El Banco Mundial alerta del choque m¨²ltiple de la pandemia para los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo
Malpass advierte de que el zarpazo del coronavirus sobre los emergentes ¡°no tiene precedentes en tiempos modernos¡±
El ¨¢ngulo ciego de la crisis es cada vez m¨¢s visible. A pesar de que la crisis sanitaria del coronavirus estall¨® en el pa¨ªs emergente por antonomasia, China, el bloque de naciones de ingresos medios y bajos qued¨® relegado a un discreto segundo plano durante las primeras semanas de confinamientos: pr¨¢cticamente todos los an¨¢lisis de impacto se centraban en las econom¨ªas avanzadas y dejaban a un lado un grupo de econom¨ªas que ya suponen el 60% del PIB global. Pero eso tambi¨¦n es historia: el Banco Mundial lo pone negro sobre blanco este martes en su revisi¨®n de las constantes vitales de la econom¨ªa mundial. La semana que viene llegar¨¢n los n¨²meros con las nuevas previsiones, pero la letra es contundente: si la crisis de 2008 fue eminentemente occidental ¡ªen buena medida, gracias a los potentes planes de choque fiscales de Pek¨ªn¡ª, esta vez los grandes impactados pueden ser los pa¨ªses de renta media y baja, que parten de una situaci¨®n notablemente m¨¢s fr¨¢gil.
¡°El alcance y la velocidad en la que la pandemia de la covid-19 y los confinamientos que han asolado a los pobres de todo el mundo no tiene precedentes en tiempos modernos¡±, ha subrayado el presidente del organismo multilateral, David Malpass, en una nota contundente sobre los riesgos de la crisis para la fracci¨®n menos acaudalada del planeta. Seg¨²n sus cifras, solo este a?o 60 millones de personas podr¨ªan caer por debajo del umbral de la pobreza extrema. ¡°Y estas estimaciones podr¨ªan crecer a¨²n m¨¢s, con la reapertura de las econom¨ªas avanzadas como principal determinante¡±, avisa.
La pandemia de covid-19 ha asestado un golpe ¡°devastador¡±, seg¨²n apuntan los t¨¦cnicos del Banco en su ¨²ltimo informe de previsiones globales. ¡°Y aquellos pa¨ªses emergentes y en v¨ªas de desarrollo con sistemas sanitarios d¨¦biles, fuertemente dependientes del comercio mundial, el turismo o las remesas, as¨ª como aquellos que necesitan de las exportaciones de materias primas, ser¨¢ particularmente golpeados¡±. Las cicatrices de la recesi¨®n ocasionada por la pandemia ir¨¢n mucho m¨¢s all¨¢ del corto plazo. Ser¨¢n profundas y se transmitir¨¢n a trav¨¦s de varios canales: bajos niveles de inversi¨®n e innovaci¨®n, erosi¨®n del capital humano de los desempleados y repliegue del comercio mundial y de las cadenas trasnacionales de valor. ¡°Estos efectos bien pueden disminuir el crecimiento potencial y la productividad del factor trabajo¡±, a?aden. Dos aspectos en los que el bloque emergente dista mucho de estar bien posicionado y que son ¡°esenciales para la mejora de los niveles de vida y la reducci¨®n de la pobreza¡±.
Las condiciones financieras de los emergentes han mutado por completo con la llegada de la crisis. Si tres meses atr¨¢s las remesas flu¨ªan con casi normalidad ¡ªen muchos casos, en m¨¢ximos hist¨®ricos¡ª, regando las cuentas corrientes y mejorando la calidad de vida de las familias de los emigrados, la par¨¢lisis de los mercados laborales de los pa¨ªses ricos han frenado en seco la tendencia: sin trabajo o con uno peor remunerado es dif¨ªcil poder enviar dinero de vuelta a casa. En paralelo, y con los inversores apretando el bot¨®n del p¨¢nico, las salidas de capitales de estos mercados, por mucho los m¨¢s vol¨¢tiles, se han convertido en una constante en las ¨²ltimas semanas: cuando llegan curvas, el dinero huye de los riesgos y tiende a buscar refugio en las econom¨ªas avanzadas o en activos refugio como el oro. Esta vez no ha sido diferente.
