¡°Es muy triste ver el edificio vac¨ªo, todo en silencio¡±
La falta de viajeros deja cientos de habitaciones desiertas y decenas de empleos vinculados con la actividad hotelera en el alambre
La baja actividad tur¨ªstica pone a los hoteles en un brete. Eso deja establecimientos con cientos de habitaciones vac¨ªas. Y miles de empleos que penden de un hilo. Porque el cierre de estos alojamientos deja mucho m¨¢s que un edificio desierto: hay detr¨¢s toda una cadena de valor afectada, desde el recepcionista que atiende a los viajeros a la llegada al hotel hasta empresas externas que dependen de esta actividad. EL PA?S realiza un repaso de los empleos afectados por un desastre que todav¨ªa no ha acabado:
Recepci¨®n
Sasha von Gonstomski, de 45 a?os, oriundo de M¨²nich, reside en Gran Canaria desde los cuatro a?os. Hasta que entr¨® en el ERTE, llevaba ocho a?os como recepcionista en el hotel Gloria Palace. ¡°La situaci¨®n es muy dif¨ªcil¡±, explica en su casa, en el municipio de San Bartolom¨¦ de Tirajana (Gran Canaria). ¡°Lo noto econ¨®micamente: cobro mucho menos y no me entran propinas¡±.
Tras estudiar hosteler¨ªa, comenz¨® su carrera en diversos establecimientos de las islas. ¡°Todo volver¨¢ a su cauce tarde o temprano, pero no puedo evitar estar preocupado¡±, confiesa. El golpe le llega adem¨¢s por una doble v¨ªa: ¡°Tengo un apartamento que suelo alquilar por Airbnb y lleva tiempo vac¨ªo¡±.
Limpieza
Cuando Miriam Su¨¢rez lleg¨® de Ecuador, en 1999, encontr¨® trabajo de camarera de piso en hoteles. Ten¨ªa que limpiar y preparar 11 habitaciones en ocho horas. M¨¢s de 20 a?os m¨¢s tarde, la ratio es de 30 habitaciones en esas mismas ocho horas. Si las condiciones ya eran duras, ahora, con la pandemia, todav¨ªa lo son m¨¢s. Trabajaba en un hotel peque?o del centro de Barcelona desde hac¨ªa dos a?os, a media jornada, por 740 euros al mes. Por la pandemia, est¨¢ en ERTE, que solo cubre el 70% de su salario. Es decir, tiene 518 euros mensuales para vivir.
¡°Dime c¨®mo puedo aguantar. Encima, por los problemas del SEPE, los dos primeros meses no cobr¨¦¡±, se queja. Pese a todo, se considera afortunada, ya que muchas de sus compa?eras fueron al paro.
Camareros
Jes¨²s Lodeiro nunca hab¨ªa estado tanto tiempo parado. Llevaba 41 a?os trabajando como camarero en el restaurante de un establecimiento de lujo, el hotel Sof¨ªa de Barcelona (antes llamado Princesa Sof¨ªa). La direcci¨®n ya ha estudiado reabrir, pero lo ha desestimado. ¡°Hace casi un a?o que estamos en el paro. Los compa?eros est¨¢n sufriendo mucho porque no vemos la luz al final del t¨²nel¡±, lamenta.
Lodeiro trabaja como camarero en banquetes, as¨ª que prev¨¦ que ser¨¢ de los ¨²ltimos en recuperar el empleo. ¡°Hay compa?eros que han buscado otros trabajos porque no llegan a final de mes. La situaci¨®n es para tirar la toalla¡±, sentencia.
Mantenimiento
Entre los empleados de mantenimiento, el coronavirus ha incrementado sus trabajos, seg¨²n explica Manuel Vega, jefe de estas labores en el hotel Wellington, en Madrid. ¡°Hemos tenido mucha m¨¢s tarea para mantener el edificio en condiciones. Un edificio parado y sin funcionamiento envejece muy r¨¢pido¡±, explica.
Adem¨¢s, cuenta que el hotel ha aprovechado el par¨®n para realizar obras y reparaciones que en circunstancias normales no se pod¨ªan hacer, como el cambio de la cocina. Estos quehaceres le han ayudado a llevar mejor la crisis: ¡°Me ha servido para evitar pensar en la situaci¨®n. Impacta mucho ver el hotel vac¨ªo, todo en silencio... Es muy triste. Sobre todo al inicio, ahora ya se va viendo algo m¨¢s de vida y alegr¨ªa¡±, relata Vega. De cara al futuro, cree que quedan meses dif¨ªciles, aunque conf¨ªa en la recuperaci¨®n.
