El retraso de los Presupuestos dificulta cumplir con el ajuste que pide Bruselas
El Gobierno no tendr¨¢ las cuentas aprobadas hasta el verano, lo que implica que las nuevas subidas de impuestos no tendr¨¢n el tiempo suficiente para recaudar lo que se esperaba
El tiempo apremia. Aunque el Gobierno ya ha puesto en marcha la maquinaria para elaborar los Presupuestos, el calendario le restar¨¢ efectividad. En el proceso habitual se aprueban en septiembre del a?o anterior. Este a?o, en la mejor de las hip¨®tesis, las cuentas estar¨¢n listas para el verano y las nuevas subidas de impuestos que contengan se quedar¨¢n sin el tiempo suficiente para recaudar lo que se esperaba. Adem¨¢s, en plena ralentizaci¨®n econ¨®mica la evoluci¨®n natural de los ingresos perder¨¢ fuerza. Y todo ello har¨¢ que este a?o vuelva a ser muy dif¨ªcil cumplir con la meta de d¨¦ficit ofrecida a Bruselas, del 1,8% del PIB. No obstante, el Gobierno podr¨¢ alegar ante la Comisi¨®n que ha puesto en marcha las subidas de impuestos, aunque no logre ingresarlas en el a?o. M¨¢xime cuando Bruselas ya ha mostrado indulgencia con Francia e Italia.
Espa?a ya ha conseguido salir de la tutela directa de Europa, que aplica a los pa¨ªses cuyo d¨¦ficit p¨²blico supera el 3% del PIB. Una vez fuera, Bruselas pide un esfuerzo de ajuste estructural, aquel considerado permanente y que no tiene en cuenta los ingresos que vienen por la mejora del ciclo. Para 2019 y 2020, el Consejo de l¨ªderes europeos acord¨® que Espa?a ten¨ªa que ajustarse un 0,65% del PIB por a?o. Si bien se permite incumplir hasta 0,5 entre los dos ejercicios. A la luz de los ¨²ltimos datos, no parece que el d¨¦ficit de 2019 vaya a bajar mucho. Es decir, el a?o pasado Espa?a pr¨¢cticamente se comi¨® todo el margen que daba Bruselas. Por lo que este ejercicio ha de ajustar s¨ª o s¨ª el 0,65%, unos 8.000 millones de euros.
El problema reside en c¨®mo se mide ese ajuste estructural, calculado con f¨®rmulas muy complejas. Gobierno y analistas creen que este a?o la econom¨ªa crecer¨¢ en torno al 1,6%. Y esa tasa se est¨¢ acercando al llamado crecimiento potencial: ya no se est¨¢ en la fase alcista del ciclo, que aporta sustanciales ingresos extra, y por lo tanto todo lo que baje el d¨¦ficit contar¨¢, en principio, como ajuste estructural.
El desfase de las cuentas p¨²blicas
Gastos
600 miles de millones de euros
501.497
500
400
356.857
300
2005
2007
2009
2011
2013
2015
2017
18
prev.
Ingresos
500 miles de millones de euros
471.002
400
368.278
300
2005
2007
2009
2011
2013
2015
2017
18
prev.
D¨¦ficit
4% del PIB
1,9
2
1,2
0
-2
-4
¨C2,5
-6
¨C5,1
-8
¨C6,7
-10
¨C9,4
-12
¨C11,3
2005
2007
2009
2011
2013
2015
2017
18
prev.
Fuente: IGAE.
EL PA?S
El desfase de las cuentas p¨²blicas
Gastos
600 miles de millones de euros
501.497
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2005
2007
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Ingresos
500 miles de millones de euros
471.002
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D¨¦ficit
4% del PIB
1,9
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¨C6,7
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¨C9,4
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2005
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Fuente: IGAE.
EL PA?S
El desfase de las cuentas p¨²blicas
Gastos
600 miles de millones de euros
501.497
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Ingresos
500 miles de millones de euros
471.002
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2007
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2015
2016
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D¨¦ficit
4% del PIB
2,1
1,9
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¨C2,5
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¨C4,1
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¨C4,6
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Fuente: IGAE.