¡°Muchos emergentes entraron en esta recesi¨®n global peor preparados y con mayores vulnerabilidades que en 2009¡±, subrayan los economistas del organismo. Dentro del grupo, muy heterog¨¦neo, el Banco Mundial dibuja cuatro subgrupos de pa¨ªses (no excluyentes entre s¨ª: un buen n¨²mero de ellos, de hecho, comparte todas las caracter¨ªsticas) como especialmente vulnerables a un choque que ser¨¢ m¨²ltiple: los que tienen sistemas de salud d¨¦biles (la gran mayor¨ªa); los que dependen en gran medida del comercio o el turismo; los expuestos a disrupciones financieras como la que est¨¢ atravesando hoy la econom¨ªa mundial; y los que necesitan de la exportaci¨®n de petr¨®leo y otras materias primas para alimentar sus arcas p¨²blicas y mantener sus econom¨ªas a flote (la gran mayor¨ªa de pa¨ªses latinoamericanos y africanos).
Una d¨¦cada larga de crecimiento ¡°decepcionante¡±
Eso, en el corto plazo. En un horizonte m¨¢s largo, la recesi¨®n ¡°prolongar¨¢ una d¨¦cada de crecimiento decepcionante en los emergentes, con un da?o especialmente severo en aquellas econom¨ªas que sufran crisis financieras y en los pa¨ªses exportadores de energ¨ªa¡±. Seg¨²n los c¨¢lculos del Banco Mundial, una recesi¨®n combinada con estallidos financieros reducir¨ªa en ocho puntos porcentuales el crecimiento potencial de la media de los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo a cinco a?os vista. Una cifra que sube hasta los 11 puntos en el caso de los pa¨ªses petroleros. ¡°La pandemia exacerbar¨¢ las debilidades de la ¨²ltima d¨¦cada¡±, sentencian.
Para aminorar los da?os y evitar que se vuelvan persistentes en el futuro, la vicepresidenta el Banco Mundial Ceyla Pazarbasioglu ha pedido este martes a estos pa¨ªses m¨¢s ¡°medidas de emergencia¡± frente al golpe y que permitan ¡°reconstruir la econom¨ªa¡± sobre la base de un crecimiento ¡°m¨¢s resistente¡±. Pero la capacidad de respuesta tambi¨¦n se ve mermada: la efectividad de la pol¨ªtica econ¨®mica (tanto fiscal como monetaria), recuerdan los economistas del organismo, es menor que en las econom¨ªas avanzadas. ¡°Puede no llegar a los grupos vulnerables, algo especialmente preocupante en las econom¨ªas en las que la informalidad est¨¢ ampliamente extendida. Amplias capas de la poblaci¨®n no tienen siquiera cuentas bancarias en las que depositar transferencias directas y est¨¢n fuera de los sistemas de seguridad social¡±. La correa de transmisi¨®n falla.
Los petroleros, ante el peor escenario posible
Las consecuencias son particularmente graves para los emergentes que dependen de las exportaciones de petr¨®leo, para los que el Banco Mundial pide sin ambages planes de reestructuraci¨®n de deuda a medio plazo. La evidencia hist¨®rica no augura buenos tiempos para este grupo de naciones, despu¨¦s de que el precio del petr¨®leo sufriese en marzo el peor mes de su historia: en los seis hundimientos comparables (aunque menores) del crudo, su PIB cay¨® en aproximadamente medio punto porcentual y el efecto tard¨® unos tres a?os en diluirse. Ah¨ª, la Am¨¦rica Latina dependiente del crudo ¡ªy, m¨¢s en general, de las materias primas¡ª tiene las de perder.
¡°Incluso si los precios del petr¨®leo repuntasen a medida que la demanda mundial se recupera, el reciente desplome es un recordatorio de la urgencia de los pa¨ªses exportadoras de poner en marcha reformas que diversifiquen sus econom¨ªas¡±, remarca Ayhan Kose, jefe del grupo de perspectivas del Banco Mundial. Los exportadores llegaron a esta crisis con una posici¨®n fiscal y de tipo de cambio m¨¢s d¨¦biles: ya tuvieron que utilizarlas para capear el desplome previo, de 2014 a 2016.
A escala global, en cambio ¡ªy siempre y cuando no se produzca un efecto domin¨® en las empresas y bancos m¨¢s expuestos al sector petrolero¡ª este dr¨¢stico abaratamiento puede ayudar a la recuperaci¨®n econ¨®mica. Aunque en menor medida que en anteriores ocasiones: ¡°este episodio de bajos precios del crudo promete menos en t¨¦rminos de impulso del crecimiento¡±, reconocen los t¨¦cnicos del Banco Mundial. ¡°En el mejor de los casos, los precios bajos dar¨¢n un apoyo inicial al crecimiento una vez que las restricciones sobre la actividad econ¨®mica hayan sido levantadas y hasta que se consuma el exceso de inventarios¡±. Un efecto, a lo sumo, solo moderadamente positivo para la econom¨ªa mundial en su conjunto y ¡ªaqu¨ª s¨ª, no hay dudas¡ª muy negativo para los exportadores de crudo.
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