Am¨¦rica Latina necesita digitalizar sus infraestructuras para detener el rezago econ¨®mico, seg¨²n la CAF

Desde el sistema de pagos para usar el transporte urbano hasta la amenaza de ciberseguridad, los Gobiernos de los pa¨ªses latinoamericanos deber¨¢n invertir en la digitalizaci¨®n si desean mejorar sus ingresos, apunta un nuevo estudio del Banco de Desarrollo de Am¨¦rica Latina, conocido como la Corporaci¨®n Andina de Fomento (CAF), publicado el jueves. El rezago tecnol¨®gico se traduce actualmente en menor calidad en el servicio de la electricidad, mayor inseguridad al tomar el transporte p¨²blico y menores ingresos para las familias, asegura el informe.

En los ¨²ltimos a?os, apunta el reporte, han convergido tres tendencias en el sector de la energ¨ªa el¨¦ctrica: digitalizaci¨®n, electrificaci¨®n y descentralizaci¨®n. La electrificaci¨®n del transporte, tanto p¨²blico como privado, puede ser clave para alcanzar objetivos clim¨¢ticos contenidos en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, mientras que la generaci¨®n a peque?a escala de energ¨ªas renovables a cargo de empresas independientes han ido adquiriendo mayor importancia a medida que cae su costo. Esto ha implicado una descentralizaci¨®n del servicio el¨¦ctrico. ¡°Estas actividades permitir¨¢n un rol m¨¢s activo del sector de la energ¨ªa renovable, innovando en generaci¨®n y almacenamiento distribuido, y en respuesta de la demanda¡±, asegura la CAF.

Sin embargo, en Am¨¦rica Latina y el Caribe los problemas se concentran principalmente en la calidad del suministro el¨¦ctrico, con ¨ªndices de interrupciones que, tanto en frecuencia como en duraci¨®n, triplican los de Europa y duplican los de Estados Unidos. Cabe aclarar que la calidad no es igual en todos los pa¨ªses de la regi¨®n. M¨¦xico, por ejemplo, es el pa¨ªs con mejor desempe?o, con menos de una interrupci¨®n al a?o y una duraci¨®n inferior a media hora mientras que Argentina es el de peor desempe?o, con una interrupci¨®n cada 1,6 meses y una duraci¨®n promedio de m¨¢s de 25 horas.

¡°Entre los principales cuellos de botella destacan la adaptaci¨®n de las regulaciones a los nuevos formatos y usos tecnol¨®gicos, como la gesti¨®n de los datos o la convergencia entre sectores¡±, informa la CAF. ¡°Las nuevas tecnolog¨ªas establecen nuevos roles o actividades para agentes ya existentes en el mercado o plantean una redistribuci¨®n de las actividades. En energ¨ªa el¨¦ctrica, por ejemplo, los beneficios de la red el¨¦ctrica inteligente ser¨ªan mejor aprovechados con una separaci¨®n de la distribuci¨®n y la comercializaci¨®n. En transporte urbano, el otro sector priorizado en el informe, la digitalizaci¨®n puede generar cambios en la forma movilizar las personas, de cobrar y pagar por los viajes, as¨ª como la integraci¨®n tarifaria entre sistemas y medios de transporte¡±, asegura.

La pandemia de la covid-19 oblig¨® a empresas y negocios a incorporarse a la nueva econom¨ªa digital, lo cual debiera ocupar a los Gobiernos a adoptar una red el¨¦ctrica inteligente, la cual superpone la red f¨ªsica de electricidad con un sistema de informaci¨®n que enlaza los equipos y los componentes tradicionales con infraestructura de medici¨®n avanzada. ¡°Esto permite mejorar la confiabilidad, seguridad y eficiencia (tanto econ¨®mica como energ¨¦tica) del sistema el¨¦ctrico¡±, dice el reporte. ¡°Tambi¨¦n facilita el manejo de los activos de la red, la integraci¨®n del sistema con fuentes de energ¨ªas renovables y el desarrollo de la comunicaci¨®n en tiempo real entre los consumidores y las empresas¡±.

Pero desplegar una red el¨¦ctrica inteligente requiere grandes inversiones, una base legal y regulatoria que ofrezca incentivos, unificaci¨®n de est¨¢ndares t¨¦cnicos y la adopci¨®n de protocolos de ciberseguridad. La transici¨®n se enfrenta a cuatro obst¨¢culos espec¨ªficos, de acuerdo con el informe: la electricidad todav¨ªa se considera una mercanc¨ªa; los paradigmas regulatorios actuales no fomentan los recursos distribuidos, la incertidumbre alrededor de las reglas y la resistencia cultural al cambio.

¡°Una tarea clave del Estado en los sectores de infraestructura es la de supervisar que los entes reguladores presten la debida atenci¨®n a la seguridad de la informaci¨®n individual y a los problemas de ciberseguridad y de resiliencia de los sistemas el¨¦ctrico y de transporte frente a ataques u otras eventualidades¡±, urge la CAF.

En cuanto al transporte refiere, el Banco identifica los elementos que abren una brecha de servicio. Bogot¨¢ y La Paz, por ejemplo, los usuarios deben caminar por m¨¢s de 10 minutos para llegar a una parada de autob¨²s, exponi¨¦ndose a situaciones de inseguridad -- en especial, las mujeres. Y, en casi todas las ciudades analizadas en el estudio, el servicio informal de transporte ¡°provee una capilaridad que el sistema formal no alcanza a dar, aunque, en ocasiones, es m¨¢s costoso e inseguro que el servicio formal¡±.