Silence puja por los terrenos de Nissan con un proyecto para 65.000 veh¨ªculos

Silence apuesta su futuro a la planta que actualmente ocupa Nissan en Montcada i Reixac (Barcelona). El proyecto que ha presentado ante la mesa de reindustrializaci¨®n que debe decidir el futuro de las tres factor¨ªas del fabricante japon¨¦s de autom¨®viles que cerrar¨¢n el pr¨®ximo mes de diciembre comprende la producci¨®n en un turno de hasta 25.000 motocicletas y 40.000 unidades del cuatriciclo que prev¨¦ presentar este jueves. A esas dos l¨ªneas de ensamblaje se sumar¨ªa una capacidad para ensamblar 120.000 bater¨ªas, seg¨²n explican fuentes conocedoras del proyecto presentado por el fabricante, cuyo planteamiento supone una inversi¨®n de unos 30 millones de euros.

El objetivo es concentrar en Montcada la producci¨®n existente hoy en d¨ªa en sus instalaciones de Sant Boi de Llobregat para ganar capacidad, ante las expectativas de que el mercado de veh¨ªculos el¨¦ctricos se dispare los pr¨®ximos a?os. Junto a esas l¨ªneas de ensamblaje se plantea crear un espacio para reciclaje de bater¨ªas e intentar darle una segunda vida a estas e incluso la posibilidad de que tengan un espacio propio marcas para las que trabaje el fabricante, que actualmente produce las motocicletas el¨¦ctricas que comercializa Seat y que podr¨ªa seguir la misma f¨®rmula con el cuatriciclo. La compa?¨ªa evita hablar del proyecto con el que puja por los terrenos de Nissan.

Nacida hace apenas nueve a?os, la sociedad, controlada accionarialmente por Acciona y dirigida por Carlos Sotelo, ve como una oportunidad ¨²nica la liberaci¨®n de los terrenos de Nissan. Por un lado ve unos terrenos industriales que tendr¨¢n acompa?amiento en forma de ayudas por parte de las administraciones. Y por el otro detectan que el Proyecto Estrat¨¦gico para la Recuperaci¨®n y Transformaci¨®n Econ¨®mica (PERTE) que el Ministerio de Industria prepara para lanzar la industria del veh¨ªculo el¨¦ctrico en Espa?a son otra oportunidad para conseguir recursos adicionales procedentes de la Uni¨®n Europea.

Actualmente la planta de Sant Boi (donde trabajan 160 personas) es el mayor centro de producci¨®n de motos de toda Espa?a y Silence se ha consolidado como l¨ªder europeo del sector de las dos ruedas el¨¦ctricas tras liderar esa clasificaci¨®n durante tres a?os seguidos. El a?o pasado cerr¨® el ejercicio con un 40% del mercado europeo. Vendi¨® 9.000 motocicletas, caracterizadas por su bater¨ªa extra¨ªble que se puede trasladar como una maleta con ruedas, y factur¨® 38 millones de euros despu¨¦s de tener cerradas sus instalaciones dos meses por la pandemia. Este a?o preve¨ªa ensamblar 12.000 unidades, pero la afectaci¨®n que ha tenido la falta de semiconductores provocar¨¢ que al final la producci¨®n cierre en torno a 10.500 motos. Para el pr¨®ximo a?o se prev¨¦ un significativo crecimiento y alcanzar las 15.000.

El gran muro para Silence

Pese a sus expectativas, el fabricante catal¨¢n est¨¢ en la misma situaci¨®n que el sector de la automoci¨®n: la incertidumbre sobre si se acabar¨¢ produciendo un boom en la movilidad el¨¦ctrica, tal y como los analistas prev¨¦n. Despu¨¦s de apostar por una moto de corte b¨¢sicamente urbano, su autonom¨ªa supera por poco los 100 kil¨®metros. Y el equipo ha desarrollado un modelo de cuatriciclo ideado tambi¨¦n para cubrir ese movimiento dentro de las ciudades. Al final, Silence considera que el centro de toda su tecnolog¨ªa son sus bater¨ªas y se plantea incluso crear un negocio en torno a su gesti¨®n.

El problema de Silence se llama Great Wall Motors (GWM). El fabricante chino de veh¨ªculos ha sido el ¨²ltimo en aparecer en la puja por los terrenos de Nissan, pero es, en estos momentos, el principal aspirante a ocupar la mayor instalaci¨®n que dejar¨¢ libre Nissan a su marcha, la de la Zona Franca. El grupo asi¨¢tico se plantea, adem¨¢s, la posibilidad de quedarse la factor¨ªa de Montcada i Reixac. Si fuera as¨ª, Silence perder¨ªa una oportunidad de acelerar sus planes de crecimiento, aunque la Generalitat ha manifestado su inter¨¦s de ofrecer alternativas a aquellos proyectos firmes que se queden descabalgados en la pugna por los terrenos de Nissan. La tercera pieza en el puzle que supone la crisis de Seat se llama D-Hub, un variopinto consorcio para ensamblar veh¨ªculos el¨¦ctricos liderados por la espa?ola QEV Technologies, que podr¨ªa quedarse con la planta de Sant Andreu de la Barca.