La guerra de las dependientas de Inditex no cesa en A Coru?a: har¨¢n huelga el pr¨®ximo 23 y el 7 de enero
¡°Nosotras somos las que metemos el dinero en la caja¡± recuerdan las empleadas, que este s¨¢bado celebrar¨¢n en la calle una exposici¨®n paralela a la glamurosa muestra de Steven Meisel que ha montado Marta Ortega
Los beneficios gal¨¢cticos de las tiendas de Inditex volver¨¢n a flaquear en la provincia de A Coru?a, cuna y epicentro del grupo empresarial fundado por Amancio Ortega, la persona m¨¢s rica de Espa?a, en fechas estrella para el comercio. Las dependientas de las cadenas Tempe, Oysho, Zara Home, Bershka, Stradivarius, Lefties, Pull&Bear, Massimo Dutti y Zara han acordado ir a la huelga el 23 de diciembre, v¨ªspera de Nochebuena, y el 7 de enero, primera jornada del periodo de rebajas, un d¨ªa de avalancha tanto por la caza de descuentos como por las devoluciones masivas de regalos navide?os. Las vendedoras (un 98% son mujeres) ya hicieron huelga en el Black Friday, con concentraciones delante de las tiendas, donde se vivieron momentos muy tensos, con una fuerte presi¨®n de la polic¨ªa nacional.
¡°Los agentes no estaban all¨ª para garantizar el derecho a la huelga de la plantilla, sino el derecho a las compras del piquete de clientas que se empe?aba en entrar¡±, resume su visi¨®n de los hechos Carmi?a Naveira, dependienta desde 1997, presidenta del comit¨¦ de Zara y representante de CIG-Servizos (Confederaci¨®n Intersindical Galega). De puertas (y a veces rejas) adentro, cuenta la sindicalista, atend¨ªan al p¨²blico solo ¡°las encargadas¡± y ¡°puestos intermedios¡± que no pod¨ªan unirse a la huelga pero que, seg¨²n ella, ¡°respetan¡± la causa de esta lucha laboral. Las escenas prometen repetirse en los pr¨®ximos d¨ªas, despu¨¦s de que este sindicato, mayoritario en la provincia, no haya aceptado la subida salarial de 180 euros, escalonados en tres a?os que, seg¨²n explican, propone la empresa.
Las empleadas, que tambi¨¦n protagonizaron a principios de noviembre una multitudinaria manifestaci¨®n en A Coru?a, decidieron ir a la guerra por sus sueldos mileuristas. Aseguran que cobran ¡°la mitad que los mozos de almac¨¦n¡± de la central de Arteixo (A Coru?a) y no disfrutan de las numerosas ventajas que s¨ª gozan los compa?eros del inmenso complejo log¨ªstico en el pol¨ªgono empresarial de Sab¨®n, donde incluso los men¨²s ecol¨®gicos les cuestan menos de tres euros. Las dependientas que dan la cara al p¨²blico y son el primer eslab¨®n de todo el emporio textil (unas 1.200 trabajadoras en la provincia) no aspiran a igualarse con los mozos, pero s¨ª a ¡°llegar a fin de mes¡±, claman en las pancartas que tienen desplegadas por las ciudades coru?esas.
¡°Nosotras somos las que metemos el dinero en la caja¡±, reivindica la delegada sindical. Para hacer frente al encarecimiento de la vida y desahogar sus ¡°precarias¡± econom¨ªas dom¨¦sticas, demandan una subida de 440 euros, pero la compa?¨ªa de beneficios multimillonarios (un r¨¦cord de 1.301 millones en el tercer trimestre) que ahora preside la heredera Marta Ortega solo ha accedido, explica la representante de la CIG, a aumentarles 180. Esta cantidad no llegar¨¢ a sus n¨®minas de un golpe, sino que se har¨¢ efectiva de forma escalonada ¡°a lo largo de tres a?os: 120 en 2022, 20 euros en 2023 y 40 en 2024¡å.
