El poder transformador del Plan de Recuperaci¨®n
La vicepresidenta y ministra de Asuntos Econ¨®micos defiende las reformas e inversiones impulsadas por el Gobierno
Retomamos el curso pol¨ªtico con una agenda de alta intensidad. En este momento lleno de incertidumbres y tensiones en el ¨¢mbito internacional, la prioridad es seguir dando una respuesta eficaz a los retos m¨¢s urgentes. Y hacerlo con las luces largas, tomando decisiones alineadas con nuestros objetivos estrat¨¦gicos; sin perder de vista que nos enfrentamos a cambios geopol¨ªticos y retos de gran calado, como el cambio clim¨¢tico, que requieren una visi¨®n amplia y grandes dosis de realismo, ambici¨®n, templanza y coherencia.
Responder a lo urgente, sin perder nunca de vista los retos de medio y largo plazo; esa es la hoja de ruta que hemos seguido desde 2018 y que nos ha permitido actuar con eficacia, siempre dentro de una agenda de pol¨ªtica econ¨®mica reformista y modernizadora impulsada con el Plan de Recuperaci¨®n, Transformaci¨®n y Resiliencia gracias a la financiaci¨®n de los fondos europeos Next Generation.
La intensidad de la actualidad diaria a veces no nos permite ver con claridad la magnitud del proceso de reforma que est¨¢ en marcha en Espa?a, sin parang¨®n en nuestra historia reciente, para alinear nuestra econom¨ªa con los pa¨ªses m¨¢s avanzados en cuanto a emprendimiento y clima de negocios, educaci¨®n y formaci¨®n profesional, transici¨®n ecol¨®gica, eficiencia de la administraci¨®n p¨²blica, ciencia e innovaci¨®n tecnol¨®gica y digital.
Las reformas e inversiones en marcha est¨¢n activando un cambio estructural, un shock positivo, que marcar¨¢ el ciclo econ¨®mico iniciado tras la pandemia, aumentando el ritmo de crecimiento sostenible en el futuro al reforzar el capital humano, natural, cient¨ªfico, tecnol¨®gico, institucional y social, en un marco de mayor estabilidad y flexibilidad. Tambi¨¦n se trata de reforzar nuestra autonom¨ªa estrat¨¦gica en el plano energ¨¦tico, agroalimentario, industrial, tecnol¨®gico y digital, ante los nuevos vientos en el escenario geopol¨ªtico.
El Plan de Recuperaci¨®n ha alcanzado la velocidad de crucero en 2022, con un buen ritmo de convocatorias de programas de inversi¨®n a nivel estatal y auton¨®mico, los principales proyectos estrat¨¦gicos en marcha y la agenda de reformas estructurales muy avanzada.
Son muchos los ejemplos de reformas de calado que empiezan a desplegar sus efectos.
Las nuevas leyes de Formaci¨®n Profesional y Educaci¨®n y la futura Ley de Universidades, junto con las importantes inversiones para el refuerzo de la educaci¨®n p¨²blica, su digitalizaci¨®n y los sistemas de formaci¨®n a lo largo de la vida, est¨¢n impulsando el capital humano.
La nueva Ley de Ciencia apoyar¨¢ el fuerte aumento de inversiones p¨²blicas en I+D+i, que se han doblado desde 2018, para impulsar la innovaci¨®n, atraer y retener el talento cient¨ªfico.
Las leyes de Telecomunicaciones, Audiovisual, Ciberseguridad 5G y la futura Ley de startups multiplicar¨¢n en el sector privado el impacto de las inversiones en conectividad, 5G, inteligencia artificial o ciberseguridad de la agenda Espa?a Digital 2026.
La Ley ¡°crea y crece¡± y la importante reforma concursal recientemente aprobadas proporcionar¨¢n un marco favorable al emprendimiento, el crecimiento y la restructuraci¨®n empresarial.
El Plan Nacional de Energ¨ªa y Clima junto con las numerosas reformas normativas y hojas de ruta estrat¨¦gicas - de la e¨®lica marina a la explotaci¨®n minera - permitir¨¢n multiplicar el impacto de las importantes inversiones del Plan de Recuperaci¨®n en la transici¨®n verde, impulsando la energ¨ªa renovable, el hidr¨®geno verde y el almacenamiento, el autoconsumo, la movilidad sostenible, la digitalizaci¨®n el ciclo del agua y la eficiencia energ¨¦tica de edificios e industrias, factores claves de presente y de futuro.
Y todo ello en un contexto de mayor estabilidad y fortaleza, gracias a la Reforma Laboral, que reducir¨¢ la intensidad de los ciclos econ¨®micos al proporcionar a las empresas mecanismos de ajuste flexible sin la destrucci¨®n de empleo del pasado, y a las medidas de refuerzo del sistema fiscal, entre las que cabe se?alar la lucha contra el fraude y el afloramiento de la econom¨ªa sumergida.
No cabe duda de que el contexto internacional es complejo, tenemos retos importantes de corto plazo, como la alta inflaci¨®n, hay mucha incertidumbre y los ciudadanos sienten zozobra y preocupaci¨®n.
Pero hay buenas razones para mirar al futuro con confianza: respondimos bien a la pandemia y hemos evitado una crisis profunda y duradera como las del pasado, apoyando a los m¨¢s vulnerables e impidiendo la apertura de una nueva brecha de desigualdad; la econom¨ªa espa?ola est¨¢ resistiendo bien hasta ahora ante un contexto internacional muy convulso; la impresionante evoluci¨®n del empleo est¨¢ cambiando las perspectivas vitales de j¨®venes y familias; estamos cumpliendo los objetivos de la senda de reducci¨®n del d¨¦ficit y la deuda, con responsabilidad fiscal y justicia intergeneracional; a diferencia del pasado, hemos mantenido un buen ritmo de inversi¨®n productiva de futuro y vamos en la buena direcci¨®n con el proceso de modernizaci¨®n del pa¨ªs apoyado en los fondos europeos.
Adem¨¢s, hemos impulsado una respuesta europea progresista a los retos globales y Espa?a tiene un Gobierno respetado e influyente a nivel internacional que ha demostrado su liderazgo, su capacidad de gesti¨®n y su compromiso con el inter¨¦s general.
Todav¨ªa queda camino por recorrer para culminar el proceso iniciado en estos a?os pero tenemos una base s¨®lida sobre la que seguir progresando y modernizando nuestro pa¨ªs. Hag¨¢moslo. Sin complacencia, con sentido de responsabilidad, pensando siempre en los ciudadanos y en su futuro.
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