador: ¡°Funciona bien como medida de impacto a corto plazo, pero es perjudicial a medio y largo plazo¡±, se?ala. ¡°Si tienes fiebre es como tomar una aspirina: te para un primer choque, pero a largo plazo desincentiva la inversi¨®n y sube el precio¡±. ¡°Si se quiere hacer algo por la v¨ªa de la congelaci¨®n de alquileres ya hay mucha discusi¨®n sobre d¨®nde y c¨®mo hacerlo¡±, a?ade en alusi¨®n al prop¨®sito de Asval de dialogar con el Ejecutivo sin l¨ªneas rojas.
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