El primer pago ya lo han visto reflejado en sus sueldos, pero nada saben de las otras promesas anunciadas tras el acuerdo firmado en Madrid por CC OO y UGT, en una negociaci¨®n general para toda Espa?a a la que no estaba convocada la CIG. El pacto obedec¨ªa a un intento de la multinacional para que las trabajadoras coru?esas desconvocasen su paro del fin de semana del Black Friday. Pero el sindicato con m¨¢s fuerza en A Coru?a se mantuvo en pie de guerra. Naveira asegura que nadie les ha ¡°sabido explicar¡± los t¨¦rminos del acuerdo, en el que se habl¨® de un incentivo de 1.000 euros por ventas en la n¨®mina de febrero y, en concreto para las empleadas coru?esas, un incremento del plus de sede que ya ten¨ªan hasta alcanzar los 2.700 euros anuales en 2022; los 3.000, en 2023 y los 3.600 en 2024.
Seg¨²n Carmi?a Naveira, esta promesa, de momento, no se ha empezado a materializar. ¡°No sabemos nada de nada; ni qu¨¦ se firm¨®¡±, protesta la presidenta del comit¨¦. Sobre los 1.000 euros de febrero, comenta que las empleadas no saben ¡°si es por ventas, o por objetivos, o por qu¨¦¡± y los 2.700 tampoco saben si responden a ¡°atrasos¡±. Mientras no lo tengan claro, ellas planean seguir adelante con un apretado calendario de movilizaciones y volver¨¢n a salir a la calle con esos carteles que ya portaron en su manifestaci¨®n de noviembre y en las concentraciones de los d¨ªas del Black Friday: ¡°Trabajo en Massimo, salario m¨ªnimo¡±; ¡°Trabajo en Inditex y como arroz todo el mes¡±, ¡°Trabajo en Bershka, no tengo para comida fresca¡±, ¡°Trabajo en Pull&Bear, no tengo para vivir¡±.
Su objetivo es el aumento de 440 euros mensuales, de ah¨ª que una de las acciones que preparan para este mismo s¨¢bado 17 en la capital provincial sea una exposici¨®n fotogr¨¢fica que han bautizado ir¨®nicamente Inditesel 440. El t¨ªtulo alude a la muestra Steven Meisel 1993, inaugurada recientemente y con todo el glamur imaginable por Marta Ortega y una corte de celebridades internacionales de la moda llevadas para la ocasi¨®n a A Coru?a.
La exposici¨®n de las empleadas se enmarca en la sesi¨®n ¡°informativa y de concienciaci¨®n¡± que llevar¨¢n a cabo en la calle Compostela, junto a la tienda insignia de Zara, entre el mediod¨ªa y las ocho de la tarde. En un cartel anunciador aparecen unas modelos meg¨¢fono en ristre tras una pancarta reivindicativa: ¡°Inditex castiga a las dependientas¡±. Otro de ellos clama ¡°basta ya, somos invisibles¡±. La plantilla de las tiendas quiere dar a conocer la diferencia de trato que, seg¨²n denuncian, hace el grupo empresarial entre las dependientas y los trabajadores de la central en Sab¨®n, estos d¨ªas llena de luces y adornos navide?os. Al tiempo que ense?a fotograf¨ªas y v¨ªdeos como prueba, Naveira cuenta que solo dos d¨ªas despu¨¦s del Black Friday en el que ellas plantaron cara a Inditex, en la sede administrativa y log¨ªstica de Arteixo ¡°repartieron raciones de pulpo ¨¢ feira¡± para el personal y llevaron ¡°un espect¨¢culo¡± de danza.
La presidenta del comit¨¦ de Zara avanza que las dependientas tambi¨¦n convocar¨¢n una rueda de prensa para el pr¨®ximo d¨ªa 22 y que se van a concentrar el 27 de diciembre en Sab¨®n, un acto que va a ser respaldado ¡°por las trabajadoras de Ponferrada¡± y por otros sindicatos. ¡°Gente de todas partes se nos va sumando. Ya recibimos llamadas de compa?eras de Brasil y de Francia, que afirman que est¨¢n pasando por lo mismo. Tambi¨¦n en Londres nos han contado que no pueden con la carga de trabajo¡±, comenta. ¡°Nosotras lo vemos as¨ª¡±, lamenta la representante de las vendedoras: ¡°Con una inmensa mayoria femenina entre las dependientas, el trato que nos da Inditex es un ataque como mujeres¡±.
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