EL PA?S
Ahora bien, ?cu¨¢nto puede bajar el d¨¦ficit? Por el lado del gasto, los Presupuestos son solo orientativos, explican fuentes de la Administraci¨®n. Luego hay que gastarlos. El anterior ministro Crist¨®bal Montoro sol¨ªa ir cerrando el grifo conforme ve¨ªa una desviaci¨®n. Y el actual Ministerio de Hacienda ya empez¨® a hacerlo a finales de 2019. Para disciplinar a las Administraciones, Hacienda dispone de una herramienta: la llamada regla de gasto, recogida en la Ley de Estabilidad Presupuestaria. Se trata de un l¨ªmite a los incrementos de gasto calculado para que los desembolsos no suban m¨¢s de lo que lo har¨¢ a medio plazo la econom¨ªa y, por ende, los ingresos. Hacienda puede esgrimirlo para exigir a los departamentos que contengan el gasto.
Aun as¨ª, m¨¢s de un tercio de las partidas se quedan fuera de esta regla de gasto. No est¨¢n limitadas ni las pensiones, ni el desempleo, ni los intereses de la deuda. Y solo las pensiones, la principal r¨²brica de todas, engordan al 7% anual. Adem¨¢s, Hacienda no ha logrado por ahora que se cumpla con la regla: el gasto computable escala al 4,8% en la Administraci¨®n central y al 5,8% en las comunidades.
Otro inconveniente es que para 2020 se ha elevado mucho el tope de la regla de gasto. Esta se calcula seg¨²n crecimientos pasados. Y estos han subido mucho, dej¨¢ndola en un techo del 2,8%. ¡°Significa que los Ayuntamientos podr¨ªan gastar m¨¢s del super¨¢vit que tienen y que est¨¢ sirviendo para compensar parte del d¨¦ficit de la Seguridad Social¡±, se?ala una fuente de la Intervenci¨®n.
En cualquier caso, si Hacienda consiguiera imponer esta restricci¨®n podr¨ªa dejar el total de los desembolsos creciendo en un entorno algo superior al 3%. Y as¨ª no tendr¨ªa suficiente para cumplir con la meta de d¨¦ficit. La contenci¨®n del gasto no bastar¨ªa.
Por el lado de los ingresos, lo normal es que suban igual que la econom¨ªa sumando la inflaci¨®n. El Gobierno prev¨¦ que el PIB crezca un 1,6% y los precios, un 1,9%. Parece discutible que la inflaci¨®n vaya a repuntar tanto, apunta Mar¨ªa Jes¨²s Fern¨¢ndez, analista de Funcas. Pero concediendo al Gobierno que eso se cumpla, los gastos y los ingresos crecer¨ªan en proporciones similares y el d¨¦ficit en consecuencia se mantendr¨ªa m¨¢s o menos igual. De modo que no se reducir¨¢ el desfase solo con el crecimiento natural de la recaudaci¨®n.
Solo que el Gobierno tambi¨¦n tiene previsto subidas de impuestos por valor de 5.700 millones, unas medidas que ya present¨® en los Presupuestos de 2019 que no se aprobaron. Y que solo quedar¨ªan algo por debajo del ajuste que pide Bruselas. Entre ellas se incluye la tasa Google, el impuesto a las transacciones financieras, un tipo m¨ªnimo para las grandes empresas, un repunte del gravamen al di¨¦sel, alzas en el IRPF de las rentas altas y subidas fiscales para los grandes patrimonios.
Seg¨²n explican fuentes gubernamentales, este ajuste significa que las cuentas p¨²blicas se ce?ir¨¢n al art¨ªculo 135.2 de la Constituci¨®n, que ha entrado en vigor este a?o y obliga a seguir el mandato presupuestario de Bruselas.
Sin embargo, la Autoridad Fiscal, entonces dirigida por el actual ministro de la Seguridad Social, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, ya dijo en enero de 2019 que estimaba por esas medidas una recaudaci¨®n menor: de 4.200 millones. Y a?adi¨® que adem¨¢s no habr¨ªa tiempo para implementarlas. Seg¨²n esos c¨¢lculos, debido a los retrasos solo se podr¨ªa recaudar la mitad de lo proyectado. Y esa cifra se daba con la econom¨ªa creciendo m¨¢s y sin el empleo desaceler¨¢ndose con la intensidad de ahora.