Jardiner¨ªa
Francisco Lloret (47 a?os) ha desarrollado su carrera en agencias de viaje. Y hace un a?o y medio comenz¨® a trabajar en una empresa de paisajismo, jardiner¨ªa y mantenimiento de jardines como encargado de proyectos. ¡°Pero entonces lleg¨® la pandemia y todo se detuvo¡±, explica.
Estuvo en ERTE hasta agosto: ¡°En verano, la compa?¨ªa constat¨® que el cierre de hoteles baj¨® mucho la demanda de servicios, lo que me ha llevado a trabajar como un jardinero m¨¢s: plantando, regando, podando¡ Lo que sea¡±. Las perspectivas laborales no son buenas, al menos a corto plazo. Una vez finalizados los seis meses tras el ERTE, y con la finalizaci¨®n de su contrato, teme que termine pasando a engrosar las filas del paro.
Lavander¨ªa
El negocio de Bernardino Salom ha ca¨ªdo un 70% por el hundimiento del turismo. El propietario de las lavander¨ªas-tintorer¨ªas La Real, en Palma, trabaja con la ropa de la clientela de los hoteles y el menaje de los apartamentos tur¨ªsticos. La ca¨ªda al vac¨ªo del sector ha provocado un efecto domin¨® que ha llegado a negocios como el suyo, que tiene a cinco empleados trabajando y a seis en ERTE del que no les podr¨¢ sacar a corto plazo. ¡°Los ¨¢nimos est¨¢n por los suelos¡±, admite, aunque espera cierta reactivaci¨®n tras la Semana Santa.
Las lavander¨ªas industriales, que se dedicaban ¨²nicamente a trabajar con hoteles, han pasado de limpiar hasta 35.000 kilos de ropa al d¨ªa a apenas una tercera parte. Salom, propietario de esta lavander¨ªa desde hace 27 a?os, conf¨ªa en no tener que cerrar, aunque s¨ª reconoce su preocupaci¨®n por lo que le deparar¨¢ el futuro.
Proveedores
El castillo de naipes tur¨ªstico se ha desmoronado y como no pod¨ªa ser de otra forma ha llegado a las empresas externas que dependen de la actividad hotelera. Entre ellas, proveedoras de productos de alimentaci¨®n como Antonio de Miguel. La firma, que trabaja con grupos como NH, Paradores, Meli¨¢ y Palladium, entre otros, ha reducido su cifra de negocio a la mitad en 2020. ¡°Nuestros clientes son hoteles, restaurantes y catering, todos muy afectados. Solo de los hoteles depende un 30% de nuestra facturaci¨®n, que es la que m¨¢s ha bajado¡±, relata Antonio de Miguel, director general de la empresa.
En su caso, la crisis le ha llegado en buena situaci¨®n financiera, aunque acab¨® 2020 en p¨¦rdidas. ¡°Estos primeros cuatro meses ser¨¢n de nuevo malos y esperamos que a partir de mayo vuelva una cierta normalidad¡±, conf¨ªa. Del centenar de trabajadores de la firma, el 16% sigue en ERTE, aunque el compromiso es claro: ¡°No queremos despedir a nadie. Esta es la peor crisis que hemos tenido, pero vamos a salir adelante. La luz al final del t¨²nel est¨¢ cerca¡±.
Direcci¨®n
Antoni Mayol es el director de Morlans Hotels, que cuenta con tres peque?os establecimientos en la zona de Paguera (Mallorca). Sus establecimientos est¨¢n cerrados desde octubre, con sus 60 trabajadores en ERTE. Preve¨ªan abrir el 1 de febrero, aunque ya lo han atrasado hasta el 1 de abril: ¡°Por no irnos ya al 1 de junio. El contexto es mucho peor de lo que preve¨ªamos¡±, reconoce.
Mayol, que se crio con sus hermanos en el hotel, est¨¢ preocupado por la situaci¨®n financiera que arrastra la firma. Tanto que se plantea incluso medidas m¨¢s dr¨¢sticas como vender los establecimientos si no cambian las cosas: ¡°La situaci¨®n es dram¨¢tica¡±, zanja.