El BCE acelera la creaci¨®n de un mecanismo para frenar futuras crisis de deuda soberana
La instituci¨®n cambiar¨¢ el programa de reinversi¨®n de deuda para controlar las primas de riesgo del sur de Europa
El Banco Central Europeo (BCE) ense?a por fin los dientes a los mercados. La ret¨®rica ha dado por fin paso a los hechos y la instituci¨®n que preside Christine Lagarde se comprometi¨® a acelerar los trabajos para crear un instrumentos para frenar futuras crisis de la deuda soberana en la zona euro. La decisi¨®n se ha adoptado en una reuni¨®n de urgencia convocada a primera hora de este mi¨¦rcoles, con las primas de riesgo disparadas despu¨¦s del anuncio de subidas de tipos de inter¨¦s la semana pasada. En especial la italiana, que estaba ya en zona de peligro. En un comunicado, el Consejo de Gobierno del BCE ha indicado los dos pasos que ha decidido dar. De inmediato, ha dado luz verde a reinvertir ¡°con flexibilidad¡± los vencimientos de deuda del extinto programa para combatir la pandemia (PEPP, en sus siglas en ingl¨¦s). Es decir, que esa cartera, que asciende a 1,7 billones de euros, se podr¨¢ destinar sobre todo a los pa¨ªses que m¨¢s acusen los ataques de los mercados, incluida Grecia. Y en una segunda fase, se pondr¨¢ en marcha un nuevo mecanismo anticrisis.
Lagarde ya hab¨ªa advertido a los mercados de que no iba a tolerar un ataque a la deuda soberana como el de 2012. No logr¨® convencerlos. Con un tono m¨¢s agresivo y un camino de subidas de tipos por delante, los mercados enseguida se cebaron sobre la deuda de los pa¨ªses del sur de Europa. En particular, sobre la de Italia, que en apenas seis meses afronta unas elecciones clave para Europa. Pero el coste de la deuda se dispar¨® en todo el sur: el rendimiento de la deuda griega el martes hab¨ªa rebasado el 4,5%; la de Italia, el 4%; y la de Portugal, el 3%. En Espa?a tambi¨¦n hab¨ªa escalado hasta el 3%, el m¨¢ximo nivel desde 2014. Y eso a las puertas de un nuevo incremento de los tipos de inter¨¦s en Estados Unidos que puede poner todav¨ªa m¨¢s nerviosos a los mercados.
Isabel Schnabel, miembro del Comit¨¦ Ejecutivo del BCE, sali¨® el martes a intentar calmar las turbulencias. La alemana advirti¨® de nuevo de que el Eurobanco har¨¢ cuanto est¨¦ en su mano para frenar las divergencias de la zona euro que impiden desplegar con eficacia la pol¨ªtica monetaria, que encara una nueva era en la que deja atr¨¢s los tipos negativos y las compras masivas de deuda. La entidad no solo tratar¨¢ de atajar la alt¨ªsima inflaci¨®n, que en los pa¨ªses b¨¢lticos no baja de los dig¨ªtos, sino tambi¨¦n la ¡°fragmentaci¨®n¡± de los mercados de deuda. ¡°Este compromiso no tiene l¨ªmites¡±, zanj¨®.
¡°Flexibilidad¡± en las compras
No obstante, el BCE decidi¨® que ya era la hora de actuar. Los gobernadores de Espa?a, Alemania o Austria cancelaron este mi¨¦rcoles sus actos p¨²blicos y el Consejo de Gobierno del BCE se reuni¨® este mi¨¦rcoles a las 11 de la ma?ana para abordar la inestabilidad en la que est¨¢n instalados los mercados. En un escueto comunicado al finalizar la reuni¨®n, la instituci¨®n ha constatado que la pandemia ha dejado ¡°vulnerabilidades duraderas en la econom¨ªa¡± que contribuyen a la ¡°transmisi¨®n desigual¡± de su pol¨ªtica monetaria que impiden su proceso de ¡°normalizaci¨®n¡± entre jurisdicciones y vuelve a comprometerse a combatir esa desigualdad entre mercados.
Para empezar, la ¡°flexibilidad¡± garantizada por Lagarde dejar¨¢ de ser una promesa. A partir de ahora, el BCE podr¨¢ adquirir de forma prioritaria deuda de pa¨ªses en apuros para contener sus primas de riesgo mediante las reinversiones de deuda procedentes del PEPP. Eso incluye los bonos griegos, que no pod¨ªan ser comprados dentro del programa tradicional de compras (APP, por sus siglas en ingl¨¦s). Es decir, si vence un bono alem¨¢n, el Eurobanco podr¨¢ reinvertirlo en uno de Portugal, por ejemplo. Fr¨¢ncfort cree que esos 1,7 billones del PEPP pueden ser suficientes, pero prepara otra arma por si no lo es. El BCE ha encomendado a sus t¨¦cnicos que ¡°aceleren la finalizaci¨®n del dise?o de un nuevo instrumento antifragmentaci¨®n¡± que posteriormente deber¨¢ ser examinado por el Consejo.
Ah¨ª est¨¢, seg¨²n fuentes consultadas, el meollo de la cuesti¨®n: algunos miembros del Consejo de Gobierno plantean que deber¨ªan imponerse nuevas condiciones a los pa¨ªses que se beneficien de ese instrumento, mientras que otros creen que bastan las contempladas en los planes europeos de recuperaci¨®n. Tambi¨¦n debe definirse cu¨¢ndo podr¨¢ activarse ese mecanismo. ¡°No hay garant¨ªa de que [los miembros del Consejo] lleguen a un consenso sobre dicha herramienta en la pr¨®xima reuni¨®n de pol¨ªtica de julio, por lo que podr¨ªamos ver que los diferenciales se ampl¨ªen m¨¢s antes de que se implemente la nueva herramienta¡±, afirma Jack Allen Reynolds, economista de Capital Economics. Sin embargo, su puesta en marcha tambi¨¦n puede propulsar la subida de tipos al despejar ese temor en el seno del BCE. ¡°En general, esto tambi¨¦n deber¨ªa dar al BCE la oportunidad de subir los tipos de inter¨¦s b¨¢sicos de forma m¨¢s r¨¢pida y agresiva, ya que la ampliaci¨®n de los diferenciales est¨¢ limitada hasta cierto punto¡±, afirma Ulrike Karstens, economista de DWS.
De momento, la decisi¨®n del BCE, de hecho, ha supuesto un respiro para los mercados de deuda soberana. La prima de riesgo de Grecia hab¨ªa ca¨ªdo 32 puntos b¨¢sicos; la de Italia, 25 puntos; la de Espa?a, 15 puntos, y la de Portugal, 18. A la espera de la decisi¨®n de la Reserva Federal, los mercados de valores sub¨ªan, mientas que el euro ca¨ªa frente al d¨®lar despu¨¦s de que se haya percibido ese movimiento como un peque?o paso atr¨¢s de los halcones.
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