Plazos legales
Un a?o m¨¢s tarde, la situaci¨®n se repite y no volver¨¢ a dar tiempo. ¡°En 2020 no se puede esperar mucho por los plazos legales, que har¨¢n que las subidas de ingresos tarden en aplicarse¡±, afirma Francisco Vidal, economista jefe de Intermoney. El Gobierno est¨¢ analizando aprobar este martes los proyectos de ley de los nuevos impuestos, la tasa Google y la financiera. Hacen falta al menos tres meses de tr¨¢mite en las C¨¢maras, y la primera vez que los propusieron ya se estableci¨® un periodo adicional de tres meses de entrada en vigor, en parte porque se necesita orquestar toda la infraestructura necesaria para cobrarlos. Tardar¨ªan al menos seis meses, sin tener en cuenta el conflicto que pudiera generar la tasa Google con la Administraci¨®n Trump.
Las subidas de Sociedades e IRPF se aprobar¨¢n con los Presupuestos. En Sociedades se recaudar¨¢ lo mismo al liquidarse m¨¢s tarde. Pero en la del IRPF se perder¨ªa la mitad del a?o. En definitiva, al menos habr¨ªa que redoblar la subida de impuestos planeada para conseguir el mismo impacto en el a?o. ¡°Subir el gasto es f¨¢cil, subir ingresos si no es por la v¨ªa del crecimiento es mucho m¨¢s complicado¡±, comenta Luis Garv¨ªa, profesor de Finanzas de ICADE.
La ventaja con la que cuenta Espa?a es que, en plena desaceleraci¨®n de la econom¨ªa, Bruselas est¨¢ siendo m¨¢s flexible con los pa¨ªses incumplidores. As¨ª ha sucedido con las cuentas de Francia, Italia o B¨¦lgica. En todo caso, Espa?a siempre podr¨¢ alegar que al menos puso en marcha las medidas, aunque no las recaude en el a?o. Y como ha ocurrido con otros pa¨ªses, la Comisi¨®n Europea se conformar¨¢ con se?alar que hay un riesgo significativo de desviaci¨®n, pero no impondr¨¢ nuevos ajustes.
Hacienda busca ahorros
Los Presupuestos de Montoro est¨¢n en vigor desde 2018. El Gobierno podr¨ªa forzar la m¨¢quina impulsando subidas de impuestos por decreto en lugar de en Presupuestos. Pero eso no valdr¨ªa para la tasa Google y Tobin, que necesitan normas propias por ser figuras de nueva creaci¨®n. Y aunque su redacci¨®n ya est¨¦ lista, los tiempos de la liturgia legislativa retrasar¨¢n unos meses su aplicaci¨®n. Estos dos impuestos, que seg¨²n el Gobierno recaudar¨ªan 2.000 millones, solo aportar¨¢n ingresos desde el momento que entren en vigor, al igual que el alza del di¨¦sel. Se trata de impuestos indirectos que no pueden ser retroactivos porque se cobra operaci¨®n por operaci¨®n y no pueden remontarse atr¨¢s, explican expertos fiscalistas.
En Sociedades, s¨ª que puede afectar a toda la renta del ejercicio aunque se apruebe a mediados de a?o. Hacerlo retroactivo en el IRPF parece dif¨ªcil por la litigiosidad que despertar¨ªa. Y Patrimonio est¨¢ cedido a las comunidades, que pueden aplicar y aplican generosas bonificaciones.
Toda esta menor recaudaci¨®n puede paliarse por el lado del gasto: si los Presupuestos se aprueban m¨¢s tarde, tambi¨¦n hay nuevos desembolsos que se aplazan. Pero el encaje de bolillos sigue complicado. Por eso Hacienda busca alivio en las revisiones del gasto que hace la Autoridad Fiscal. Incorporar¨¢ sus recomendaciones de ahorro sobre gasto farmac¨¦utico no hospitalario, incentivos a la contrataci¨®n y subvenciones. Adem¨¢s, intentar¨¢ meter en los Presupuestos el estudio que est¨¢ elaborando la Autoridad Fiscal sobre los beneficios fiscales. Sin embargo, esta tiene como plazo septiembre e incluir¨¢ un men¨² de opciones cuyos ahorros no son tan populares y, por tanto, de dif¨ªcil aplicaci¨®n. Por ejemplo, brindar¨ªa mucho dinero suprimir los IVA reducidos o la reducci¨®n por tributaci¨®n conjunta en el IRPF.
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