¡®Filomena¡¯ aviva el debate sobre la eficiencia energ¨¦tica de los edificios

Filomena ha dejado un debate abierto tras su paso por Espa?a por la alta contaminaci¨®n que ha provocado en Madrid la ola de fr¨ªo y la falta de precipitaciones y de viento tras la Gran Nevada. El fen¨®meno de inversi¨®n t¨¦rmica, que se produce cuando las temperaturas a nivel de suelo son inferiores a las de las capas m¨¢s altas de la atm¨®sfera impidiendo que haya corrientes ascendentes de aire que dispersen los contaminantes, ha originado la acumulaci¨®n de di¨®xido de nitr¨®geno (NO2) y ese smog fotoqu¨ªmico conocido como boina. Como consecuencia de ello, el ayuntamiento de Madrid ha reducido la velocidad m¨¢xima de circulaci¨®n motorizada a 70 kil¨®metros por hora (kmh); pero el protocolo no ha contemplado medidas sobre la climatizaci¨®n residencial y comercial, que en esta ocasi¨®n parece ser la principal causante de esa boina. Y si las ha contemplado, posiblemente las ha dejado para otra ocasi¨®n con menos fr¨ªo.

Ante esta situaci¨®n, conviene detenerse en los datos que apuntan que la movilidad ha contribuido en mucha menor medida a las emisiones debido a que la nevada limit¨® mucho los movimientos (a 16 de enero la densidad de tr¨¢fico en la M-30 era en torno al 50% de la habitual y el aeropuerto ha estado cerrado o a medio gas) y que el foco emisor de contaminaci¨®n ha sido fundamentalmente el uso de las calderas de calefacci¨®n y agua caliente, que debido a las bajas temperaturas registradas entre los d¨ªas 8 y 17 de enero, incrementaron el calor producido en una horquilla del 40%-80% respecto a las condiciones habituales.

Por tanto, parece que, igual que se hace con el transporte, habr¨ªa que hacer el mismo hincapi¨¦ sobre los contaminantes de residencias, comercios e industrias, como piden desde los lobbies energ¨¦ticos. Aunque en los ¨²ltimos a?os las pol¨ªticas de energ¨ªa y cambio clim¨¢tico, tanto a nivel europeo como espa?ol, han apoyado la eficiencia energ¨¦tica en edificios, se puede ver c¨®mo la contribuci¨®n de este sector en el total de emisiones de NOx (¨®xido n¨ªtrico y di¨®xido de carbono) en Madrid casi se ha duplicado en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas. Sorprende, en ese sentido, que siga habiendo alrededor de 200 calderas de carb¨®n y m¨¢s de 2.000 de gas¨®leo solo en Madrid. La estimaci¨®n es que en el mercado espa?ol hay aproximadamente nueve millones de viviendas pendientes de instalar calderas de condensaci¨®n de gas de alta eficiencia, que consiguen reducir las emisiones de NOx en un 65%-78% frente a las tradicionales.

Ante eso, parece fundamental incentivar econ¨®micamente la renovaci¨®n de estos equipos, que suponen importantes ahorros para el usuario (hasta un 25% del consumo de energ¨ªa), pero requieren de una importante inversi¨®n inicial. El Plan de Recuperaci¨®n europeo abre la oportunidad para canalizar las ayudas que vengan de Europa y la colaboraci¨®n p¨²blico-privada en esa direcci¨®n sin olvidar la renovaci¨®n del parque automovil¨ªstico. Cabe subrayar que el destino de las ayudas debe calibrar si se dirigen a tecnolog¨ªas a¨²n inmaduras, en este u otros sectores, que hacen que el gasto de dinero p¨²blico sea ineficiente y acabe por ser desviado hacia segmentos de poblaci¨®n con rentas altas, como ocurre por ejemplo con el veh¨ªculo el¨¦ctrico, cuyo coste es bastante privativo en la actualidad.

Por su parte, la renovaci¨®n del parque automovil¨ªstico, fundamental para la reducci¨®n de las emisiones, es otra cuesti¨®n pendiente que, adem¨¢s, es clave para apoyar la recuperaci¨®n econ¨®mica e industrial por la crisis de la covid. Al respecto, el sector del transporte ha hecho un gran esfuerzo por reducir las emisiones con fuertes inversiones en I+D y por mejorar los sistemas de tratamiento de los gases de escape en los motores di¨¦sel, que desde 2019 han resuelto tecnol¨®gicamente el problema de la contaminaci¨®n, y los de gasolina, que independientemente de su antig¨¹edad (veh¨ªculos con hasta 20 a?os), lo tienen resuelto con el catalizador trivalente, com¨²n para todos los motores de gasolina, GLP, gas natural y etanol.

Esa evoluci¨®n positiva se confirma en los datos que ofreci¨® el ayuntamiento de Madrid, seg¨²n los que el transporte por carretera ha pasado de ser el principal emisor en 1999, con un 70% de contribuci¨®n, a caer por debajo del 50% en 2017 mientras el resto de sectores la han incrementado. Esta evoluci¨®n da ¨ªmpetu para reclamar que no se eleve la carga impositiva sobre los combustibles como plantea el Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema El¨¦ctrico (FNSSE). A su juicio, eso supone poner trabas a las ¨²nicas tecnolog¨ªas no contaminantes actualmente disponibles a coste competitivo. Por pedir que no quede.